Si bien son normales en temporadas de frío los pacientes con síntomas gastrointestinales o rotavirus, actualmente en el servicio de urgencias pediátrica del Hospital de Clínicas están atendiendo casos de todo tipo en los que que se observan, además, deshidratación. Al respecto, el doctor Ricardo Iramain, jefe del área, dijo que eso es lo alarmante e insta a los padres a no restar importancia a las manifestaciones, especialmente aquellas familias en el que alguno de sus miembros haya pasado por el COVID-19.

Afirmó que debe ser un llamado de atención para los padres cuando sus hijos e hijas comienzan a tener posiciones diarreicas de tres o más veces. “Esta manifestación debe ser atendida rápidamente por el especialista de área pediátrica y evaluar si a causa de ello ya se produjo la deshidratación; porque son preocupantes los casos que están llegando de gastroenteritis aguda con deshidrataciones importantes, que requieren de fluidos en forma rápida”, apuntó.

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El pediatra indicó que en el servicio de urgencias pediátricas del hospital tienen registrados a dos niños con COVID-19 complicado, cuyos padres han tenido la enfermedad. La complicación que presentan es denominada síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico (MIS-C, por sus siglas en inglés), afección que se observa en pediátricos a las 3 o 4 semanas de haber contraído el SARs-CoV-2.

“Los cuadros de COVID en niños es más complicado con este síndrome, porque tiende a afectar varios órganos como el corazón, riñón, hígado, pulmón, y se presenta con síntomas gastrointestinales como diarrea, vómito, dolor abdominal, que también son señales de alarma que tienen que tener muy en cuenta los padres”, sostuvo.

Aseguró que no se debe considerar una simple gastroenteritis o diarrea virósica, sobre todo cuando hay contexto de COVID en la familia. Manifestó que hay que prestar atención y tener en cuenta estos tipos de indicios como señales de alarma para una consulta precoz.

Es este sentido, es importante remarcar que el contexto de la pandemia ha generado confusiones en los círculos familiares al momento de decidir acudir a los consultorios de urgencia de los hospitales o sanatorios por el temor del coronavirus. Si bien los casos de COVID-19 y rotavirus en pediátricos son las afecciones más comunes, Iramain recomienda acudir al médico, bajo los protocolos sanitarios, y evitar la automedicación.

El servicio de urgencias pediátricas del hospital atiende las 24 horas. El mismo está dispuesto con un área de urgencias respiratorias y las urgencias polivalentes.

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Por otro lado, el servicio atiende cuadros respiratorios también propios de los cambios de clima, como la bronquitis, la neumonía y la pulmonía.

El profesional mencionó que los casos de neumonías requieren una observación de varias horas, a veces de 24 horas inclusive, con hidratación intravenosa por la falta de líquido debido a la infección en el pulmón. En tanto la pulmonía hay que tener en cuenta que empieza como una gripe sencilla, a la que se acostumbra automedicar y es importante recalcar que no es conveniente.

“Los signos deben ser de alarma para acudir a la consulta de urgencias y evitar las complicaciones del cuadro, como el derrame pleural, que es la presencia de líquido en el pulmón, que se da por la consulta tardía, y esto puede ocasionar complicaciones en el tratamiento oportuno y adecuado”, destacó.