El mandatario Santiago Peña tuvo un encuentro con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, el sábado pasado, en el marco de la ceremonia de reapertura de la catedral de Notre Dame en París, que se había incendiado en el 2019; acto presidido por el presidente francés Emmanuel Macrón. El jefe de Estado paraguayo comentó, en una entrevista con AFP en Francia, sobre la positiva impresión del líder republicano hacia Paraguay.
Peña también aludió a la conexión guaraní del diplomático Christopher Landau, exembajador de México, designado como futuro subsecretario de Estado. Se trata del hijo de George Landau, que fue embajador de Estados Unidos en Paraguay entre 1972 a 1977, años en que aprendió español en Asunción, según revela una publicación de la representación diplomática.
El mandatario paraguayo viajó rumbo a Francia luego de participar de la última cumbre del Mercosur en Montevideo (Uruguay), el viernes pasado, que fue clave para sellar el acuerdo entre este bloque regional con la Unión Europea, tras 25 años de negociaciones. Peña comentó a AFP el alcance de este logro, ante la oposición de algunos países europeos, y defendió el regreso a Jerusalén de la embajada paraguaya en Israel.
- Pregunta: El sábado, estuvo en la reapertura de Notre Dame, ¿pudo conversar con Trump?
- Respuesta: La noche del sábado hubo una cena luego de la inauguración en el Palacio Elíseo. Conversé con él brevemente, donde reafirmamos la intención de trabajar juntos y que él vea Paraguay como un gran aliado.
Reconoce que Paraguay está haciendo bien las cosas. La economía crece, hay progreso económico y social. Tenemos por supuesto una alineación política a nivel internacional muy fuerte. Nuestra relación con Taiwán es una materia de importancia para Estados Unidos, como también nuestra cercanía con Israel.
Hoy estamos en una situación inmejorable. El designado secretario de Estado, Marco Rubio, es el único senador americano que ha visitado Paraguay. Hoy se anunció que el subsecretario de Estado (Christopher Landau) es una persona que vivió en Paraguay, que habla inclusive el guaraní.
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- El viernes, la UE y Mercosur finalizaron en Montevideo la negociación de un tratado de libre comercio. ¿Cuándo entrará en vigor?
- Esto va a requerir un trabajo, primero de terminar de escribir todos los detalles y, a partir de ahí, un largo proceso de validación. En el caso del Mercosur, es relativamente fácil, son 5 países. En el caso de la UE, son 27.
Yo estoy entusiasmado, pero no estoy satisfecho porque creo que podemos hacer muchísimo más. Como el mundo nos ha demostrado, cuando se ha incrementado el comercio, en términos netos hay más ganadores que perdedores y los perdedores estaban mejor de lo que estaban antes, también.
Entonces, esto va a traer beneficios para Europa, principalmente, y también para América Latina. En el contexto que estamos viviendo, la seguridad alimentaria es algo muy importante. No hay capacidad de producir alimentos para todo el mundo, un mundo que está creciendo en población y una población que está deseando alimentarse mejor.
América Latina en general y Mercosur en particular, produciendo cerca del 60 % de toda la proteína del mundo, deben tener un acuerdo comercial con un aliado que comparte principios y valores como libertad, democracia, derechos humanos, Estado de derecho.
Tardamos mucho para llegar hasta acá. Ahora no nos pueden pasar otros 25 años para que entre en efecto.
- ¿Qué dice a los países del lado europeo como Francia e Italia que se oponen al acuerdo?
- Hay que tratar de entender mejor, hay que perder los miedos. Tenemos que conocer mejor qué es lo que podemos hacer, qué es lo que no podemos hacer. Al interior de cada país van a tener que tener este debate.
Los procesos de cambio siempre son difíciles, porque los que sienten que van a perder un privilegio son los primeros en enterarse, y la gran mayoría que se va a beneficiar es la última en enterarse.
Tenemos que hacer que la información fluya de manera correcta en todos los sectores: en los que tienen el temor, tienen que saber que no tienen por qué sentirse atemorizados, que esto no debería ser una pérdida; y los que van a ganar, van a ganar muchísimo.
- En la cumbre del Mercosur, Milei abogó por un “régimen de mayor flexibilidad y autonomía comercial para los integrantes del bloque” sudamericano. ¿Qué piensa usted?
- Yo creo que una Argentina más liberal, más libre, es algo que deseamos los países del Mercosur, y Argentina está viviendo una transición que lo está llevando del país más proteccionista del Mercosur, más proteccionista que Brasil, a tratar de ser un país muy flexible y muy abierto.
Está en el camino, no llegó todavía. Entonces lo que Milei está diciendo es: ‘Yo quiero llegar a ese lugar, pero yo hoy no estoy’.
- ¿Esto no supondría romper el principio de que todo el bloque debe negociar unido los acuerdos comerciales?
Yo creo que no. Hay mucha gente que lo interpreta [así], pero hoy Argentina no está en condiciones de discutir un acuerdo de libre comercio con, por ejemplo, Estados Unidos o con China, ya que le va a llevar a tener que tomar decisiones que hoy no está tomando, ni siquiera dentro del bloque que ya tiene un acuerdo de libre comercio.
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- ¿Cuál es el mensaje que quiere enviar con el regreso de la embajada paraguaya en Israel a Jerusalén, sobre todo cuando usted reconoce que es un tema controversial?
- Supercontroversial. Solamente un país que ha vivido el riesgo de exterminio puede saber lo que significa ser atacado. Paraguay, en el año 1864, fue víctima de una triple infamia o la guerra de la Triple Alianza.
Nosotros ya habíamos abierto la embajada en Jerusalén en el año 2018 y, luego por desavenencias políticas internas, decidieron con enorme consecuencia para Paraguay romper las relaciones con un país.
Yo hice campaña sobre este tema [en las elecciones paraguayas de abril de 2023], le dije al pueblo paraguayo que lo iba a hacer. El pueblo paraguayo quiere esto.
En septiembre del año pasado, cuando me reuní con el primer ministro Benjamin Netanyahu en Naciones Unidas antes de los ataques, le había anunciado que tenía la decisión de reabrir y le pedí que reabra la embajada de Israel en Paraguay. Lo hicieron hace 3 meses.
- Pero el contexto ha cambiado. La Corte Penal Internacional ha emitido órdenes de arresto contra el señor Netanyahu...
- Lo cual nosotros condenamos y rechazamos. Nosotros hemos puesto una carta también diciendo que tenemos serias dudas sobre el procedimiento que se utilizó y las razones.
No podemos igualar a un gobierno democráticamente electo con un grupo terrorista. Israel no está luchando contra Palestina, a quien nosotros reconocemos como Estado. Está luchando contra Hamás, contra Hezbolá, contra el ISIS.
- Esto quiere decir que, si Netanyahu viaja a Paraguay, ¿no lo van a detener?
- No, ninguna posibilidad. Claro que no.
Fuente: AFP.