“Perdí las esperanzas”, sostuvo el gobernador del departamento de Amambay, Ronald Acevedo, ante el avance del crimen organizado en el Paraguay y la falta de políticas de Estado para combatir el flagelo que continúa cobrándose la vida de varios ciudadanos, entre ellos la de su hija. Al respecto, agregó que el Gobierno solo emite discursos, pero no implementa una mano dura contra los criminales.
“Detrás de estos criminales, jefes de sicarios, existe gente muy poderosa que maneja a toda la Policía, el crimen organizado es una empresa grande y le tienen de las bolas a los policías, a ciertos fiscales y a los jueces, ellos manejan las instituciones, por eso no se investigan los hechos. Entonces, de los cientos de crímenes que suceden en Amambay, ¿cuántos son esclarecidos? Es un terreno fértil para ellos”, dijo el dirigente del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA).
En ese sentido, Acevedo manifestó que es necesario implementar un combate frontal contra el crimen organizado y el narcotráfico, colocando como ejemplo todas las acciones que fueron implementadas en Colombia en el transcurso de los años.
“Nosotros ya nos acostumbramos, no tenemos respuestas del Gobierno, una política de seguridad en el país, entonces sálvense quien pueda. No se hace nada, se hacen solo discursos, escuche al ministro del Interior, al presidente de la República, son solo discursos, pero no hay una política de Estado”, dijo.
Al respecto, Acevedo recordó las declaraciones realizadas años atrás por su hermano, el exlegislador Robert Acevedo, quien en varias ocasiones advirtió a las autoridades que el Paraguay se encuentra camino a ser la próxima Sinaloa.
“Colombia es un país que estaba prácticamente con varios problemas, pero pusieron mano dura, murieron varias personas, pero hacen un combate frontal a esto y nosotros debemos hacerlo, caso contrario no lo vamos a atajar y como decía mi hermano Robert Acevedo, se volverá esto Sinaloa, vamos camino a eso”, sentenció en comunicación con la radio 780 AM.
El liberal puntualizó que no amerita “llorar por la leche derramada” si no se implementan las políticas necesarias de seguridad para hacer frente a los criminales. “No amerita llorar sobre la leche derramada, esto seguirá ocurriendo, cuando pasó el crimen de mi hija a los gritos yo pedía, vamos a hacer algo, seguirá ocurriendo, mencionaba. En Amambay estuvieron 15 días los policías y se mandaron a mudar porque no tenían presupuesto”, puntualizó.
Crimen de su hija
Respecto al crimen de su hija registrado el pasado año relacionado a un enfrentamiento entre grupos de narcotraficantes, Acevedo manifestó que no existen mayores avances, pero aseguró que aún sigue confiando en las investigaciones que son hechas por el Ministerio Público bajo el liderazgo de Sandra Quiñónez.
En ese sentido, comentó que uno de los principales sospechosos del asesinato, el presunto capo narco Marcio Sánchez Giménez, alias Aguacate, continúa viviendo de manera campante por la zona, incluso su estructura criminal sigue funcionando al 100% frente a la vista gorda de los encargados del sistema de seguridad en la zona.
“Anda por acá normalmente, él es el secretario de los poderosos, el tipo es una persona importante dentro de la estructura, es el número 10 de la cancha. En la zona se maneja y todos sabemos, toda su estructura está acá al cien por ciento y funciona a la vista de todos. Hay más personas de la misma calaña, peligrosas, y ahora veo que ya están en la capital también. El dolor lo llevo a flor de piel y lo que pasó no le deseo a nadie, ni a mi peor enemigo, sé que vamos camino a Sinaloa, es lo que veo y siento, no se está haciendo nada”, sentenció el jefe departamental.