Hace un par de semanas, Juan Manuel Brunetti, ministro de Educación, informó que aproximadamente unos 15.000 docentes ya recibieron la vacuna contra el COVID-19 gracias a la ampliación de la franja etaria para la inmunización.
A consecuencia de ello, el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) estima que para el segundo semestre del año las actividades educativas volverían al formato presencial. Esto, independientemente a que varias instituciones educativas del sector privado optaron desde el inicio por desarrollar el programa escolar mediante las clases presenciales.
¿Considera conveniente normalizar las actividades educativas este año? Esa fue la consulta planteada por La Nación a sus lectores. El 73% de los votantes considera que “Se debería esperar al 2022 y evaluar la situación sanitaria”, mientras que el 21% cree que “Sí, son muy necesarias” y solo el 6% señaló que “No, son muy arriesgadas”.
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Recordemos que el MEC decidió extender a tres semanas las vacaciones de invierno a causa de la pandemia del COVID-19. Estas se iniciarán el lunes 12 de julio y se extenderán hasta el 30 del mismo mes, medida que afectará a estudiantes de colegios del sector público y privado; además, durante el receso a los alumnos no se les asignarán tareas escolares.
Lo que se busca con la extensión de las vacaciones es que los estudiantes se desconecten del estrés que genera la crisis sanitaria, de manera que para el segundo periodo del año lectivo, tras la pausa, vuelvan renovados y así darle un enfoque diferente a los estudios.
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