Este miércoles surgió una denuncia realizada por una mujer que aceptó trabajar en una casa de familia en la modalidad sin retiro, para lograr llevar el pan de cada día a su propia familia en medio de esta crisis sanitaria por el COVID-19, pero supuestamente solo recibió maltratos por parte de la contratante que sería una funcionaría de la Municipalidad de Asunción.

Según el portal Realidades Ciudadanas que accedió a todas las capturas pantalla de los mensajes en el que se puede apreciar la forma en la que la mujer identificada como Liliana Acosta, desde un principio, se muestra arrogante y muy insensible con Liz, una joven madre que desea trabajar para mantener a su pequeña hija y sus padres.

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“Sin retiro es el trabajo”, dice en el primer mensaje que fue enviado a Liz que se contactó con ella. Esta acepta el trabajo teniendo en cuenta la necesidad actual y que el sueldo sería de 1.500.000 guaraníes. “Igual puedo quedarme, sin problema. De lunes a viernes o de lunes a sábado”.

La funcionaria, desde el primer día que empezó a trabajar la mujer (el 6 de abril pasado), la trataba muy mal, tratando de encontrar errores en su trabajo siempre, según la denuncia. En todo momento, la joven madre se mostró muy amable, para conservar su trabajo, pero la misma no aguantó y tuvo que renunciar.

Liliana Acosta sindicada como la mujer que supuestamente maltrataba a su empleada. Foto: Gentileza.

Día del Trabajador

El horario de trabajo comenzaba a las 6:00 y podía descansar desde las 20:00, pero casi todos los días el horario se extendía hasta medianoche. En tanto que cuando por fin llegaba el día en que Liz podía retirarse para pasar con su familia y su hija de 4 años, siempre había algún conflicto.

La última escena fue un día antes del feriado pasado por el Día del Trabajador, como era sábado, la mujer planeaba trabajar hasta el viernes y volver el domingo por la noche, pero esto desató la ira de la empleadora. “Déjame en paz, Liz”, fueron sus palabras ante el pedido de la joven.

Esto hizo que Liz decida renunciar al trabajo y no aguantar más este tipo de tratos, pero eso no termina ahí ya que ante la renuncia presentada por la joven que trabajó por un mes en la vivienda de Liliana, esta decidió pagarle solo una parte del sueldo acordado entre las partes.

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El mensaje que colmó la paciencia. Foto: Gentileza.

Trabajó por un mes y le pagó lo que quiso

“Espero que nunca pase lo que pasé yo, señora. Se aprovechó de mí desde el 6 de abril hasta hoy, 30 (de abril), y me da 800.000 guaraníes y el sueldo que quedamos era 1.500.000 guaraníes”, contestó la joven. Agregó que nadie merece todo el maltrato por el que pasó.

“Hoy me llamó tilinga de mierda y mal educada por dejar pasar a sus amigas, pero usted qué educación tiene para tratarme así. Todos los días me trató por el suelo y yo jamás le falté el respeto, siempre le traté de gran señora, no se valió que me trate así de mal”, dijo Liz.

Aseguró que todo el tiempo trabajó desde las 6:00 hasta las 23:00 ó 0:00, por cuatro semanas, y que todo el tiempo fue maltratada verbalmente por la señora Liliana Acosta, que finalmente solo le pagó poco más de la mitad del sueldo acordado.

Algunos de los tantos mensajes maltratando a la joven. Foto: Gentileza.

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