Francia abrirá sus archivos judiciales de la guerra de Argelia (1954-1962) “quince años antes de lo previsto”, para poder “contemplar la verdad de frente”, declaró este viernes la ministra de Cultura francesa, Roselyne Bachelot.
“Abro quince años antes de lo previsto los archivos sobre las investigaciones judiciales, de la gendarmería y de la policía sobre la guerra de Argelia”, anunció la ministra en la emisora BFMTV.
Las relaciones diplomáticas entre Francia y Argelia, que históricamente han sido difíciles tras la traumática independencia de la colonia en 1962, han vuelto a sufrir una crisis en los últimos meses. El presidente Emmanuel Macron desató la ira de Argel al acusar al “sistema político-militar” argelino de mantener “una renta” de la memoria, para explicar a su pueblo “una historia oficial que no se basa en la verdad”.
Argel llamó a consultas a su embajador en París y prohibió el acceso al espacio aéreo argelino a los aviones militares franceses que participan en la operación Barkhane en el desierto del Sahel. Como parte de los esfuerzos para desactivar la crisis, el ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, visitó Argel hace dos días.
“Cuestión problemática”
Macron ha emprendido una política que ha calificado de “pequeños pasos” para rendir cuentas sobre la actuación de las fuerzas armadas y policiales durante ese sangriento conflicto, que traumatizó a ambas partes. Y al mismo tiempo, pidiendo a Argel que haga lo mismo.
El pasado 16 de octubre, dos semanas después de la crisis diplomática, el presidente francés condenaba los “crímenes inexcusables” durante la letal represión policial contra una protesta de argelinos en París el 17 de octubre de 1961.
La apertura de los archivos judiciales es un nuevo gesto de transparencia, pero se inscribe también en una tensa campaña política, en la que hay candidatos presidenciales rivales, como el polemista de extrema derecha Eric Zemmour, que cuestionan los intentos de apaciguamiento con Argel.
Relato nacional basado en mentiras
“Es una cuestión problemática, irritante, en la que están maniobrando falsificadores de la historia. Quiero que podamos examinarla de frente. No se construye un relato nacional sobre una mentira”, declaró la ministra de Cultura francesa.
“Es la falsificación la que provoca (...) todos los problemas, todos los odios. A partir del momento en el que se ponen todos los hechos sobre la mesa, cuando son reconocidos, analizados, es a partir de ese momento que se puede construir otra historia, una reconciliación”, enfatizó.
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Argelia reprocha en particular a Francia desde hace décadas que no ha hecho lo suficiente para reconocer el uso de la tortura por parte del ejército durante la sangrienta guerra. Reconocer los actos de tortura “va en el interés” de Francia, explicó Bachelot.
París desea al mismo tiempo que Argelia reconozca los atentados y actos de violencia perpetrados tanto en lo que era la colonia como en el territorio metropolitano, por los grupos que obraron por la independencia.
Simplificar procedimiento
Macron reconoció el 13 de setiembre de 2018 que la desaparición del matemático y militante comunista Maurice Audin, en 1957 en Argel, fue perpetrado por fuerzas francesas. Macron prometió entonces a la familia acceso a los archivos. El 9 de marzo de 2021 el presidente anunció igualmente que simplificaría el procedimiento para desclasificar archivos que tienen más de 50 años, tras quejas de investigadores universitarios.
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“Es una señal importante respecto a Argelia (...) aunque esta política forma parte de una iniciativa solamente francesa” matizó Karim Amellal, francoargelino y delegado interministerial para el Mediterráneo. Sesenta años después del fin de la guerra, los historiadores argelinos aún esperan que su gobierno abra los archivos nacionales sobre ese periodo. “La demanda data de como mínimo diez años” se quejó el historiador Amar Mohand-Amer en declaraciones a TV5.
Fuente: AFP.