La Semana Santa es una festividad muy importante en el año y un momento lleno de tradiciones. Para los más pequeños del hogar, la parte más entretenida puede ser ayudar a preparar la chipa y disfrutar del postre del Domingo de Resurrección: los huevos de Pascua.

Más allá de las fechas, la mayoría puede notar que llega Semana Santa al ver los comercios llenos de huevos de chocolates. Los hay de diferentes tamaños, formas, sabores, con o sin sorpresas, industriales, artesanales y más. Elegir puede llegar a ser un desafío con tanta variedad pero, ¿por qué se come chocolate el Domingo de Resurrección?

Existen diferentes teorías sobre esta tradición y la mayoría coinciden en un punto: la abstinencia en Cuaresma. En ese periodo, los creyentes tenían que evitar varios alimentos, entre ellos estaban los lácteos y los huevos. Como las gallinas continuaban poniendo huevos durante los días que no se consumían, los fieles los bañaban en cera y decoraban para después regalarlos en la iglesia cuando llegaba la festividad.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Lee más sobre: Piqué y Clara Chía disfrutan su romance, tras la partida de Shakira

En muchos países se regalan huevos de Pascuas de chocolate como símbolo de renovación y vida, ya que la palabra Pascuas significa exactamente “vida nueva”. Si bien no hay una norma de exclusividad para el día que debe consumirse, la tradición es que se comparta el domingo para celebrar la resurrección de Jesús después de ser crucificado.

Otras versiones

Existen otras teorías de la invención de los huevos de Pascua. Una afirma que el primer huevo de chocolate llegó a la corte de Luis XIV en Versalles. Otra data el año 1725 en Turín, cuando una viuda italiana de apellido Giambone empezó a prepararlos usando huevos de gallina vacíos como molde y chocolate derretido. La mujer era propietaria de una tienda de dulces en Vía Roma y su invención tuvo un gran éxito en Turín.

Te puede interesar: ¡Lo hizo de nuevo! Alder Alcides causó furor con nuevo hit para Semana Santa

Dejanos tu comentario