El Día del Recuerdo del Holocausto y el Heroísmo es una conmemoración nacional en Israel que recuerda a los seis millones de judíos asesinados durante la Segunda Guerra Mundial.

Se trata de una jornada solemne que este año se inicia con la puesta del sol del miércoles 7 de abril y finaliza al atardecer del día siguiente, de acuerdo a la forma tradicional judía de determinar el día.

Informe sobre el antisemitismo

El mismo día del inicio de la importante conmemoración, el Centro Kantor para el Estudio del Judaísmo Europeo Contemporáneo en la Facultad de Humanidades de la Universidad de Tel Aviv, en cooperación con el Congreso Judío Europeo, publicó el Reporte de Antisemitismo del 2020 (Odio contra los judíos), indicando tendencias contradictorias.

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Por un lado, el informe explica que se produjo una disminución en la violencia física debido a los cierres, que redujeron los encuentros entre judíos y antisemitas violentos, pero, por el contrario, aumentaron las expresiones antisemitas flagrantes en internet en general y en especial en las redes sociales.

Red internacional

El reporte se basa en miles de testimonios de diferentes lugares alrededor del mundo recibidos durante el año 2020 de la red internacional establecida por el Centro Kantor hace varios años – ue incluye cerca de 60 participantes que envían regularmente información sobre antisemitismo en todo el mundo.

A raíz de los cierres en los diferentes países, se redujeron los encuentros entre judíos y los que quieren atacarlos, y en consecuencia el número de incidentes violentos disminuyó en el 2020 de 456 a 371 –un número que era lo habitual entre los años 2016 y 2018.

Disminución de ataques

Nadie fue asesinado ese año por ser judío y el número de lesiones corporales disminuyó de 170 en el 2019 a 107 en el 2020. El daño a la propiedad privada también se redujo de 130 a 84 incidentes, simplemente porque la gente mayormente se quedó en sus casas.

En la mayoría de los países se registró una disminución en el número de incidentes violentos que involucran tanto a personas como a sus propiedades, amenazas e incendios provocados.

Aumentó el vandalismo

Sin embargo, el vandalismo hacia las propiedades e instituciones comunales judías se mantuvo como antes y en algunos casos incluso aumentó. El número de profanaciones de cementerios, memoriales del Holocausto y otros monumentos judíos aumentó de 77 (2019) a 96 (2020) incidentes en todo el mundo, ya que estos sitios están abiertos y desprotegidos.

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El número de sinagogas vandalizadas también aumentó de 53 (2019) a 63 (2020), ya que al estar cerradas se convierten en presa fácil.

Activistas antivacunas equipararon las restricciones y los cierres para contender la pandemia con las políticas del régimen nazi acusando al “establishment” y los gobiernos de varios países de aplicar medidas de coerción.

Cementerio judío en Jartún, capital de Sudán. Foto AFP.

Infame comparación

De esta manera los cierres fueron comparados con el encarcelamiento en los guetos y campos de concentración, las vacunas fueron descritas como experimentos médicos y los certificados que otorgan privilegios tras la vacunación fueron vistos como el infame procedimiento de “selección” en los campos de exterminio Nazis.

Los antivacunas sintieron que eran tan perseguidos como lo fueron los judíos y la frase en la puerta de Auschwitz sirvió como inspiración para el nuevo eslogan “La vacunación libera”, explica parte del informe.

En Alemania, donde la oposición a las vacunas es particularmente fuerte, los manifestantes llevaron estrellas amarillas en sus vestimentas con la expresión “no vacunado” sustituyendo a la palabra “Judío”, y tildaron de nazi a la canciller Merkel.

La llegada de las vacunas, junto con la vasta campaña de vacunación en Israel, asistida por israelíes y judíos que ocupan puestos destacados en las empresas que producen estas vacunas, como Tal Zaks, director médico jefe de Moderna, y el CEO de Pfizer, Albert Bourla, reforzaron las paranoicas acusaciones: israelíes y judíos se unen para que Israel pueda ser el primero en recuperarse de la pandemia, mientras el resto del mundo hace fila y les pide ayuda.

“Zoombombig”

Al convertirse la aplicación Zoom en un importante medio de comunicación, surgió un fenómeno llamado “zoombombing”, que consiste en invadir conferencias de zoom de sinagogas, centros comunitarios judíos y estudiantes judíos, interrumpiendo las reuniones y utilizando la plataforma para mostrar esvásticas, presentaciones antisemitas, discursos, etc.

Solo en EEUU se registraron 200 casos de “zoombombing”.

La acusación más grave

Cuando la pandemia comenzó a extenderse alrededor del mundo, inmediatamente fue seguida por acusaciones de que el virus había sido desarrollado y estaba siendo propagado por judíos e israelíes.

“Ellos son los que encontrarán una cura y la vacuna para la enfermedad, vendiéndola a un mundo enfermo y obteniendo enormes ganancias”, fue el tipo de mensajes que comenzó a circular por diversas plataformas en internet.

Mensajes y caricaturas

En los meses siguientes esta difamación se extendió rápidamente. El Centro Kantor recibió informes provenientes de decenas de países, en forma de mensajes agresivos y numerosas caricaturas malintencionadas.

Además, la acusación se escuchó no solo en círculos extremistas como supremacistas blancos, cristianos ultraconservadores o los acusadores habituales como Turquía, la Autoridad Palestina, y especialmente Irán, que invirtió esfuerzos en difundir esta acusación, sino poblaciones sin identidades ideológicas o políticas bien definidas.

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