“Paraguay tiene la capacidad y el potencial para convertirse en un centro regional de producción y distribución de energía limpia”, sostuvo el mandatario Santiago Peña, quien encabezó la apertura de la IX Semana de la Energía en la ciudad de Asunción, evento que reúne a los principales actores del ecosistema energético regional.
“Queremos liderar un proceso de integración energética en el que Paraguay se consolide como un pilar estratégico para la sostenibilidad de América Latina. Nuestra posición en el corazón de América del Sur nos impone un destino, ser el motor de la integración sudamericana. La energía limpia que producimos no solo es una fuente para nuestro propio desarrollo, sino un recurso clave para la transición energética de toda la región”, indicó.
De esta forma, Peña destacó que Paraguay es el único país en el mundo con energía 100 por ciento renovable, mediante las entidades binacionales Itaipú y Yacyretá. “El camino hacia una transición energética sostenible no es solo una aspiración, sino una obligación para asegurar un futuro más próspero para todos”, comentó.
Asimismo, durante su intervención, el jefe de Estado acotó: “Paraguay ha demostrado a lo largo de su historia un compromiso firme con la integración energética. Compartimos el aprovechamiento de los recursos hídricos del río Paraná no solo con Brasil, sino también con la hermana república de Argentina mediante dos grandes centrales hidroeléctricas que son modelos de cooperación y desarrollo tecnológico de vanguardia. Me refiero a Itaipú y Yacyretá”.
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Peña lanzó además un llamado a los líderes, expertos, académicos, representantes gubernamentales, empresarios y organizaciones de la sociedad civil a trabajar por un futuro energético que responda a los desafíos climáticos con soluciones audaces y sostenibles.
“Quiero hacer un llamado claro y contundente. No podemos permitir que esta oportunidad se desperdicie. Es momento de elevar nuestra ambición. Este es el momento para demostrar que la cooperación regional no solo es deseable, sino el único camino viable”, refirió.
Señaló también que “Unidos con una voz firme y común, podemos enfrentar los retos energéticos y climáticos que nos desafían y construir juntos una América Latina más próspera, justa y sostenible. El futuro que queremos no se logrará sin esfuerzo, pero tampoco es inalcanzable. Nuestro futuro es brillante y lleno de oportunidades. Que este encuentro sea la piedra que cante una Latinoamérica y Caribe unida, fuerte, integrada, fraterna, de pie ante el mundo para ocupar el sitial que merece”.
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