La embajadora del Paraguay ante la Santa Sede, Leticia Casati Caballero, fue recibida por el papa Francisco en el marco de una audiencia anual, en el Vaticano. El encuentro se desarrolló en un clima cordial y en el que el líder de la Iglesia católica expresó sus inquietudes sobre varios temas de interés universal.
Casati compartió en redes sociales el mensaje que transmitió Francisco en ocasión de la reunión llevada a cabo el día lunes 9 de enero, y de la que participó el cuerpo diplomático acreditado ante la Santa Sede. Así también, destacó la calidez y el cariño con los que Su Santidad se refirió al Paraguay.
“Algunos de los puntos centrales que abordó en su discurso fue el cuidado del medio ambiente, el respeto a la vida desde la concepción hasta la muerte natural”, comentó la diplomática en Twitter.
Asimismo, el papa exteriorizó “su condena al aborto y la pena de muerte en algunos Estados”. La preocupación por la guerra y la censura de la libertad religiosa también fueron temas de preocupación que fueron abordados por el sumo pontífice, quien nuevamente pidió orar por la paz del mundo, y de manera particular, por él.
Jornada histórica
La diplomática participó el pasado 5 de enero de las exequias solemnes del papa emérito Benedicto XVI. Fue una jornada histórica en la que en medio de la bruma y el intenso frío, miles de feligreses asistieron al funeral.
“En 1802 fue la última vez que un papa celebraba el funeral de otro papa, pero en aquella ocasión Pío VI había muerto en Valence 3 años antes, siendo prisionero de Napoleón”, recordó la representante del gobierno paraguayo.
Comentó que ese día, Francisco presidió la misa concelebrada por el cardenal Adalberto Martínez junto con otros cardenales. “Tuve la honra de participar en representación de la República del Paraguay en compañía de numerosos sacerdotes, religiosos y fieles paraguayos”, significó. Finalizada la misa, el féretro del papa Benedicto fue trasladado hasta su última morada, acompañado por un emotivo y respetuoso aplauso y gritos de “santo súbito”.
Casati relató, además, que ya en el interior de la Basílica conversó con la reina emérita Sofía de España, quien recordó su visita al Paraguay en 1990. La funcionaria refirió que en esa oportunidad había trabajado en la organización de la visita, cuando aún se desempeñaba como “una joven funcionaria de Ceremonial del Estado”.
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