Miembros de la Asociación de Excombatientes del Golpe del 2 y 3 de febrero de 1989 expresaron su preocupación por la dilatación en la Cámara de Senadores del estudio del veto total del Ejecutivo al proyecto de ley que establece el pago de indemnización a los excombatientes de la gesta que derrocó al dictador Alfredo Stroessner.
Manifiestan que los miembros de la Comisión de Hacienda del Senado están dilatando el tema sin motivo alguno y anuncian fuertes medidas si es que la Cámara Alta revé su postura y termina aceptando el veto del Ejecutivo.
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En conferencia de prensa, el militar retirado Carlos di María indicó en nombre de sus compañeros que están solicitando a la Cámara de Senadores rechazar el veto del Poder Ejecutivo con relación al pago de indemnización a los actores de la gesta del golpe de 1989. Piden a los legisladores ratificarse en su sanción inicial.
“Estamos viendo con preocupación la no celeridad de este trámite que se lleva en la Comisión de Hacienda y Presupuesto, ya va por segunda vez que están postergando y nosotros ya no estamos más para seguir esperando, ya que tantos años estuvimos esperando”, indicó.
Asimismo, indicó que en el grupo están registrados alrededor de 13 mil conscriptos. Reconoció que existen muchas objeciones respecto al número de beneficiarios, que de acuerdo a lo que fijaron los legisladores en el proyecto de ley deberían recibir una indemnización de 2.000 jornales mínimos. Di María señaló que continuarán luchando hasta conseguir lo que ellos consideran un derecho justo.
“Con esta situación que estamos viendo, que nos están queriendo dejar de lado, nos dejaron con mucha más fuerza. Ahora vamos a trabajar con más fuerza y más cantidad de hombres. Este intento ya fue vetado dos veces y ahora este segundo veto del Ejecutivo nos parece una burla”, cuestionó.
Mientras que el suboficial retirado Victoriano González dijo que están decididos a la violencia o derramar sangre en caso de que el Congreso no rechace el veto del Ejecutivo sobre la indemnización a los excombatientes de febrero de 1989.
“Lastimosamente no esperábamos pasar esta triste batalla, vemos que nuestros camaradas caen enfermos, mueren en el absoluto abandono del Estado, por la ingratitud y se está lucrando con la sangre derramada. A 33 años de esta gesta hemos decidido que no permitiremos más burlas y ellos están incitando a la violencia, están buscando un nuevo derramamiento de sangre”, criticó.