Audios publicados por la Unidad de Investigación de Nación Media expusieron cómo una funcionaria de Justicia contrató un servicio fúnebre para que el cuerpo del abatido líder del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), Osvaldo Villalba, sea trasladado hasta la penitenciaría de Buen Pastor para que su hermana Carmen Villalba lo despida.
“Esto solo demuestra cómo este gobierno llenó de privilegios a un terrorista para que sea velado en el Buen Pastor con todas las facilidades”, sentenció el senador Martín Arévalo para La Nación/Nación Media. Afirmó que las filas de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) probablemente estarán sintiendo vergüenza y humillación con todas las facilidades brindadas a un líder terrorista luego de las labores realizadas en el norte del país para abatirlo.
“Otorgar esa concesión para un criminal, cuando otros no poseen las mismas facilidades, constituye un hecho totalmente repudiable. Ahora lo único que falta es que se le condecore como un héroe a Osvaldo Villalba, es lo último que podrían realizar y no me sorprendería”, subrayó el senador, teniendo en cuenta el sinfín de privilegios ya brindados a la agrupación criminal.
“Esto tiene un solo responsable: el presidente de la República Mario Abdo Benítez. Definitivamente hubo una orden de arriba para que se ejecute cada una de las repudiables acciones llevadas a cabo; definitivamente el primer mandatario no puede decir que no estaba al tanto de todo lo acontecido, es una falta de respeto”, aseguró el congresista.
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Prioridades del Gobierno
El senador manifestó que el Gobierno pareciera exponer de manera clara cuáles son sus prioridades con los sectores que merecen de su mayor atención antes que otros, pues en lugar de mostrarse receptivo y atento a las necesidades de los familiares de las víctimas del EPP, prefieren atender las peticiones de una banda criminal y velar con todos los privilegios a uno de sus líderes abatidos.
“Nunca vi que se lleve el cajón de un criminal fallecido a una penitenciaría para que otra criminal pueda despedirse de él. Esto es inconcebible y pese a las destituciones realizadas, aún queda una deuda pendiente por parte del Gobierno con los familiares de las víctimas que se vieron humilladas con esta demostración de privilegios ostentada por el Estado”, aseveró el parlamentario.
Una de las fundadoras del EPP, Carmen Villalba está recluida en Buen Pastor por secuestro desde 2003. Según el historial, la misma indujo a su hermano Osvaldo a unirse al grupo criminal cuando solo tenía 16 años y participó en el secuestro de Cecilia Cubas en 2004. El domingo pasado, Osvaldo Villalba fue abatido a los 39 años en un enfrentamiento con la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) en zona de cerro Guazú (Amambay), luego de torturar y asesinar a líderes indígenas de Jasuka Venda.