El 18 de febrero pasado, todos los medios de la República se hicieron eco de las declaraciones, en conferencia de prensa, de la ministra de la Secretaría Nacional Antidrogas, Zully Rolón, de que el objetivo del megaoperativo Turf era el presunto narcotraficante Marcus Vinicius Espíndola Marqués de Padua, considerado, según dijo, como uno de los hombres más buscados en Brasil por lavado de dinero, tráfico de drogas y tráfico de activos.
“El objetivo principal por el cual nosotros dimos cumplimiento a la operación era Marcus Vinicius Espíndola de Padua”, expresó la ministra Rolón en conversación con radio Monumental 1080 AM, que publicaba en ese entonces el medio local Última Hora.
De acuerdo al canal Telefuturo, que también forma parte del Grupo Vierci, Marcus Vinicius integraría una red narco internacional, e incluso tendría vínculos con la mafia italiana instalada en el vecino país, atendiendo que el principal destino de los cargamentos de estupefacientes es el continente europeo.
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Las investigaciones del ente antidrogas revelaron que en Paraguay, Marcus Vinicius figura como propietario de la firma Black Eagle Group SA, que blinda vehículos de alta gama y que son utilizados presuntamente para el tráfico de sustancias ilegales; esto, atendiendo que la mayoría de sus clientes tiene vínculos con el crimen organizado.
Otra empresa del presunto narco es Ombu SA, que importa vehículos de alta gama y los blinda para luego venderlos; además, Marcus Vinicius es dueño de varias propiedades en el Paraná Country Club de Hernandarias, predio que fue allanado en el marco del operativo Turf y de donde logró escapar, en las narices de las autoridades, el otro objetivo, Lindomar Reges Furtado.
Tanto Marcus Vinicius como Lindomar Reges Furtado, a decir de la titular de la Senad, son miembros de una organización criminal de tráfico de cocaína, activos y lavado de dinero; ambos, buscados en Brasil.
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Todos estos frondosos antecedentes, al parecer, eran desconocidos por el ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, quien usó un vehículo de la empresa Ombu SA para vacacionar en Brasil a finales de diciembre del 2021, es decir, hace apenas dos meses.
De acuerdo a la Senad, hace 18 meses que investigan a Marcus Vinicius y, sin embargo, el mismo pretendía convertirse en proveedor de equipos de blindajes y chalecos antibalas para el Ministerio del Interior y la Policía Nacional.
Esta mañana, Giuzzio reconoció que alquiló el vehículo de la empresa del supuesto narco capturado en Brasil en el marco de la operación Turf; desmintió a la ministra de la Senad, que dijo que Marcus Vinicius era el objetivo principal del operativo y enfatizó que desconocía sus antecedentes; esto, a pesar de que el mismo era investigado hace meses y en la institución que encabezó hasta hace unos meses.
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Horas después, el propio gerente de la empresa Ombu SA desmintió que Giuzzio haya alquilado el vehículo y aseguró que lo prestó. Dicho esto, el ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, prestó el vehículo de un empresario que estaba próximo a ser proveedor del Estado, lo que configuraría un hecho punible; y, por otro lado, como la máxima autoridad en cuanto a seguridad en el país, evidenció su desconocimiento de un megaoperativo y del objetivo del mismo, además de todos los antecedentes manejados hace meses por la Senad sobre el presunto narco buscado a nivel internacional, Marcus Vinicius.