El cuarto día del nove­nario en honor a la Virgen de Caacupé fue dedicado a las comuni­dades indígenas y en su pré­dica el padre Miguel Fritz, administrador apostólico del Vicariato del Pilcomayo, condenó la destrucción de la naturaleza sobre todo en el Chaco paraguayo y defendió los derechos de los pueblos originarios.

El sacerdote dijo que “violar la naturaleza es blasfemia”. “Envenenamos y pisotea­mos la tierra en nombre del progreso”, significó al mismo tiempo de considerar que en Paraguay la ley de defensa del medioambiente es letra muerta.

Así también, se refirió a las condiciones de exclusión en que viven los nativos, que se ven en la necesidad de migrar hasta Asunción para hacer sus reclamos a las autori­dades. Debido al constante traslado los “hermanos indí­genas viven bajo hule hu, en vez de vivir dignamente en sus comunidades”, aseveró.

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El padre Fritz manifestó que los indígenas son excluidos de ser beneficiarios de programas sociales como Tekoporã.

El padre Fritz manifestó que los indígenas son excluidos de ser beneficiarios de progra­mas sociales como Tekoporã y que vienen a la capital del país “a sufrir por promesas incumplidas”. Igualmente cuestionó “la tardanza en entrega de títulos” al expre­sar que “hay sinvergüenzas que se apropian de tierras indígenas”.

La celebración eucarística fue presidida por monse­ñor Juan Bautista Gavilán, obispo de Coronel Oviedo, y la homilía estuvo a cargo del padre Miguel Fritz. La lectura de la palabra de Dios estuvo cargo de representantes de las comunidades indígenas y tuvo la peculiaridad de ser transmitida en tres idiomas: nivaclé, guaraní y español.

A siete días de la misa central, este domingo se notó la pre­sencia de una gran cantidad de fieles en la explanada del Santuario, y como ya es habi­tual, algunos acudieron ata­viados con la vestimenta de la Virgen de los Milagros, en demostración de su devoción mariana.

Las peregrinaciones hasta la Basílica no cesan desde dis­tintos puntos del país, utili­zando todos los medios dis­ponibles: bicicletas, carretas o caminando largos kilóme­tros en grupos familiares o de amigos.

QUINTO DÍA

En el quinto día del novenario el tema a tratarse será “Comunidades y familias que cuidan la vida como sig­nos de esperanza”. La misa de las 7:00 presidirá monseñor Pedro Collar Noguera, obispo de Ciudad del Este. Se espera la peregrinación nacional del clero. La celebración de las 19:00 presidirá monseñor Roberto Zacarías, obispo de Canindeyú.

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