A lo largo de varias administraciones, desde Arnaldo Samaniego hasta Óscar “Nenecho” Rodríguez, los bonos han permitido realizar inversiones significativas en obras públicas y equipamientos, y también el rescate de bonos anteriores.
A continuación se detallan los bonos emitidos por cada intendente, los proyectos financiados y los porcentajes de ejecución. Administración de Arnaldo Samaniego (2010-2015): Samaniego emitió dos bonos, G1 por G. 10.000 millones y G2 por G. 33.500 millones. Los fondos fueron utilizados principalmente para la adquisición de vehículos y maquinarias para el municipio. Además, se invirtió en proyectos de infraestructura básica, como la construcción de muros de piedra y gaviones en arroyos, esenciales para la prevención de inundaciones y el control de la erosión. Todos los proyectos financiados con estos bonos alcanzaron un 100 por ciento de ejecución, lo que permitió un aumento significativo de la capacidad operativa de la municipalidad y una mejora relativa en la calidad de los servicios públicos.
Administración de Mario Ferreiro (2015-2019): Ferreiro emitió cuatro bonos, G3, G4, G5 y G6, totalizando G. 315.000 millones. El bono G3 (2016) de G. 40.000 millones se destinaron a obras de construcción de muros, reparación de puentes, bicisenda, paseo de luces y adquisición de maquinarias. Todos los proyectos fueron completados con un 100 por ciento de ejecución.
El bono G4 (2017) de G. 100.000 millones se utilizó para la revitalización urbana, incluyendo el Paseo de las Luces y la avenida Acuña de Figueroa, así como proyectos de desagüe pluvial en el acceso al Bañado Sur. La mayoría de los proyectos lograron entre un 92 por ciento y 100 por ciento de ejecución, con ajustes financieros realizados después de la finalización física de las obras.
Los bonos G5 (2018) y G6 (2019), de G. 75.000 millones y G. 100.000 millones, respectivamente, se destinaron al mejoramiento vial, bacheo, pavimentación en diversos sectores de la ciudad y la reconstrucción de la Terminal de Ómnibus. La mayoría de los proyectos alcanzaron un 100 por ciento de ejecución, aunque algunas obras de señalización y pavimentación tuvieron una ejecución ligeramente inferior.
La ejecución y pagos de algunas obras se siguieron realizando durante la administración actual del intendente Nenecho Rodríguez, además del rescate de los bonos emitidos durante la administración de Ferreiro.
Administración de Óscar “Nenecho” Rodríguez (2019-presente): durante la administración de Rodríguez se emitieron tres bonos, G7, G8 y G9 por un valor total de G. 755.000 millones.
El bono G7 (2020) de G. 200.000 millones se destinó principalmente a proyectos de desagüe pluvial y mejoramiento vial en Asunción. Las obras incluyen las realizadas en la avenida Doctor Felipe Molas López, que alcanzó un 100 por ciento de ejecución en su primer lote y un 42 por ciento en el segundo, y mejoras viales en las avenidas Fernando de la Mora, Carlos Antonio López y Eusebio Ayala, con ejecuciones que varían entre el 63,30 por ciento y el 100 por ciento. Otros proyectos como la remoción y reposición de pavimento y empedrados se encuentran en procesos de evaluación, homologación y adjudicación.
La ejecución detallada es la siguiente: avenida Molas López: 100 por ciento de ejecución en el primer lote, otros complementos en proceso. Calles Isabel la Católica y Kanonnikoff: 100 por ciento de ejecución. Calles María Felicidad González y El Dorado: en proceso de licencia ambiental. Avenida Fernando de la Mora y Carlos Antonio López: 82 por ciento de ejecución. Avenida Eusebio Ayala y Bruno Guggiari: 100 por ciento de ejecución. Calles Tacuary y 38 Proyectada: 70 por ciento de ejecución.
Obras en el Mirador Itá Pytã Punta en proceso de modificación del plan de inversión en la Junta Municipal, además de una reasignación importante de recursos originalmente destinados a la revitalización de la Terminal de Ómnibus. Desagüe pluvial y mejoramiento vial de las calles Rocío Cabriza, Capitán Lombardo, Tte. Narváez y Tte. Félix Cañete.
Además, el bono G7 prevé inversiones en proyectos emblemáticos, como la construcción del Mirador en Itá Pytã Punta, la modernización de la Terminal de Ómnibus y la red de protección contra incendios en el Mercado 4.
El bono G8 (2021) de G. 360.000 millones fue asignado a proyectos de desagüe pluvial en las cuencas de Santo Domingo, General Santos y Abasto. Algunos proyectos están en fases de planificación y verificación, mientras que las obras en San Pablo y Abasto ya alcanzaron un 30 por ciento de ejecución.
La ejecución detallada es la siguiente: proyectos en cuencas de desagüe: Ayala Velázquez, avenida España II, Universidad Católica y Terminal tienen planes en proceso de modificación remitidos a la Junta Municipal, a fin de asignar al proyecto de desagüe pluvial de la Cuenca Aviadores del Chaco. San Antonio y General Santos, Santo Domingo: ya cuentan con ID de llamados y están en proceso. Barrio San Pablo y Abasto: 30 por ciento de avance.
El bono G9 (2022) de G. 195.000 millones se utilizó para rescatar bonos anteriores, específicamente los emitidos durante la administración de Mario Ferreiro (G3, G4, G5 y G6) con el objetivo de aliviar la carga financiera de la municipalidad.
La ejecución de este bono se realizó al 100 por ciento, lo que mejoró la liquidez de la municipalidad y permitió reestructurar su deuda, asegurando la continuidad de los proyectos.
GOBIERNO CENTRAL Y OTROS MUNICIPIOS TAMBIÉN EMITEN BONOS
La emisión de bonos ha permitido a la Municipalidad de Asunción financiar proyectos que serían imposibles de costear únicamente con el presupuesto anual. Esta práctica, común tanto a nivel municipal como en el Gobierno, ha demostrado ser una herramienta eficaz para el desarrollo urbano y la mejora de la infraestructura, permitiendo que los proyectos se realicen sin interrumpir la provisión de servicios esenciales ni comprometer la estabilidad financiera a corto plazo.
Tanto el Gobierno como los municipios en Paraguay recurren regularmente a la emisión de bonos para financiar sus proyectos. Esta estrategia, aunque común, requiere de una gestión cuidadosa para asegurar que los recursos se utilicen de manera eficiente y que los proyectos financiados realmente beneficien a la comunidad.
BENEFICIOS
Los bonos han facilitado la realización de obras de gran envergadura como desagües pluviales, mejoramiento vial y la revitalización de espacios públicos, mejorando la calidad de vida de los habitantes de la capital y sus visitantes.
Además, la correcta gestión y ejecución de los fondos obtenidos a través de estos bonos han demostrado ser efectivos para mejorar la infraestructura urbana, proporcionando beneficios tangibles tanto a corto como a largo plazo.