El doctor Marcelo Galli, del Instituto Nacional de Cáncer (Incan), alertó que el hospital se encuentra en “estado crítico” a causa de los amparos judiciales que obligan a la provisión de medicamentos a los recurrentes y que conllevan un alto costo para la institución. Es por ello el constante desabastecimiento de fármacos, habida cuenta que el presupuesto anual no contempla los gastos derivados de las medidas tribunalicias.
“Estamos hablando de enfermedades oncológicas, en su mayoría los amparos vienen para la compra de medicamentos oncológicos. Tenemos también algunos amparos para la compra de medicamentos de otro tipo de patologías como esclerosis múltiple, por ejemplo, que no corresponden al Incan”, comentó a la 680 AM.
Algunos pacientes apelan al recurso judicial presentando la receta médica del producto a ser solicitado, expedida por un profesional que puede ser del mismo Incan o de otros centros asistenciales, entre ellos Clínicas, el Instituto de Previsión Social (IPS) e inclusive del sector privado. “Todos esos amparos tienen un proceso judicial que finalmente obliga al Ministerio de Salud a realizar una compra directa del producto farmacéutico para la aplicación al paciente. Ese es el mecanismo”, detalló.