La justicia argentina dictó la prohibición de salida del país y un pedido de captura nacional e internacional para el pres­tamista paraguayo Esteban Rojas, de 44 años, quien está prófugo, acusado de haber asesinado a Ferni Cristina Ayala Palacios, paraguaya, de 28 años, hallada muerta de dos tiros en el pecho, en un domicilio del barrio Zavaleta de Barracas, en Buenos Aires, este lunes pasado.

El fiscal Pablo Recchini manifestó la sospecha de que el comerciante pudo haberse fugado al Paraguay, aprove­chando que tenía recursos y casi un día para escapar desde la madrugada del crimen hasta el hallazgo del cuerpo. Rojas está imputado de un “homicidio agravado por el uso de arma de fuego y por mediar violencia de género” (feminicidio), que pudo haber sido motivo por un comenta­rio sobre una ex pareja, según familiares de la víctima.

El crimen de Ferni Ayala ocu­rrió el domingo 19 de febrero en el primer piso de la casa 187 ubicada sobre la calle Lavar­dén, manzana 18, de la Villa 21 - 24 - NHT Zavaleta, en el sur de la ciudad de Buenos Aires. Una de sus hermanas, Clara, había realizado una denun­cia de paradero debido a rei­terados intentos fallidos por comunicarse con ella.

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Según el testimonio de Clara al canal TN, la pareja para­guaya fue vista el domingo por la madrugada con un grupo de amigos en un boli­che en Constitución, donde otras dos de sus hermanas “la vieron a Ferni angustiada, con ganas de llorar”. Aparen­temente, el ahora acusado se molestó por el comentario de un amigo que le dijo: “Cuidala que es una buena chica, valo­rala, ella sufrió mucho en su relación anterior”.

La pareja convivía hace siete meses en una relación que llevaba cerca de un año y medio. Ferni Ayala, madre de un niño de 10 años, tenía cinco hermanos y habían migrado a Argentina hace más de 15 años. Horas antes del feminicidio, la víc­tima había compartido en su perfil de Facebook una foto junto a su pareja con el escrito: “Amorcito”.

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