Tanto el jueves a la noche como ayer todo el día, mucha gente acudió a participar tanto del víacrucis como de la tradicional subida al cerro en Yaguarón, ciudad ubi­cada a 50 kilómetros de Asun­ción, conocida como la cuna de los mitos y leyendas, que pre­sentó una atractiva propuesta para los turistas.

Cientos de personas acom­pañaron la obra mientras recorrían la ciudad portando antorchas.

El teatro itinerante Kurusu Rape representó el vía crucis desde la explanada de la iglesia hasta el cerro de la ciudad de Yaguarón, en un trayecto de un kilómetro, en la noche del Jue­ves Santo. La puesta en escena que representa los momentos de la pasión, muerte y resu­rrección de Jesús fue seguida por cientos de personas que se acercaron hasta este distrito ubicado en el departamento de Paraguarí. La obra estuvo a cargo de Teatro Yara, que cuenta con 50 actores, y fue apoyada por más de 100 volun­tarios, personal de las Fuerzas Armadas y funcionarios de la municipalidad.

“Buscamos que sea muy rea­lista, en eso tratamos de dife­renciarnos. Tuvimos solo tres meses de preparativos. La mayoría de los que hoy están es gente nueva”, mencionó Héctor Lozzca, director de Kurusu Rape. La teatraliza­ción está conformada por 14 escenas y se inició frente a la iglesia, luego se recrea a Jesús durante el momento de la ten­tación en el monte de los olivos. Posteriormente representan su arresto y juzgamiento por parte de Pilato.

En el cerro Yaguarón existe un oratorio en la cima y una cruz, así como existen nichos con los “misterios” de la Biblia durante el sendero para llegar al mismo. Durante la Semana Santa es visitado por miles de perso­nas que llegan para revivir el ascenso de Cristo al Monte de los Olivos, así como para dis­frutar de la majestuosa vista.

En los días santos, el cerro es uno de los lugares más visita­dos y durante todo el día del Viernes Santo, promeseros y devotos de distintos puntos del país llegan hasta el lugar y rea­lizan la subida.

La actividad incluye las 14 estaciones que represen­tan un gran valor religioso e histórico que se inician en el templo San Buenaven­tura y terminan en la cima del cerro. Las mismas fue­ron puestas por misioneros jesuitas. Cada año, el Viernes de Dolores (8 días antes del Viernes Santo), la gente hace un víacrucis desde el templo hasta la cima del cerro, que es el dolor de María. Luego, el Viernes Santo, la gente sube y es la expresión máxima de la Semana Santa porque son los pasos que hizo Jesús hasta llegar a la muerte por la cruz y luego a la resurrección.