Se aproximan las fies­tas de fin de año y se adornan con motivos navideños las calles, las casas, los lugares turísticos. La Muni­cipalidad de Encarnación, con el apoyo de la comisión de orna­mentación, realiza el trabajo de colocación de adornos. En la noche del viernes se inauguró la instalación Navidad del Para­guay, que se montó en la réplica de la Estación del Ferrocarril de Encarnación, con la presencia del intendente Luis Yd.

“Llega la época más feliz y colo­rida del año: ¡La Navidad! y con ella los colores, como el verde, rojo, blanco, plateado, azul oscuro, dorado y amarillo que tanto la representan”, comen­taron los organizadores de la instalación. Recordaron que la simbología busca homena­jear a la figura de Papá Noel: “De Nicolás de Bari, un obispo del Siglo IV nacido en Patara –actualmente territorio turco– nace la historia de Santa Claus, aunque en su imagen en sí que tiene algún matiz rojo, no es el color que destaca, de hecho, en muchas representaciones se le viste de verde. Es delgado y porta estrellas y cruces en su vestimenta, elementos consi­derados en el Santa Claus de este año”, contaron.

“El artista inspirado en los colores de la Navidad en esta oportunidad elige el verde, siendo uno de los colores más utilizados y lo vemos frecuen­temente en los piños y adornos, tales como guirnaldas, coronas y demás elementos navideños. Este es un color de introspec­ción y de calma, simboliza la vida, la naturaleza, la paz y la eternidad. Une los colores de la Navidad del Paraguay origi­nados en los árboles, las hier­bas, los adornos, con los datos históricos que narran que Papá Noel o Santa Claus era vestido inicialmente de color verde y blanco”, agregaron.

“Por otro lado, el dorado y el amarillo son colores cálidos que también hacen parte de la paleta de colores de esta época del año, los cuales están relacio­nados con la riqueza, abundan­cia y prosperidad. Estos colores son el símbolo de los regalos de los Reyes Magos al niño Jesús, así como también de la estrella que los guió en su camino hasta poder encontrarlo. A esta estre­lla también la vemos represen­tada en las luces de Navidad, las velas y la estrella con las que se adornan el tren, unidos a las tradiciones paraguayas el amarillo se siente en la flor de coco, el trigo, el melón, la piña, la estrella de Belén”, continúa la descripción.

En la inspiración artística se unen tradiciones paraguayas y mundiales. En un tiempo de renovación, la calma y la paz, representadas por el color verde, son necesarias para un nuevo comienzo, que nos guíe hacia la riqueza, la abundancia y la prosperidad, que representa el amarillo, todo aquello capita­neado por una estrella que nos conduzca hasta su encuentro.