“En Paraguay 3 de cada 5 niños son obesos y en el mundo 3 de cada 10 escolares tienen sobrepeso u obesidad”, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La organización aconseja reducir el consumo de alimentos con alto contenido calórico y bajo valor nutricional, fomentar la recreación y los deportes y reducir al mínimo el tiempo frente a las pantallas. “Además se debe impedir el consumo constante de dulces porque estos producen una adicción, también se debe evitar dar dinero a los niños porque estos se limitan a comprar lo que les gusta y normalmente eligen comidas chatarras”, indicó el nutricionista Cristhian Román.
La organización recomienda a los países controlar que los productos cuenten con etiquetado frontal de advertencias para mejorar la recepción de información de los consumidores, regular la publicidad de productos alimenticios y bebidas poco saludables, proteger entornos escolares de la alimentación inadecuada e impulsar políticas fiscales para bebidas azucaradas y otros productos.
“La buena alimentación debe empezar en la casa, se debe tratar de no consumir galletitas procesadas con alto contenido de azúcar y revisar el etiquetado de los productos a ser consumidos posteriormente”, dijo el nutricionista sobre la atención que deben poner los padres en los alimentos que consumirán sus hijos.
Agregó que en Paraguay no existe la costumbre de leer las etiquetas de los alimentos y su información nutricional. Además manifestó que las letras son muy pequeñas y en muchos casos los productos no expresan su alto contenido de calorías o de azúcares.
“En lo posible se debe volver a la alimentación tradicional realizada en casa, como la preparación de sandwiches,variación de frutas, yogures, barritas de cereal, jugos de frutas de estación y no los ultraprocesados que poseen mucha azúcar, colorantes, conservantes y aditivos”, remarcó.
COMIDA EN COLEGIOS
El especialista recomienda que los padres intenten hacer cambios en las cantinas de los colegios, que se busquen las comidas más amigables y saludables porque se están detectando niños de 10 años en adelante con colesterol, presión arterial y triglicéridos altos.