Hasta ahora prosigue la búsqueda de los dos militares desaparecidos, tras ser arrastrados ayer por el raudal en la zona de Lambaré. El jefe de Estado Mayor, general Héctor Grau estuvo acompañando la tarea de los rescatistas y afirmó que se está repasando los lugares ya rastrillados ayer jueves y “lamentablemente sin novedad alguna debido al trabajo difícil desplegado por los rescatistas”, según dijo.
El general Grau manifestó que en el operativo de búsqueda están afectados un total de 350 personas, más la colaboración de los pescadores y ribereños del lugar. “Hay que comenzar a desmantelar la acumulación de basuras y sedimentos en el cauce, lo que hace difícil el trabajo, pero seguiremos trabajando hasta encontrar a nuestros camaradas”, dijo.
Recordó que desde el lugar del accidente hasta el río Paraguay hay unos 3.600 metros, distancia ya recorrida por los militares que están en la búsqueda.
El general afirmó que el mayor obstáculo para encontrar a los militares es la naturaleza del terreno, que contiene basura y sedimentos. Asimismo el jefe de Estado Mayor Grau manifestó: “nosotros tenemos que encontrar a los camaradas y esperemos que el tiempo también ayude para tal efecto”. Agregó que existe una comunidad de pescadores que están ayudando por suerte y también las personas que viven a orillas del arroyo Lambaré están cooperando.
Acotó que las FF.AA están dando el apoyo y acompañamiento a los familiares de los dos uniformados que están desaparecidos. Sostuvo que las próximas 72 horas serán muy importantes siempre y cuando que el tiempo acompañe para poder encontrar a los camaradas.
Los militares desaparecidos son Alexis Teobaldo Sosa Leiva y Domingo David Ríos Domínguez, quienes fueron arrastrados por el raudal en las aguas del arroyo Ferreira de Lambaré y no se descarta que hayan quedado atascados entre las basuras del cauce hídrico. El operativo está a cargo de personal especializado del Ejército, la Armada, la Fuerza Aérea y el Comando Logístico, con el apoyo de los bomberos voluntarios, además de pescadores y personas que viven en la ribera del arroyo Ferreira.
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