La suboficial Emilce Noguera, de la Comisaría Primera del barrio Itacurubí de Concepción, relató su experiencia al hacer prevalecer su instinto de madre y amamantar a una criatura de dos meses cuya mamá está internada tras un accidente en motocicleta. Contó que tiene un hijo de un año, por lo que goza de un permiso especial para acudir a su vivienda y alimentarlo dos veces al día, dentro de su horario laboral.

“El bebé llegó con su abuela y empezó a llorar, le miré y le dije a su abuela: qué le pasa a tu bebé, parece que tiene hambre. Seguro que ya tiene hambre porque hace rato que ya están por el hospital, le dije. Y sí, me dijo. No querés que le dé tití, le dije y sí me respondió”, señaló Noguera, este jueves, a la 1080 AM. Ni bien pasó a los brazos de la agente, la pequeña se mostró en confianza. “Tenía mucha hambre había sido. Apenas dos meses tiene la criatura”, indicó.

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Milagrosamente, el bebé sufrió solo unas pequeñas escoriaciones en el rostro en el percance de tránsito. “Tenía solo unas raspaditas en la cabecita, pero no era de gravedad. Se tranquilizó y se quedó dormida, después le entregué otra vez a su abuela. Gracias a Dios no le pasó nada a ella”, manifestó.

La joven agente expresó que le sorprendió la viralización de la foto del amamantamiento que hizo que la ciudadanía aplaudiera tan loable gesto de amor. “No me di cuenta de las fotos, después nomás cuando vine junto a mi hijo y me fui otra vez a la comisaría, me enteré que mi foto estaba recorriendo”, refirió Noguera.

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Por el instinto maternal, Emilce captó por qué el bebé estaba inquieto y no dudó como madre en ofrecerle la alimentación natural. “Cualquier otra mamá iba a hacer lo mismo”, resaltó Noguera, quien dejó en segundo lugar su labor durante la guardia en la comisaría para dar los cuidados a la bebita.

La mujer destacó la apertura de su jefe que le permite ir hasta su domicilio para dar de mamar a su hijo de un año. Mediante un permiso especial acude dos veces dentro de su horario laboral para alimentar a su hijo. “Mi jefe me da una hora a la mañana y una hora a la tarde. Solo tití toma mi hijo y la bebé, según la abuela, no toma fórmula, por eso nomás le di mi pecho”, finalizó.