Melissa Palacios

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La Cámara Paraguaya de Biocombustibles y Energías Renovables (Biocap) celebró la apertura del nuevo Gobierno para impulsar al segmento y manifestaron que se comienzan a crear las condiciones para dialogar sobre una mayor producción. Destacaron el gran potencial y la cadena de valor que representa el rubro, al emplear materia prima vegetal y animal.

El presidente del Biocap, Massimiliano Corsi, valoró que ya desde la toma de mando del presidente de la República, Santiago Peña, mencionó durante su discurso que dentro de la hoja de ruta se trazó el objetivo de lograr mayor eficiencia y sostenibilidad energética como país productor de energía limpia y renovable. “Para nosotros es un paso muy importante escuchar esto al comienzo de un Gobierno, porque se alinean las condiciones para poder avanzar y realizar inversiones en el sector, y alimentar todo lo que venimos impulsado”, sostuvo.

La Nación/Nación Meda conversó con el representante del sector, quien explicó que la importancia de esto radica en que hoy día la Ley N° 6389/2019 que establece el régimen de promoción para la elaboración sostenible y utilización obligatoria del biocombustible apto para la utilización en motores diésel sigue atrasada en su cumplimiento. “Hoy en día estamos al 2 %, se aumentó de 1 % hace pocos meses y queremos llegar al 5 % como establece la ley”, explicó.

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“En muchas ocasiones el presidente Santiago Peña, y también el ministro Carlos Fernández Valdovinos, estuvieron mencionando que quieren que el Paraguay sea un centro regional de biocombustibles”, acotó. A su vez, recordó que las nuevas empresas que llegaron, tales como Cremer Óleo o BSBIOS, van a poder seguir con las inversiones, y además si aumenta la mezcla van a poder bajar los precios del biodiésel de manera natural.

Con ello se generaría un aumento en el poder adquisitivo de la empresa que compra la materia prima para hacer el producto. “El 85 % de la formación de costos del biodiésel es su materia prima, por lo tanto, consiguiendo mayores volúmenes se van a conseguir mejores precios y esto va a impactar obteniéndose un precio final más bajo probablemente”, afirmó, con lo cual se ayudará a la economía del sector así como la del país.

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Además, se ahorrarán divisas al producir a través de la industria paraguaya. “Tenemos la posibilidad de contar con una soberanía energética de estos carburantes. Tenemos Itaipú, pero no es suficiente y tenemos que seguir creciendo buscando otras energías renovables que son productos nacionales”, añadió y agregó que habrá un impacto ambiental positivo nacional, empleos y acuerdos sostenibles a nivel internacional. Hoy día el capital productivo total del sector alcanza unos USD 1.500 millones en la cadena invertida.

Corsi remarcó que uno de los puntos claves es que si producimos más biocarburante se podrá diversificar la materia prima como lo es el aceite de soja. “En vez de exportar a precio regalado, se puede cerrar toda la cadena productiva porque como bien sabemos Paraguay es un productor de alimentos para más de 100 millones de personas en el mundo”, detalló a LN.

Dijo que dese del sector seguirán trabajando sobre la investigación, diversificación y la posibilidad de exportar, pero esto se hace acompañado de un programa real y concreto donde las empresas puedan sentirse seguras de realizar inversiones o una performance en un país que demuestre interés en este tipo de energías renovables, por lo cual seguirán en primera línea con el Gobierno para fomentar su utilización.