Tras salir a la luz el contenido del libro “Courtiers: The Hidden Power Behind the Crown” (Cortesanos: el poder oculto detrás de la corona), escrito por Valentine Low, se dieron a conocer una serie de acontecimientos que giran entorno a Meghan Markle y su esposo, el príncipe Harry.
De acuerdo a lo publicado por varios medios internacionales, el material cuenta con una gran cantidad de información de parte de la realeza, entre los cuales se destacan algunas declaraciones de exempleados de los duques de Sussex, quienes incluso se aglutinaron bajo un grupo autoproclamado “Club de sobrevivientes”.
Quienes aseguraron que fue como una pesadilla trabajar para Meghan, a quien calificaron ellos mismos como una persona “sociópata narcisista”, además de declarar que desde un principio había planeado su salida del clan real, lo cual finalmente se dio en el año 2020.
También se supo que Markle supuestamente protagonizó un incidente con una de sus colaboradoras, a quien le había dicho: “No te preocupes. Si hubiera literalmente alguien más a quien pudiera pedirle que hiciera esto, se lo pediría a él en lugar de a ti”; por lo que al enterarse de lo ocurrido, el príncipe William consoló a la mujer diciéndole: “Espero que estés bien. Estás haciendo un muy buen trabajo”.
“Courtiers: The Hidden Power Behind the Crown” también relata que la duquesa había arremetido verbalmente contra los funcionarios en varias ocasiones; por lo que la publicación afirmaría que los trabajadores quedaron completamente destruidos, luego de haber estado al servicio de los duques de Sussex.
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Los relatos también aseguran que Meghan y Harry supuestamente le había gritado a Samantha Cohen, quien se desempeñaba como su secretaria privada, antes y durante un vuelo a Australia realizado en 2018. En tanto que para Cohen era como trabajar para un par de adolescentes, según un amigo de Samantha.
Mientras que los abogados de la duquesa negaron que Samantha Cohen haya sido maltratada y destacaron que siempre estuvieron agradecidos por todo su apoyo y gran dedicación. En otro informe se revela que en un momento se les había solicitado a Markle y Harry que trataran a los empleados con más respeto, a lo que Meghan contestó: “No es mi trabajo mimar a la gente”.