Un Tribunal de Sentencia presidido por el juez Víctor Medina e integrado por los magistrados Elsa García y Arnaldo Fleitas, realizó un juicio oral y público a través de medios telemáticos y dictó una condena de 8 y 10 años 6 meses de manera unánime en contra de dos personas, luego de probarse su participación en el robo agravado de G. 100 millones.
El colegiado participó de la diligencia bajo estrictas medidas sanitarias desde la sala de juicios orales, al igual que el Ministerio Público y los abogados defensores, en tanto que los acusados se conectaron telemáticamente desde la penitenciaría en la cual estaban guardando prisión preventiva, garantizándose en todo momento la defensa efectiva.
La decisión de realizar el juicio de esa manera obedece a las recomendaciones constantes de la Corte Suprema de Justicia en pos de la lucha contra la propagación del COVID-19, como también precautelar la salud de los magistrados y de las partes.
Es así que la audiencia oral se pudo desarrollar sin mayores inconvenientes y de manera unánime resolvieron condenar a Juan Fabián Gómez a la pena privativa de libertad de 8 años, en tanto que Carlos Silva fue sentenciado a 10 años y 6 meses de prisión.
Los antecedentes del hecho refieren que en fecha 22 de noviembre de 2017, siendo las 11:30 aproximadamente, Gómez se encontraba al mando de una motocicleta de color azul en compañía de Silva. Estos circulaban por la calle 25 de mayo, antes de llegar a la calle Perú interceptaron un automóvil en el semáforo en el cual se encontraban dos personas.
En ese lapso, Gómez detuvo la marcha al costado izquierdo del automóvil y su acompañante, Silva, descendió de la motocicleta, se acercó y con un arma de fuego en mano inició un forcejeo con uno de los ocupantes del vehículo, quien llevaba consigo un sobre con la suma de G. 100 millones, que acababan de retirar de una entidad bancaria.
Tras el forcejeo, Silva logró despojarle de dicha suma de dinero a la víctima; una vez perpetrado el hecho volvió a abordar la motocicleta y emprendieron la fuga por la calle 25 de Mayo.
Las víctimas denunciaron lo sucedido al personal policial que comunicó por radio a las demás comisarías, aviso captado por personal de la comisaría 21 Metropolitana que se encontraba patrullando en 35 Proyectada y Antequera y divisó una motocicleta con las características descriptas que pasó a muy alta velocidad por la calle Antequera en dirección de Barrio Obrero.
Uno de los ocupantes tenía un casco de color negro y otro de color rojo por el brazo. Ante esto, iniciaron la persecución y a la altura de 32 Proyectada se logró aprehender a uno de los citados.