Ha sido un servicio radial informativo, polémico y conflictivo, de obligatoria transmisión para las emisoras existentes en nuestro país, que se ha venido difundiendo en forma continuada a partir del 20 de abril del año 1940, conforme al decreto firmado por el entonces presidente José Félix Estigarribia.

ANTECEDENTES

Estigarribia –una figura militar de notable gra­vitación en el país, por el prestigio acumulado en la conducción de las fuerzas mili­tares en el conflicto bélico con Bolivia (1932-35)– había asu­mido la presidencia constitu­cional de la República, el 15 de agosto del año 1939, osten­tando la representación del Partido Liberal, tras el triunfo en las elecciones generales lle­vadas a cabo ese mismo año. Eran tiempos difíciles para la vida política nacional. El Parla­mento reunido el 16 de febrero de 1940 consideró necesario remplazar la Constitución de 1870 y luego se declaró disuelto el 18 del mismo mes, permi­tiendo a Estigarribia asu­mir plenos poderes políticos, hasta su trágico deceso el 7 de setiembre de 1940.

En ese contexto y con la sus­pensión de la vigencia de la Constitución Nacional, el presidente Estigarribia pro­mulga el Decreto N° 916, del 20 de abril de 1940, “Que regla­menta la difusión del infor­mativo nacional por todas las estaciones radioemisoras de la República”, que es refrendado por Alejandro Marín Iglesias, cuando entonces ministro de Gobierno y Trabajo. La mencio­nada disposición gubernamen­tal siguió vigente hasta el mes de agosto del año 1989, luego de la revolución del 2 y 3 de febrero.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY
Decreto N° 916 del 20 de abril del año 1940, “Que reglamenta la difusión del informativo nacional por todas las estaciones radioemisoras de la República”, publicado en la Gaceta Oficial.

EL DECRETO

Publicado en La Gaceta Ofi­cial, el Decreto N° 916 citado señala en el considerando: “1) Que el Decreto N° 4971, que reglamenta las radiocomuni­caciones no contempla dispo­sición legal alguna que obligue a transmitir en cadena las ideas fundamentales del gobierno, de su política constructiva y de las que haya emprendido en bene­ficio de la colectividad. 2) Que siendo de interés general que las informaciones oficiales lle­guen hasta el público en la mejor forma posible y en la oportuni­dad debida”.

En la parte resolutiva, la nor­mativa gubernamental estable­ció: “Art. 1° Todas las estacio­nes radioemisoras establecidas en la República, bajo la super­intendencia de la Dirección General de Correos y Telégra­fos, están obligadas a trans­mitir en cadena las informa­ciones oficiales suministradas por el Ministerio de Gobierno y Trabajo por un mínimo de 30 minutos por día y extraordina­riamente cuando así la exijan las necesidades de orden nacio­nal. Art 2° La sección Radioco­municaciones de la Dirección General de Correos y Telégra­fos deberá comunicar oportu­namente a las radioemisoras las horas en las que se propalará el informativo oficial o cualquier otra transmisión de carácter oficial”. En los artículos 3° y 4° se referían a los aspectos téc­nicos de la interconexión de las radioemisoras y las sanciones pertinentes.

DENAPRO

Unos años más tarde, el 2 de enero de 1945, ya bajo el gobierno de Higinio Morínigo, una Resolución N° 2 de la Direc­ción Nacional de Prensa y Pro­paganda (Denapro), organismo dependiente del Poder Ejecu­tivo, señalaba entre otras cosas la denominación de las trans­misiones efectuadas en cadena y la integración de las siguien­tes emisoras existentes cuando entonces, que fueron: Radio Nacional, Radio Teleco, Radio Encarnación, Radio Livieres de Coronel Oviedo, Radio La Capi­tal, Radio Guarani y Radio Cha­ritas.

Por otro lado, una resolución similar de fecha 30 de enero de 1945, del mismo organismo citado antes, determinaba los temas musicales que las emi­soras señaladas más arriba debían de emitir antes de incorporarse a la cadena ofi­cial y al cierre de la misma. En ese sentido señalaba tam­bién que “Campamento Cerro León”, la polca motivo popu­lar de autor anónimo, debía ser el tema musical caracterís­tico al comenzar y terminar la cadena oficial; cortina musi­cal que se mantendría por los años siguientes, desde 1945 hasta agosto del año 1989, en que definitivamente fue supri­mida la transmisión en cadena del informativo de los actos de gobierno. El tema musical citado con “Cerro Corá”, de Herminio Giménez y Felix Fer­nández, “India” de José Asun­ción Flores y Manuel Ortiz Gue­rrero, por Decreto N° 4594, de fecha 24 de julio de 1944, fueron declaradas “Canciones Popula­res Nacionales”.

Al respecto del tema musical característico de la cadena oficial, “Campamento Cerro León”, el mismo fue grabado en Buenos Aires a pedido del gobierno paraguayo de enton­ces, por una orquesta de músi­cos de ese país, bajo la dirección de Adolf Gendelman, violinista nacido en 1910 en Kiev, actual­mente Ucrania, y fallecido en 1968 en la capital argentina. Dicha grabación original ya desaparecida de la discoteca de Radio Nacional, ha sido una de las mejores versiones graba­das de la obra de autor anónimo.

La denominación de la Cadena Paraguaya de Radiodifusión fue establecida por la Resolución del 2 de enero de 1945 de la Den­apro y como señalara el emba­jador Augusto Ocampos Caba­llero, quien ocupara el cargo de subsecretario de Informacio­nes de la Presidencia, desde el mes de febrero de 1989, el bole­tín oficial se mantuvo con el mismo nombre hasta el mes de agosto del mismo año, en que el gobierno resolvió levantar la transmisión en cadena obliga­toria a las 12:30 y a las 19:30.

UNA CLAUSURA

El 11 de noviembre de 1957, por no incorporarse a la emisión en cadena a la Radio Nacional, fue clausurada Radio Stentor, pro­piedad de Manuel Adolfo Caba­llero Ferreira, quien fue al exi­lio en Montevideo luego de la clausura. El hecho constituyó un atentado contra la libertad y un atropello a los derechos del hombre; hechos simila­res se repetirían en los años siguientes con emisoras pri­vadas. En las décadas pasadas, las transmisiones desde fuera de los estudios y la propia señal de la emisora Radio Nacional con la cadena oficial se transmi­tían por aire, captando la señal o por vía de líneas telefónicas hasta la radio, que incorporaba dicha señal a la consola para la retransmisión.

Dos hecho anecdóticos con respecto a la Cadena, 1) entre febrero y agosto de 1989, la primera y única mujer que tuvo a su cargo el informa­tivo de la cadena oficial fue la señora Flora Giménez, ya que nunca antes ninguna locutora pudo hacer esa tarea. 2) Juan Darío “Lulú” Ortiz, un talen­toso ya desaparecido hom­bre de radio, por los años 60, en una de las tantas ocurren­cias suyas estando en Radio Guarani, fue el único locutor que “vendió” la publicidad por canje de la presentación y des­pedida de la Cadena Oficial, hecho por demás prohibitivo; lo hizo naturalmente a espal­das del director, quien años después se enteró del hecho, que de haberlo descubierto en el momento le pudo haber cos­tado alguna sanción.

Dejanos tu comentario