Una de las banderas más impor­tantes del Gobierno es la gene­ración de más puestos de tra­bajo para la gente, por lo que el Poder Ejecutivo busca que se creen más inversiones en el país. Aparte de ser un lema electoral, en su momento, en la actualidad constituye una de las preocu­paciones fundamentales del primer man­datario, que está empeñado en conseguir el bienestar de las personas. Esto porque parte de una verdad muy simple: trabajo es sinónimo de dignidad y bienestar, así como la carencia de él equivale a frustra­ción e infelicidad.

El presidente Santiago Peña dijo el mar­tes último, durante el acto realizado en la ampliación de una planta fabril en Itau­guá, que el Gobierno está comprometido en la generación de más puestos de tra­bajo. Y que se están creando las condicio­nes para que haya más mano de obra ocu­pada. “Nuestro compromiso es generar 500.000 nuevos empleos en los próximos años”, recordó. Y resaltó que el proyecto industrial de la empresa multinacio­nal THN Paraguay SA, que se inició hace poco más de 11 años, “se ha convertido en un símbolo del desarrollo del Paraguay mediante la mano de obra de los trabaja­dores que han demostrado cómo no tene­mos límites cuando nos proponemos ser los mejores”.

El mandatario recordó que en su gobierno están trabajando para seguir generando las condiciones para que en el país haya más mano de obra de calidad y alta capa­cidad. Resaltó que la política de trabajo es uno de los pilares fundamentales para lograr el resurgimiento del país gigante que se pretende. Y agregó que en todo el mundo está sonando el nombre de Para­guay, teniendo en cuenta que se ha comen­zado a apuntalar y reforzar las potenciali­dades que tiene el país.

Explicó que si trabajan todos juntos desde el Gobierno, tanto el sector privado como las autoridades locales, se podrán mul­tiplicar los empleos en el departamento Central y en todo el país. “Valoramos mucho la inversión extranjera y la capaci­dad de acceder a los mercados. Esto sola­mente se puede hacer con la mano de obra paraguaya”, remarcó.

El propósito de las autoridades es que miles de mujeres y hombres que están hoy sin empleo puedan conseguir un lugar donde aplicar sus esfuerzos y sus conoci­mientos, para recibir por ello la remune­ración correspondiente a fin de obtener el sustento y satisfacer sus necesidades básicas.

Los estudios realizados en los últimos años hablan de que existe una importante cantidad de personas que no tienen una tarea remunerada, además de las que ejer­cen actividades varias y que reciben un pago que está muy por debajo de lo que se estima como mínimo para una vida digna y lo que establecen las leyes. Ese grupo de personas que necesita una ocupación remunerada se va incrementando cada año, ya que miles de jóvenes van llegando a la edad de trabajar y salen a buscar ansio­sos las posibilidades de una actividad ren­table y adecuada a sus necesidades.

Para cualquier persona sana y normal estar sin trabajo es uno de los peores cas­tigos que puede recibir, ya que constituye una enorme frustración personal y una desgracia social. Por lo tanto, tener una tarea remunerada es la máxima expresión de la realización del individuo.

Para que haya más puestos de trabajo en nuestro país no existen fórmulas mági­cas que aplicar, sino cumplir algunas con­diciones básicas, como tener una polí­tica económica estable, que permita el aumento de inversiones para que los inversionistas se sientan atraídos a traer al país su dinero. Que las autoridades garanticen un clima adecuado y de seguri­dad para el capital.

Paraguay cumple con esos requisitos y tiene una política macroeconómica esta­ble, con escasa inflación de precios, ade­más de un sistema tributario atractivo, con tasas bajas. Ofrece condiciones favo­rables para los negocios, con escasos o ningún impuesto para invertir a través de la bolsa de valores. Sus costos laborales son escasos y cuenta con un clima sindi­cal tranquilo que garantiza el desenvolvi­miento normal de las empresas.

Por todo ello, una de las tareas decisivas es dar a conocer al Paraguay, para que se lo conozca en el mundo y pueda conver­tirse en la próxima estrella económica de Latinoamérica, para atraer inversiones, como dijo recientemente un exdirectivo del Banco Mundial.