Carlos Fleitas
Embajador paraguayo
La política exterior de Paraguay es el conjunto de decisiones y acciones que conforman la acción pública de nuestra nación, que busca el bienestar de sus ciudadanos y así representar sus intereses nacionales ante otros países, e implica una serie de principios dogmáticos que se hallan claramente establecidos en la Constitución Nacional paraguaya.
La visita que se realizará del 14 al 18 de febrero por parte del presidente Mario Abdo Benítez a Taiwán reafirmará los valores democráticos compartidos, como ser la libre expresión, la justicia y la democracia.
Tanto Paraguay como Taiwán son pujantes democracias que buscan que el Estado de Derecho sea la piedra angular en que se cimiente el bienestar y el progreso de sus pueblos. Consideramos que Taiwán debe ser parte activa del Sistema Internacional de Naciones, dado los muchos aportes en las diferentes áreas, que pueden compartir con el mundo y que constituye en la actualidad un faro de libertad en el continente asiático.
El apoyo en la cooperación financiera no reembolsable de ese país al nuestro se tradujo en obras de infraestructura como el Túnel de Tres bocas y viviendas para personas de los sectores más vulnerables, la ayuda técnica con los exitosos proyectos de piscicultura y cultivo de orquídeas, la balanza comercial que en los últimos 3 años creció un 212 % con la exportación de la carne bovina, que en el 2016 alcanzaba 6.000 toneladas y en el 2022 llego a 39.700 toneladas.
También la apertura del mercado taiwanés a la carne porcina paraguaya, junto con los más de 300 becarios que actualmente realizan estudios de grado y post grado universitario en la isla, testimonian los fraternos lazos de cooperación y hermandad entre nuestras naciones.
En el plano internacional, Paraguay ha reiterado en los distintos foros internacionales la necesidad de que esta hermana nación asiática sea considerada una persona jurídica internacional y por ende con pleno derecho en el sistema interestatal.
Nuestra relación de más de 65 años en la actualidad se halla más sólida y robusta que nunca, dado que ambos países coinciden en establecer una alianza de cooperación para el desarrollo de sus pueblos, basados principalmente en una mancomunidad de intereses e ideales compartidos, que serán ratificados en la próxima visita presidencial.
En este momento difícil de la historia, creemos que la democracia taiwanesa ante la amenaza de China Popular necesita del apoyo internacional y el mejor apoyo para esta joven democracia viene de otras democracias, de allí la esencia fundamental de las relaciones firmes y sólidas entre Paraguay y Taiwán.