Un festejo del Día de la Independencia diferente y especial tuvo lugar este año en la Embajada de los Estados Unidos en Paraguay. Fue un evento que transportó a los más de 700 invitados al oeste americano con una fiesta temática denominada Red, White and Rodeo. En esta ocasión, la celebración del 4 julio homenajeó la tradición vaquera y los valores “que han hecho grande a Estados Unidos, como el coraje, la determinación y la autosuficiencia”, expresó el encargado de negocios a.i. Amir Masliyah durante la ceremonia protocolar.
El principal anfitrión de la cita destacó que esos mismos valores “también representan los lazos que hacen de los Estados Unidos y Paraguay sólidos aliados”.
Masliyah aprovechó la oportunidad para anunciar el término de su misión en Paraguay luego de tres años de labor. “Me siento tan orgulloso del equipo de la Embajada y de ustedes, nuestros colegas paraguayos, por cómo hemos fortalecido la relación bilateral”, dijo. “Paraguay ha sido un lugar maravilloso para mí y mi familia. La calidez y el cariño que sentimos por parte del pueblo paraguayo las llevaremos con nosotros durante toda la vida”, manifestó emocionado el diplomático, cuyo próximo destino será el Japón.
LOS DETALLES
La fiesta que conmemoró el 249 aniversario de la Independencia de los EE. UU. fue organizada y montada por los propios funcionarios de la representación diplomática. Los amplios corredores y jardines de la Embajada lucieron decorados con banderas estadounidenses de distintos diseños y tamaños, y elementos propios del lejano oeste como fardos de heno, cowhide, sillas de montar, herraduras, ruedas de carreta, mesas de barriles, entre otros detalles, que evocaban la vida vaquera que fusiona tradición, libertad y mucha energía. El dress code fue cowboy look.
En este marco colorido, animado y acogedor, los asistentes disfrutaron del servicio gastronómico de Sushi Club, que ofreció comida tradicional estadounidense combinada con sabores de la cocina paraguaya, todo regado de vinos, té frío y cócteles para brindar. El evento contó con el apoyo de numerosas empresas estadounidenses y firmas paraguayas representantes de franquicias y marcas estadounidenses; hubo souvenirs para la concurrencia.