Una mañana ideal se ve diferente para todos, y no existe una fórmula única para una rutina matutina exitosa. Dado que hay tantas formas diferentes de comenzar el día, la clave es descubrir qué te funciona.

Ya sea que tengas algo que siempre haces (como correr a la cafetera) o una rutina completa, comenzar el día con algún tipo de ritual que te ayude a sentirte más conectado, puede ayudar a establecer el tono para el resto del día.

Para descubrir cómo modificar una rutina matutina para sentirnos un poco más alegres, la experta Michelle Wax, entrenadora de felicidad y fundadora del American Happiness Project, recomienda hacer algo pequeño pero poderoso: un poco de introspección.

No tiene que ver con escribir en un diario (pero si querés hacerlo, que nada te detenga), lo que necesitas son unos minutos para hacerte algunas preguntas, como las que ella explica a continuación para un comienzo más soleado de tu día.

3 preguntas para comenzar el día con una nota positiva

“Lo primero que hago es hacerme tres preguntas que me permiten comenzar mi día con una nota positiva”, dice Wax. “Me hago estas preguntas antes de mirar mi teléfono, o incluso de lavarme los dientes, para comenzar mi mañana en mis propios términos, en lugar de entregar mi energía a otras personas, las noticias o las redes sociales de inmediato”.

1.¿Qué puedo esperar hoy? Incluso en los días más desalentadores o estresantes, por lo general podemos encontrar algo que esperar. Puede ser algo pequeño como cenar con una amiga después del trabajo o abrazar a tu perro después de un largo día. “Esto me permite concentrar mi mente en las cosas buenas que sucederán hoy”, dice Wax. Pensar en una buena actividad entrena a tu cerebro a ser un poco más optimista, especialmente si hay algo más estresante en el calendario.

2.¿Qué tiene el potencial de estresarme /preocuparme hoy y cómo elijo responder a ello? Los pensamientos estresantes tienden a generar más emociones negativas, por lo que tomar el control de cómo te sentís a primera hora, es una forma de comenzar el día con una nota más positiva. Si te despertñas preocupado por algo estresante, podés cambiar la narrativa y decidir cómo responderás, en lugar de evitar la situación potencial.

“Esto me permite adelantarme a cualquier estrés potencial y decidir cómo responderé a cualquier situación estresante que se desarrolle, sea anticipada o no anticipada. Esto me devuelve el control en lugar de responder de manera impulsiva o reactiva”.

3.¿Cómo quiero sentirme al final del día y qué necesito hacer (o no hacer) para que eso sea una realidad? ¿Solés sentirte agotada o drenada al final del día? Si es así, Wax recomienda pensar al revés. Visualizá cómo querés sentirte al final del día y reflexioná sobre los pasos que tomarás para llegar allí. “Esto me permite establecer la intención de mi día y decidir qué debe suceder para asegurarme de sentirme así al final del día”, dice.

Una vez que Wax responde las preguntas anteriores, mantiene el resto de su rutina matutina bastante simple y breve. “Normalmente hago una meditación guiada durante 10 a 15 minutos antes de hacer café y salir a caminar. Mientras camino, escucho un podcast o contenido positivo para ayudar a fortalecer mi forma de pensar”, cuenta.

Nuevamente, las mañanas más felices no se tratan de ceñirse a un horario estricto o comprometerse con algo que no vas a hacer. “No me castigo intencionalmente si hago una caminata súper corta un día o decido saltarme una meditación. Al mantener las rutinas matutinas simples y directas, elimino el aspecto a veces abrumador. Siempre que empieces la mañana en tus propios términos, ese es el componente más importante para empezar el día con la nota correcta”.