Lukas Bazle utilizó los pliegues textiles de las famosas cortinas celulares para inspirarse y así este berlinés de 26 años logró crear una lámpara que regula la luz de manera analógica, con una sencillez y elegancia cautivadora.
La creatividad y el diseño no tienen límites. Lo vamos comprobando con cada buen diseño de producto que ve la luz. Lukas buscaba crear una lámpara que pudiera ser retráctil, para un traslado del producto sin mayores complicaciones, como también para que pudiera tener varios usos. En este caso, regulaciones para la luz interior.
“Al experimentar con el fascinante material de una persiana de nido de abeja, nació la idea de hacer una pantalla de lámpara ajustable. El material ya desarrollado se puede adaptar a un campo de aplicación nuevo pero similar“, explica el diseñador en su web.
El material que eligió para la pantalla fue ideado originalmente para soportar altas temperaturas sin entorpecer el paso de la luz. Gracias a su doble plisado contrapuesto, los vacíos tubulares creados en su interior consiguen amortiguar el calor y deshacerse de él por los extremos. ¿Increíble verdad?
Además, gracias a su naturaleza plegable, la lámpara puede reducir su tamaño a un mínimo antes nunca logrado, favoreciendo la calidad del almacenamiento y transporte. Y, por supuesto, la característica estrella de este diseño: el sistema analógico de regulación de luz.
Efectiva y útil, con sólo un juego de poleas oculto a simple vista, se puede invertir la forma de la pantalla. De esta manera, Méduse no solo ofrece la posibilidad de controlar la intensidad y amplitud de su luz, sino también modificar la apariencia del diseño a simple vista e incluso el color de la propia lámpara. Porque todo se trata de jugar con la luz y las apariencias, ¿no les encanta? Aquí un video para admirarla en todo su esplendor.