La invitada especial de esta nueva edición de Poderosas con Marilé Unger es la reconocida nutricionista Angie Paiva, quien instaló en nuestro país una corriente saludable que se basa en el equilibrio: el método de la No Dieta.

Por: Verónica Giménez

Angie Paiva estudió dos carreras en simultáneo, Nutrición y Lengua Francesa, también se especializó en Obesidad y Trastornos de la Conducta Alimentaria. “Después del primer año de universidad y que estudié Biología, le dije a mi mamá: ‘Esto no me gusta, no es lo mío. Me gusta nutrición’. Ella me dijo que si iba a estudiar eso, tenía que estudiar otra cosa más, y me sugirió estudiar francés”, recordó.

“Seguí y terminé las dos carreras. El francés me dio mi primer puesto de trabajo”, subrayó y comentó que encontrar una oportunidad laboral después de terminar la carrera de Nutrición no le fue fácil a pesar de haber culminado con honores, por lo que viajó a Francia y allí tomó varios cursos sobres sus profesiones, ya a su regreso se desempeñó como docente.

Paiva consideró que esas experiencias le capacitaron para brindar una mejor atención a sus pacientes, teniendo como base tres pilares: escuchar las emociones, modificar los hábitos y ofrecer una alimentación saludable, de manera a cambiar el estilo de vida y mejorar la salud.

“Es parte del tratamiento abordar la totalidad, por ejemplo, cómo es su familia, su relación, entorno, porque todo incide e influye en la comida. Esa consulta muchas veces se vuelve de confianza, yo me meto en el plato de la persona porque es significativo para el proceso de cambio”, explicó.

Y agregó: “los cuerpos delgados pueden estar enfermos y los cuerpos que están con sobrepeso pueden estar completamente sanos. Eso tenemos que saber porque no tiene que ver justamente con el número de la balanza”.

Método No Dieta

“Estábamos programadas para indicar dietas y teníamos que explicarle a la gente que las dietas en el sentido riguroso no estaban funcionando y traían todo lo contrario. Este movimiento impulsó mucho, yo también cambié mi forma de percibir”, mencionó.

La nutricionista comenta que en su consultorio utiliza indicadores de cambio, que no es precisamente pesarles, sino más bien preguntarles qué sienten, qué cambió, cómo estuvo el tratamiento, entre otros aspectos que evalúan mejor la propuesta. “No es necesariamente centrarse en el peso, no es eso lo que perseguimos”, remarcó.

Su enfoque consiste en adecuarse a la realidad de cada paciente. “Tengo pacientes que son delivery o guardias de seguridad y tienen que comer en la calle a deshoras y en horarios super irregulares. Nos defendemos con lo que tenemos. Tengo gente que viaja al interior y tiene que comer donde le toque. Siempre se tiene ese preconcepto de no puedo cuidarme porque necesito conseguir una ensaladita. Y no, con lo que tenés cerca podemos ver qué hacer y cómo podemos mejorar”, puntualizó.

Manifestó que la nutrición hoy está para todos a través de diferentes corrientes y estilos. “Lo mío trato de hacerlo lo más equilibrado y cómodo posible para que no cause daño. Cada paciente encuentra su lugar”, sostuvo.

Sus personas y momentos más importantes

Angie recorrió sus más gratos recuerdos a través de algunas fotografías y destacó el acompañamiento de sus seres queridos en cada paso de su vida: sus padres, amigas, esposo y sus hijos Gonzalo y Mateo.

“Mi mamá es mi reflejo, ella es una mujer fuerte (...) Mi papá super presente y amoroso. Estaban allí al pie de cada examen. Recuerdo que el día que inauguramos la clínica, yo me levantaba para ir a limpiar y ellos ya estaban en la vereda tocando el timbre”, rememoró entre sonrisas.

Al ver su recuerdo de boda, resaltó el apoyo de su esposo, con quien tuvo dos hijos Gonzalo y Mateo. “Siempre me impulsó. Está detrás de todo diciéndome ‘animate, vos podés’. No podemos llegar lejos si no tenemos un compañero así, además es un gran papá”, dijo.

Y añadió: “Mis bebés hermosos me cambiaron la vida. Es increíble como uno puede ver diferente después de tener niños, ellos también me impulsan”. Mencionó además a sus amigas, que fueron quienes la acogieron con cariño cuando vino de Pilar a Asunción.

En otras imágenes habló de su experiencia en Francia, donde trabajó como profesora de español en una universidad católica. Contó que se fue a enseñar, pero paralelamente tomó todos los cursos que pudo para fortalecer sus conocimientos.

También recordó su paso por los espacios en medio de comunicación y en redes sociales, donde logró llegar a más hogares con su propuesta saludable diferente.

El video completo de la entrevista lo encontras aquí.