El Cristo Redentor de Rio de Janeiro, el monumento religioso inaugurado en 1931, está pasando por una etapa de restauración para celebrar sus 90 años em octubre próximo.
La arquitecta Cristina Ventura, responsable de la obra, mencionó que “la estructura externa, expuesta a la intemperie, sufre un proceso de desgaste por el sol, la lluvia, los rayos y las diferencias de temperatura”.
Ubicado a 710 metros de altura sobre el nivel del mar, en la cima del cerro del Corcovado, la estatua recibe casi dos millones de visitantes por año y en octubre celebra sus casi cien años de vida.
En 1921, la Iglesia Católica organizó un concurso para construir un monumento religioso para el centenario de la Independencia de Brasil (1822). El ganador fue el ingeniero brasileño Heitor da Silva Costa, quien dedicó diez años al proyecto. El artista plástico brasileño Carlos Oswald hizo el diseño final de la estatua, ejecutada por el francés Paul Landowski. Finalmente, el Cristo Redentor se inauguró el 12 de octubre de 1931.
La restauración para este aniversario incluye una radiografía minuciosa del estado de su revestimiento (hecho con miles de pequeñas piedras triangulares cortadas artesanalmente), de su armadura de hierro interna y de las filtraciones de humedad en su estructura.
Para ello, utilizan fotografías de precisión y un equipo de alpinistas que se aventura en busca de las averías y piezas que precisan sustitución. El escalador Marcos Sidnei coordina ese trabajo en las alturas y con una sonrisa en el rostro cuenta que “quien sube al Cristo ve un paisaje diferente cada día”.
Debido a la pandemia, entre marzo y agosto de 2020 no recibió visitas, por ende no sufrió daños, pero con este proyecto de restauración se pretende trazar un plan de mantenimiento preventivo para evitar que los sufra a futuro. Y es que debe hacer honor al gran título que carga: ser una de las siete maravillas del mundo moderno.
Fuente: del texto de Florian Plaucheur.
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Abaten a peligroso líder criminal de Rio de Janeiro
Un sospechoso de ser uno de los principales jefes del crimen organizado de la ciudad de Río de Janeiro murió ayer viernes en un enfrentamiento a tiros con la policía cuando trataba de arrestarlo, informaron las autoridades. La policía civil de Río explicó en un comunicado que Rui Paulo Gonçalves Estevão, alias “Pipito”, era el presunto jefe de una las “milicias”, grupos criminales que siembra el terror en los barrios populares y ejecuta todo tipo de extorsiones.
“Al momento de ser abordado, atacó a los agentes y se produjo un enfrentamiento. El criminal fue alcanzado y llevado a un hospital local, pero falleció por las heridas”, detalló el cuerpo de seguridad. El gobernador de Río, Claudio Castro, dijo en X que se trata de un “duro golpe contra los delincuentes que perturban la paz de la población”.
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Según Castro, Pipito dio “la orden de quemar 35 buses” en barrios del oeste de la ciudad de Río de Janeiro, una medida en represalia por la muerte de otro presunto jefe miliciano a manos de la policía. Este hecho conmocionó a la sociedad brasileña y evidenció el dominio que tienen estos grupos criminales en la ciudad.
Las milicias, fundadas en Río de Janeiro hace unas cuatro décadas por exmiembros de las fuerzas del orden, se presentaban como grupos de autodefensa contra narcotraficantes, pero en realidad funcionan como mafias que por medio de extorsiones controlan múltiples negocios.
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Fuente: AFP.
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Decomisan armas de guerra compradas en el mercado negro de la frontera
- Pedro Juan Caballero (Emerson Dutra, corresponsal)
Se trata de cuatro fusiles calibre 7,62 COLT con alto poder de destrucción que, según los datos, tenía como destino final los barrios pobres de la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
Las armas de guerra fueron encontradas ocultas en el interior de un vehículo Hyundai HB20, que estaba al mando del brasileño Rui Fernández Nunes de Oliveira (31).
De acuerdo a los datos, agentes de la Policía Rodoviaria Federal se encontraban realizando control de rutina cuando detuvieron el vehículo para una inspección. Sin embargo, grande fue la sorpresa de los uniformados cuando, al revisar el automóvil, encontraron los fusiles de guerra y 9 pistolas automáticas calibre 9 milímetros con sus respectivos cargadores.
Nunes de Oliveira confesó a los federales que las armas tenían como destino final la ciudad “maravillosa” de Río de Janeiro. Así también, dijo que había entregado el vehículo a una persona “desconocida” en la terraza del país quien lo volvió a entregar el rodado en horas de la madrugada de hoy martes.
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Según los datos, para pasar desapercibido, el hombre viajaba en compañía de su esposa e hijos menores de edad. “Se mostró nervioso durante el control, además de contradecirse sobre su visita a la frontera. Eso levantó la sospecha que llevaba algo. Entonces, optamos por revisar el rodado”, señalaron los policías.
El detenido, al igual que las armas fueron llevadas a la base de operaciones de la Policía Federal de la vecina ciudad brasileña de Ponta Porá a disposición de la justicia ordinaria.
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Hallaron vestigios de lo que habría sido el Cristo Redentor del Paraguay
Una de las etapas menos estudiadas de la historia paraguaya son los festejos y acciones que se llevaron adelante por el centenario de la Independencia nacional. En esta entrevista con La Nación/Nación Media, el historiador y arqueólogo Néstor Gamarra brinda detalles de una investigación que llevó al hallazgo de restos de una escultura del Cristo Redentor en un cerro homónimo de Paraguarí.
- Por Dolly Galeano
- dollygaleano@gmail.com
- Fotos: Archivo / Gentileza
Una investigación sobre otros hechos históricos llevó al investigador a buscar la verdad sobre testimonios de pobladores que fueron transmitiéndose a lo largo de los años. Así llegó a lo que parecen ser los vestigios de una celebración histórica por el centenario de la Independencia. Posterior al hallazgo, siguió investigando y reforzó la confirmación de lo encontrado.
Gamarra cuenta que a finales de 1910 los ciudadanos de Asunción se encontraban deseosos de festejar el centenario de la Independencia, lo que se evidenció en manifestaciones de estudiantes a finales de aquel año que salieron a las calles y plazas con mucha algarabía. Estos preparativos se dieron en medio de las tensiones sociales y políticas de esas fechas.
“En enero de 1911 llegaría al poder Albino Jara luego de realizar un golpe de Estado y derrocar al presidente Manuel Gondra. Cuanto más iba llegando el mes de mayo, la presión social por realizar los festejos fue aumentando y el gobierno dictatorial no tuvo de otra que sumarse a las actividades sociales que se estaban realizando”, relató el historiador.
Sigue diciendo que “Albino Jara sería depuesto en julio de ese mismo año, la guerra civil del centenario recuperó impulso y finalizó recién en mayo de 1912, con la muerte de Jara. Los festejos oficiales llevados por el Gobierno se hicieron recién en 1914, durante la presidencia de Eduardo Schaerer”.
Los datos hallados apuntan a que Schaerer fue quien mandó instalar el Cristo Redentor en la punta de uno de los cerros de Paraguarí en honor del centenario de la Independencia del Paraguay.
ESTANCIA JESUÍTICA
Gamarra refirió que realizaba un trabajo de investigación sobre la estancia jesuítica de Paraguarí y sus esclavos cuando fue encontrando testimonios de viejos pobladores sobre antiguas bases de piedra y vestigios en la zona de Mbatovi, pero también sobre antiguas esculturas sacras en uno de los cerros de la ciudad. “En el proceso de investigación de documentos no existía casi ningún registro relacionado a los comentarios y el sitio”, apuntó.
Cuenta que el cerro del que hablaban es conocido por los pobladores como Cristo Rey, pero existen otros documentos que lo registran como cerro Cristo Redentor, que linda con el Comando de Artillería y la ruta Piribebuy-Paraguarí y es uno de los tantos cerros que forman el hermoso paisaje con los cerros Cerro Hû y Santo Tomás.
Durante su recolección de datos, Gamarra recordó comentarios de su abuelo (militar retirado de la Artillería, donde sirvió por más de 40 años) sobre hallazgos de vestigios antiguos próximos al cerro Cristo Rey, como él lo conocía. También su padre, Ramón Gamarra, le había mencionado que, en los años 60, siendo niño, había escalado el mismo cerro y que visualizaron una figura tallada en piedra.
El investigador decidió explorar el lugar a pesar de ser inmensamente grande y estar cubierto por mucha vegetación, pero la única forma de llegar era teniendo como guía a su padre, quien había visto la piedra hace casi 60 años. Para el camino seleccionado utilizó la cara del cerro que mira hacia el sur y que linda con la ruta Paraguarí-Piribebuy, la misma que volvería a subir más de 50 años después recordando vagamente el lugar.
OBSTÁCULOS Y HALLAZGO FINAL
El tránsito a la punta del cerro tuvo muchos obstáculos. Senderos llenos de marañas que habría que tratar de subir en medio de espinas de caraguata, karanda’y, pynõ guasu, entre otras, dificultaron el acceso, relató Gamarra. Durante la travesía hasta la cima del cerro el historiador incluso cayó desde unos tres metros, lo cual le causó lesiones.
Luego de mucho esfuerzo físico, la búsqueda llegó a su fin. “Cuando aún faltaban metros para llegar a la cima, encontramos parada una enorme piedra arenisca litografiada, cubierta en gran parte por alimañas”, contó Gamarra. El guía –su padre– le dijo que esa es la piedra que él había visto en los años 60.
Lo hallado es un pedazo grande de una figura de Cristo, pero sin la parte superior. Alrededor se visualizaron piedras areniscas con bordes regulares y trabajados, que serían parte de la misma escultura, con litografías en latín. Se procedió a una limpieza cuidadosa del lugar y de la superficie de la piedra para las capturas fotográficas y prueba documental para el informe a la Secretaría Nacional de Cultura sobre el hallazgo, reveló el historiador.
Unos 30 metros más arriba del sitio, donde fue hallada parte de la escultura, en medio de arbustos se encuentra un gran montículo de piedra con vestigios de mampostería, que sería el lugar donde estaba el antiguo escudo del Ejército en la punta del cerro. Siguieron la búsqueda de las otras piedras que serían de la parte superior de la estatua, pero no lo encontraron.
Gamarra está convencido de que esta se encuentra en alguna parte del cerro, cubierta también por alimañas. Refirió que antiguos funcionarios de la Artillería indicaban que en los años 40 o 50 se intentó bajar una piedra que parecía escultura y se quedó en medio del camino por su gran tamaño y peso.
PUBLICACIÓN SOBRE COLOCACIÓN DEL CRISTO
Después del hallazgo continuó la investigación. El sacerdote Hugo Fernández, quien era director del Museo Juan Sinforiano Bogarín, ayudó en la pesquisa y encontró publicaciones de la Revista Diocesana de enero de 1913 en las que se mencionaba la colocación de una piedra para erigir el Cristo Redentor.
“Sobre un hermoso cerro del histórico pueblo de Paraguarí se erigirá en breve la gran estatua del Cristo Redentor en la conmemoración del 1er. centenario de la Independencia del Paraguay. El obispo diocesano, el presidente de la República actuaron en la colocación de la primera piedra, el primero como oficiante y el segundo como padrino”, decía el escrito. El presidente a quien se refería fue Eduardo Schaerer y el obispo de entonces, Juan Sinforiano Bogarín.
La colocación del Cristo Redentor en Paraguay en el centenario de la Independencia no fue casual. En esa misma época se instalaba el Cristo Redentor de los Andes entre Argentina y Chile. Esta escultura podría ser muy similar en tamaño y detalles al hallado en Paraguay, según Gamarra.
“El Cristo Redentor de Brasil es un proyecto más antiguo, pero se empezó a construir en 1922, también en conmemoración al centenario de su independencia e inaugurada el 12 de octubre de 1931″, subraya el historiador.
PUESTA EN VALOR
Gamarra pone de relieve que es imperante seguir con la investigación y realizar una prospección arqueológica preventiva antes de que se realice alguna modificación en el lugar. “Es transcendental que las autoridades puedan realizar un trabajo de puesta en valor de tan importante escultura y sitio histórico”, expresó Gamarra.
Cabe recordar que, en julio de 2020, el entonces gobernador de Paraguarí, Juan Carlos Baruja, había anunciado la instalación de un teleférico en una de las cumbres de los cerros Hû y el de Cristo Redentor. La obra iba a ser parte de un convenio interinstitucional entre la Gobernación de Paraguarí, el Ministerio de Defensa y el Comando de Artillería. También se habló entonces de la instalación de un nuevo Cristo Redentor de 15 metros en la cima del cerro.
Gamarra resalta la importancia de preservar el sitio del hallazgo de los restos de lo que habría sido el Cristo Redentor en Paraguarí debido a que “fue testigo de sucesos históricos, ya sea de la época jesuítica, de la época colonial, la Independencia con la batalla de Cerro Porteño, la guerra contra la Triple Alianza, las sucesivas revoluciones civiles y durante la guerra del Chaco fue destino de los prisioneros bolivianos”.
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Bolsonaro celebra acto masivo en Rio contra Lula
El expresidente brasileño Jair Bolsonaro elogió el “coraje” del magnate Elon Musk para “preservar la libertad” de expresión en Brasil, y llamó a sus seguidores a defender ese derecho “amenazado”, en un acto masivo este domingo en Rio de Janeiro.
Musk “es un hombre que realmente preserva la libertad para todos nosotros”, y que “tuvo el coraje de mostrar, con algunas pruebas (...) para dónde está yendo nuestra democracia, cuánta libertad ya hemos perdido”, afirmó Bolsonaro desde un escenario frente a la emblemática playa de Copacabana.
La multitud, que ocupaba varias calles y una parte de la arena, aplaudió con entusiasmo al dueño de la plataforma X, antes Twitter, quien se enfrentó en los últimos días al juez del Supremo Tribunal Federal (STF) Alexandre de Moraes y pidió su destitución. En simultáneo al acto bolsonarista, Musk escribió en su cuenta de X que Moraes “está en contra de la voluntad del pueblo y, por tanto, de la democracia”.
En nombre del combate a la desinformación, el juez de la máxima corte ha ordenado bloquear cuentas de usuarios en plataformas de internet, entre ellas X, sobre todo tras intentos de bolsonaristas de desacreditar el sistema de votación durante la campaña electoral pasada.
Acompañado de su esposa e hijos, el expresidente ultraderechista, de 69 años, acusó al gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva de querer “una dictadura” y llamó a “continuar la lucha” para defender la libertad de expresión, “amenazada” en Brasil.
Bolsonaro se abstuvo de mencionar en su discurso a Moraes, que comanda varias investigaciones que pesan sobre el expresidente. Otros oradores del acto, en cambio, arremetieron duramente contra el magistrado, entre ellos el diputado Nikolas Ferreira y el influyente pastor evangélico Silas Malafaia.
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“STF pasó los límtes”
Concentrados desde temprano, miles de seguidores vestidos con camisetas de la selección brasileña o envueltos en banderas de Brasil o de Israel se mezclaban con turistas, que observaban con curiosidad la manifestación. “Vine a luchar por mi libertad de expresión porque no tenemos más ese derecho. El STF pasó todos los límites. (...) No es por un partido ni por una persona”, dijo a la AFP Daiana Mesquita, una comunicadora de 38 años.
Tras la embestida de Musk, Moraes ordenó investigarlo como sospechoso de “instrumentalización criminal” de la plataforma X. La pulseada entre ambos se extendió a todo el ámbito político y jurídico en Brasil. Otros miembros del alto tribunal se pronunciaron en respaldo a Moraes, mientras el presidente Lula sostuvo en un acto reciente, sin aludir a Musk directamente, que “si pudiera, haría un decreto para prohibir mentir” y “encarcelar a quien mienta”.
Moraes, que ha multiplicado sus discursos públicos estos días, afirmó el viernes que la justicia brasileña está acostumbrada “a combatir mercantilistas extranjeros que tratan a Brasil como una colonia”, en alusión a Musk, pero sin mencionarlo. Por su parte, legisladores bolsonaristas y otros partidarios acusaron al STF de estar alineado con el gobierno de Lula y de socavar la democracia y las libertades.
Incluso un comité de la Cámara de Representantes de Estados Unidos intervino en la pugna, al hacer público el jueves un informe de cientos de páginas con decisiones confidenciales de De Moraes que involucran a X y otras plataformas digitales.
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La sombra de la justicia
La manifestación bolsonarista se realizó dos meses después de que Bolsonaro volviera al ruedo público con una demostración de fuerza en Sao Paulo, que reunió a unas 185.000 personas, según estimaciones de un centro de monitoreo. Inhabilitado para disputar elecciones hasta 2030 por haber desinformado sobre el sistema electoral, el exmandatario (2019-2022) se ha dedicado los últimos meses a recorrer el país para encontrarse con sus simpatizantes.
Este domingo, pidió “que Brasil vuelva a la normalidad” y se realicen elecciones “sin ninguna suspensión” de candidatos, a dos años y medio de las próximas presidenciales, que se celebrarán en 2026. Varias investigaciones judiciales planean sobre él y podrían incluso llevarlo a prisión.
La más grave lo considera sospechoso de haber participado en un “intento de golpe” para evitar la asunción de Lula, quien lo derrotó en las elecciones de 2022. En Copacabana, el exmandatario volvió a rechazar las acusaciones e insistió en que es víctima de una “persecución”.
Fuente: AFP.