Analistas políticos coincidieron sobre los grandes logros del Gobierno encabezado por el presidente de la República, Santiago Peña, y lo que aún queda pendiente en este primer año de gestión. José Fernando Duarte y Esteban Caballero, analistas políticos, realizaron este balance en el programa Fuego Cruzado, emitido por canal GEN.

Duarte hizo refe­rencia al impulso modernizador muy fuerte en términos de pro­cesos de este gobierno. “El gran desafío es que los pro­gramas en su ejecución y en sus objetivos puedan mos­trar los mismos niveles de manejo de la cosa pública y de eficiencia, yo creo que ahí hay una apuesta política que el gobierno de Peña tiene, un gobierno que busca moderni­zar al Estado”, indicó.

Agregó que la otra discusión tiene que ver con los límites del modelo de desarrollo y el modelo del país que estamos construyendo en Paraguay, “la viabilidad o no de esto que es como un pacto social implí­cito, que tiene un consenso muy amplio y que muchas veces es resaltado como una de nuestras mayores fortale­zas y virtudes en el mundo, nuestro sistema tributario impositivo, hasta qué punto esto va a permitir avanzar en ese espíritu moderniza­dor, con la modernización del área económica”, dijo.

Por otra parte, destacó que este gobierno mantiene la iniciativa política como una cierta ventaja, que es no tener grandes focos de contesta­ción al itinerario y la hoja de ruta. A esto, agrega la inexis­tencia de una oposición con posturas firmes que pueda hacer frente al Gobierno.

“Tenemos en frente a una oposición que orgánicamente no existe, existen oposito­res e individualidades que hacen un rol testimonial, pero no una oposición orgá­nica. Tampoco veo mucha capacidad de los medios de prensa críticos de instalar una agenda diferente de la que el Gobierno lleva ade­lante, siempre se discuten los términos que propone y en los programas que están llevando adelante”, apuntó.

Por su parte, Esteban Caballero se refirió a la política exterior de Paraguay, que hace parte del plan de desa­rrollo 2030, que se puso como un objetivo hacer conocer a Paraguay en el plano internacional, promo­verlo como un país atractivo para las inversiones.

“La diplomacia presidencial que ha ejercido Peña durante este año, de alguna manera cumplió con ese objetivo o estuvo cumpliendo, tratar de atraer la atención al país y eso se agregó a una polí­tica que se ha ido consoli­dando en el país, respecto a una estabilidad macroeco­nómica y la responsabilidad fiscal”, refirió.

En cuanto a lo no logrado hasta el momento, habló de la creación de empleos como una de las áreas más duras que hasta el momento no tiene un resultado visible agregado a la formalidad, como los bloques más duros que aún no se pueden abrir.

“Hay ciertos bloques duros que parecen ser que no pode­mos romper o quebrar o abrir y puedo señalar dos que tie­nen que ver con resultados más en carácter estructu­ral, cuando se habla del tema del empleo o tratar de crear empleo, estamos viendo eso, pero al mismo tiempo vemos como volatibilidad, como muestran las encuestas. No hay continuidad”, afirmó.

En cuanto a la economía informal, también señaló que es uno de los puntos en el que aún no se puede encontrar un balance y que se refleja en la realidad social de los trabajadores. “Esos dos elementos hacen que el paraguayo medio, la fuerza de trabajo del Paraguay, que son 3 millones y medio, están todavía en ese tren de sobre­vivencia. Ese es un problema donde no se puede mostrar un resultado llamativo, aun­que se defienda el modelo”, puntualizó.