Lourdes Torres, lourdes.torres@nacionmedia.com

El analista político Hugo Duarte brindó su parecer respecto a la dirección que está tomando el Partido Liberal Radical Auténtico, principal nucleación política de la oposición, señalando que tras la terrible derrota de la Concertación que estuvo liderado por el PLRA bajo la presidencia de Efraín Alegre, marcó el final de una etapa que comenzó un poco antes. Indicó que ha sido un periodo de deterioro político que estuvo escalonado con errores de criterio político durante un tiempo bastante corto, lo que hizo que finalmente esta nucleación política tocara fondo.

En conversación con el diario La Nación/Nación Media, el analista señaló que el efrainismo subordinó todo el Partido Liberal a sus ambiciones presidencialistas y eso imposibilitó el cotejo electoral transparente. También permitió convertir al Partido Liberal en la caja recaudadora que sustentó al efrainismo, porque estamos viendo esa cantidad enorme de deuda que quedó al Partido Liberal, que de alguna manera se tendrá que resolver para que pueda ser viable; de lo contrario, el PLRA no podrá operar en ningún sistema financiero”, expresó.

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Duarte remarcó que en lo personal hace votos para que el PLRA vuelva a encontrar la luz al final del túnel, ya que esta nucleación ocupa una franja importante de la representación política que hay en el Paraguay. “La desaparición del PLRA tendría un efecto de permitir que eso sea un espacio de poder vacío que indefectiblemente alguien tendrá que ocupar”, acotó.

Hugo Duarte remarcó que en lo personal hace votos para que el PLRA vuelva a encontrar la luz al final del túnel

TAMPOCO LE CONVIENE A LA ANR

Señaló que al Partido Colorado tampoco le conviene la desaparición del PLRA, porque es un partido que basa su consistencia e identidad en la competencia y en el debate con el adversario. “Al no tener una contraparte también podría desencadenar otros fenómenos hacia el interior de la ANR. El sistema político en general es así, está unido de una manera tan perfecta que todo funciona mientras que todas las fuerzas estén operando. Pero cuando una de ellas desaparece, entonces ese vacío de poder genera un efecto en todo el sistema político”, indicó.

Añadió que ese vacío político podría llevar a buscar a alguien que pretenda competir con la maquinaria de la Asociación Nacional Republicana, el cual en este momento indicó que sería como hablar de “un escenario de ciencia ficción” ya que solo se puede imaginar lo que podría suceder. “Si no sale alguna figura fuerte en la oposición, se puede bien vaticinar que se viene un largo periodo de hegemonía del Partido Colorado en la conducción del Estado”, precisó.

CAMBIO DE NOMBRE

Respecto al planteamiento de algunos dirigentes liberales de cambiar el nombre del PLRA y dejarlo simplemente en Partido Liberal, el analista Duarte señaló como ejemplo que “el simple hecho de que Antonio, que sufre de una enfermedad terminal, el hecho que pase a llamarse Eugenio no significa que se va a curar”, con lo cual dio a entender que no tendrá ningún valor simbólico el cambio de nombre del partido que en este momento se plantea aplicar.

“Lo que veo que el exsenador Jaeggli siempre tiene esa nostalgia de aplicar lo que era del siglo pasado, cuando el PLRA era hegemónico y más o menos lo que plantea es un túnel del tiempo con la intención de recuperar alguna fuerza perdida en el pasado. Pero considero que las condiciones actuales de la sociedad hace que se necesite otro tipo de lectura”, comentó.

Finalmente, Duarte indicó que los partidos de la oposición en general los ve completamente abrumados ante la hegemonía del Partido Colorado. “La oposición está sin capacidad de resolver la ecuación que hace la fuerza disciplinada en cierto sentido como es la ANR, que tiene gran capacidad de debate interno para resolver sus disputas y capacidad de administrar los conflictos internos que sí los tiene, pero ante esta superioridad los opositores en general están abrumados y no saben cómo reaccionar y es así que surgen actores individuales que podrían tener muchos me gusta en redes sociales, pero sin ningún efecto político en la realidad”, concluyó.

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