El presidente electo de la República, Santiago Peña, conversó en el programa de CNN, conducido por el periodista Fernando del Rincón, sobre varios temas, entre estos el proceso electoral vivido en el país, los desafíos que enfrentará el mandatario electo desde el 15 de agosto y las relaciones diplomáticas.
Peña fue consultado sobre el infundado fraude electoral y dijo que esa cuestión está enturbiando una jornada cívica que fue ejemplar. “Paraguay nunca en su historia ha recibido tantos observadores internacionales que han sacado informes contundentes de los resultados, quienes han dicho que han sido unas enormes elecciones con gran cultura cívica, por supuesto hay siempre áreas de mejoras”, remarcó.
Lamentó que los anarquistas estén generando inestabilidad en el país y estén utilizando jóvenes enojados, a quienes el sistema lastimosamente tiene olvidados. “Otros dos candidatos que obtuvieron resultados muy desalentadores se subieron al carro de la inestabilidad que genera Payo Cubas. Esta diferencia que obtuvo Efraín podía significar para él el fin de su carrera política”, mencionó.
Respecto a la contundente y aplastante victoria del Partido Colorado, señaló que él representa una fuente de innovación del partido y que lo que se ha visto en estas elecciones fue una consolidación del modelo de partido político contra estructuras de movimientos partidarios que intentan destruir a los verdaderos partidos políticos.
RELACIONES CON EE. UU.
El mandatario electo fue consultado sobre la relación con Estados Unidos y sobre la situación que envuelve al presidente del Partido Colorado y exmandatario de la República, Horacio Cartes. En primero lugar, Peña respondió: “La relación que tengo con el gobierno americano ha sido, es y seguirá siendo muy buena. He mantenido siempre los canales de comunicación abiertos”, enfatizó.
En lo referente al expresidente, comentó que el mismo ha negado todas las acusaciones y que está haciendo su mayor esfuerzo para demostrar que no son ciertas. “Es una responsabilidad personal de él. Esto no afecta ni al Partido Colorado, ni afecta a la República del Paraguay y mucho menos va a afectar a mi relación personal como jefe de Estado con un gobierno que ha sido históricamente un gran amigo del Paraguay”, apuntó.
Peña resaltó que en el país existe un total equilibrio de poderes. Explicó que el proceso judicial no es un proceso que se tramita dentro del Poder Ejecutivo, sino en el Poder Judicial. “Ellos tienen todas las garantías y libertades para llevar adelante cualquier tipo de procesos como se ha hecho en el pasado”, afirmó.