El presidente de Taba­calera del Este SA (Tabesa) y de la Unión de Tabacaleras del Para­guay, José Ortiz, invitado al programa “Fuego Cruzado”, emitido por el canal GEN/Nación Media, dialogó con los conductores del programa Augusto dos Santos y Benja­mín Livieres sobre el alcance y los detalles del proyecto de ley de “Protocolo para la eli­minación del comercio ilícito de productos de tabaco”, pre­sentado por el Poder Ejecu­tivo, y que cuenta con media sanción en la Cámara de Senadores.

Ortiz explicó que “en la Cámara de Senadores apro­baron un título rimbombante que habla de la lucha contra el ilícito del tabaco, entre otras cosas, en un protocolo articu­lado de entre 80 a 85 artículos, pero ninguno de esos artícu­los se refiere a temas de salud sino que habla mucho más de temas logísticos, medidas de seguridad y otras cosas”, aclaró el empresario.

CLÁUSULAS IMPRACTICABLES

Agregó que “el problema que tiene este proyecto de ley es la cantidad de cláusulas imprac­ticables y que son de imposi­ble aplicación y lo triste es que ninguna comisión del Senado convocó al sector (tabacalero), que es un sector que tiene a las industrias que más impues­tos pagan en el país”, recordó José Ortiz. Los industriales tabacaleros no fueron invi­tados a conocer los detalles de una ley que afecta direc­tamente al importante sector productivo nacional pero el empresario criticó que sí fue convocado un supuesto ciuda­dano brasileño del Ministerio de Salud. “No sé si es un brasi­leño del ministerio de Salud o de alguna onegé. Él si estuvo en las comisiones”, añadió.

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Posteriormente dijo que pidió a los legisladores postergar el estudio para poder sentarse a discutir los alcances de la ley en una mesa técnica y sobre todo fuera de un periodo pre­electoral como el que se está viviendo en el país. “Lo que pasa es que un jugador impor­tante de la política paraguaya es accionista de la tabacalera más grande del país, por lo que solicitó tener un análisis obje­tivo y técnico de las cláusulas controversiales y las de impo­sible aplicación”, explicó.

Una de las cláusulas del pro­tocolo dice que debe ser apro­bado in extenso o no apro­bado. “Por tanto, aprobaron un proyecto en el que nin­gún legislador puede respon­der cuál va a ser la tecnología a ser utilizada para llevar a cabo este protocolo, porque esto conlleva uso de tecno­logía como las exigencias de trazabilidad que no son de posible aplicación, así como altas inversiones y toca el pre­supuesto del Estado”, mani­festó.

Ortiz explicó que en paí­ses donde fue aprobado este mismo protocolo, no está siendo aplicado. “Lo que este señor brasileño dijo, no es lo que dice el protocolo, que tiene muchas más exigencias de lo que él mencionaba”, y puso como ejemplo a la tecnología para determinar la trazabi­lidad comercial de los pro­ductos. “Siendo un producto de consumo masivo, ¿Cómo sería posible saber a quien se le ha vendido un cigarrillo en una despensa?”, cuestionó el empresario, quien pide el rechazo de la ley pues no se ha discutido en absoluto la parte técnica de su alcance.

INTERESES ECONÓMICOS

También se refirió a la cam­paña que ciertos periodistas de algunos medios de comu­nicación vienen desarro­llando en contra de la indus­tria tabacalera nacional, movidos especialmente por ambiciones o antipatías polí­ticas. Sin embargo, aclaró que “con el medio de comunica­ción de la calle Yegros, el tema económico es lo importante. Al esposo de Natalia Zucco­lillo, “Miki” Zaldívar, antes le encantaba que Tabesa le financie sus carreras de rally porque él vendía un millón de dólares al mes en cajetillas de cigarrillos”.

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