La administración de Natalicio Chasse paga desde el año pasado por el servicio de un sistema de calidad bajo la norma ISO 9001:2015 que es para una sola gerencia y que básicamente gira en torno a instructivos administrativos que están a años luz de las soluciones que clama la ciudadanía.

Falta de agua y cortes de suministros del líquido vital en todo el país aquejan a la ciudada­nía, mientras la Essap paga por segundo año consecutivo un sistema de calidad bajo la norma ISO 9001 que encima apenas incluye una gerencia, en este caso la Unidad Ope­rativa de Contrataciones.

La cifra puede resultar sim­bólica si la implementación de este sistema de calidad al menos diera señales de mejoras en los servicios de provisión de agua. Pero no es así, barrios enteros de Asun­ción y otros siguen sufriendo la falta de agua.

Según el portal de Contrata­ciones Públicas, hace unos meses, abril del 2020, la Essap contrató por segundo año consecutivo “el servicio de consultoría de asisten­cia técnica y capacitación para el mantenimiento y la mejora continua del sistema de gestión de calidad con la norma ISO 9001:2015” por G. 150 millones, durante 12 meses.

En febrero del 2019 había adjudicado la primera “consultoría para el diseño e implementación del sis­tema de gestión de calidad ISO 9001:2015” para su UOC a la misma empresa Exec por G. 138 millones. Es decir, la gestión de calidad de la administración de Natali­cio Chasse solo se reduce a la gerencia de compras, en la que prestan servicios apro­ximadamente 20 personas, según confirmó el gerente general de la aguatera, Car­los Antonio López.

“Es un ISO para la UOC que solamente afecta a esa dependencia, no tiene nada que ver con la administra­ción; el año que viene se tiene pensado hacer con la parte financiera, estamos consiguiendo por parte por­que no tenemos demasia­dos recursos económicos”, explicó López. Al ser consul­tado sobre la lógica de contar con un certificado de calidad cuando los usuarios sufren falta de agua; el mismo dijo: “Empezaron con la UOC porque para nosotros es muy importante tener la garantía del trabajo en esta sección”.

Trámites y procedimientos administrativos que están lejos de traducirse en mejo­ras tangibles de los servi­cios que clama la ciudadanía incluyen las “actividades” de esta gestión de calidad que equivale a una certificación, según palabras del gerente general de la aguatera.

Actualizaciones de la Intra­net, la designación de un coordinador de calidad, ase­soramientos para los regis­tros nuevos de la convocante (Essap), talleres de análisis de contexto y determina­ción de necesidades, revi­sión del organigrama, ase­soramientos para análisis de riesgos, seguimientos y tratamientos de reclamos, son algunas de las activida­des descriptas en el informe final de la implementación del sistema de calidad con ISO 9001 del año 2019, en la Essap.

Mientras que la adjudica­ción 2020 de abril último que refiere al manteni­miento y la mejora conti­nua del sistema de gestión de calidad contiene infor­mes de actividades men­suales con ítems calcados como; asesoramientos para la actualización anual del análisis de contexto, para tratamientos de reclamos de clientes, para la actua­lización de matriz de ries­gos, verificación de encues­tas de satisfacción, auditoría interna del sistema de ges­tión de calidad, etc.

“El sistema de gestión de calidad de la UOC de la Essap se encuentra actua­lizado y en correcto cum­plimiento de la Norma ISO 9001:2015”, señala el informe final de la primera adjudicación elevado por la consultora al coordinador de calidad José Bogado. Sin embargo, el primer reporte de la segunda adjudicación para el mantenimiento de dicha certificación y mejora continua correspondiente al mes siguiente de la presen­tación del anterior informe final, revela que la calidad cayó por el suelo.

“Se han detectado situa­ciones que comprometen la gestión de calidad que se muestran a través de fotos”, refiere el primer informe de este año que hace mención a la infraestructura de la UOC. Se observan carpetas en el suelo, muebles deteriorados hasta escobas tiradas en la sección archivos. La fotogra­fía refleja la falta de orden en la mencionada dependencia, según el informe.