El abogado penalista y ex fiscal Adolfo Marín señaló ayer que el caso del video en que se ve a tres personas mani­pular la escena del crimen es un aspecto que debe ser analizado por el Ministerio Público a fin de determinar si existe alguna figura penal en que se pueda acusar a los jóvenes que aparecen en las imágenes.

Aseguró que el Código Penal Paraguayo no tipi­fica como delito la mani­pulación o violación de una escena del crimen.

No obstante, indicó que en el hecho podría haber otras figuras reprochables, y es justamente lo que la Fisca­lía debe de determinar.

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“Habría que ver cuál es el delito que se pretende endil­gar. Lo primero, qué delito comete una persona al mover algo de lugar, en una escena de los hechos. Vio­lación de la escena del cri­men, no es un delito, o sea en nuestro Código Penal no está tipificado como delito”, sostuvo el abogado en comu­nicación con La Nación.

En ese sentido, remarcó que con esta acotación no está afirmando que no exista una conducta que pueda ser san­cionada.

“Lo que señalo es que habría que analizar si esa conducta como tal está contemplada por nuestro Código Penal, en algún hecho punible y si eventualmente esa conducta está castigada, se tiene que proceder a la investigación, como cualquier otro hecho”, acotó.

HECHO GRAVÍSIMO

En tanto, el abogado pena­lista Jorge Kronawetter considera que la modifica­ción de una escena del cri­men es un hecho gravísimo y si se hizo a espaldas de la defensa es mucho peor.

Recordemos que los defen­sores del suboficial Floren­tín, único procesado por el crimen, recién accedieron al video hace pocos días, a pesar de que el hecho ocu­rrió hace ya 3 años. Aña­dió que no se puede tomar como una cuestión de menor valor la manipulación de una escena del crimen.

“Una de las primeras reglas que tiene que ver con el manejo de la escena del crimen es la protección, aislamiento y proce­dimiento correcto de cada elemento que se encuentre en ese lugar. La manipula­ción, alteración y modifi­cación en el estado real de las cosas, es un daño capaz irreversible para la inves­tigación penal de la causa”, sostuvo.

­HAY HECHOS CONTUNDENTES

Más allá que ciertos sectores quieran señalar que existiría una intensión de tergiversar la realidad de lo ocurrido la noche en que murió Rodrigo Quintana dentro de la sede del PLRA. Lo cierto es que hay hechos contundentes que revela el video que ahora salió a la luz.

En él se nota a 3 personas que participan en una evidente altera­ción de la escena del crimen de Quintana, ya que una cambia un casquillo, otra da órdenes y la tercera, con la punta del pie, lleva el nuevo casquillo hasta donde están los otros, recogidos por los investigadores.

En otra escena, se nota al hijo del presidente del partido, Efraín Alegre, saliendo a hurtadillas llevando una computadora. Las dos escenas son muy claras, no se prestan a confusión y demuestran que hubo interés en alterar la escena del crimen y esconder infor­mación a la Policía y la Fiscalía, según publicación de ADN digital.

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