- POR RICARDO RIVAS
- Corresponsal
- Corresponsal en Argentina
La Multisectorial de la Comunidad Paraguaya Residente en la Argentina expresó el más “enérgico repudio a la actitud prepotente y sin compromiso social” de la cónsul general de Paraguay en este país, Celia Cañete Cardozo, y sus más cercanos colaboradores –la consulesa en la localidad bonaerense de San Justo, María Amalia Barboza Cabrera, y el cónsul en la ciudad de La Plata, Juan Cano Montanía, ambos funcionarios de carrera, que “no prestan la debida atención a los compatriotas” que recurren a ellos.
Los reclamantes, además, anunciaron que el próximo martes 14, Día de la Independencia, a las 18:00, se manifestarán frente al consulado de Paraguay en esta ciudad “para que las autoridades sepan qué necesitamos las paraguayas y los paraguayos residentes”.
En ese contexto, la Multisectorial se dirige al presidente Mario Abdo Benítez y le recuerda al mandatario que el día en que asumió la primera magistratura se comprometió a “no delegar el poder en manos de burócratas fríos (porque) el pueblo te elige para gobernar, no te elige para que vos delegues ese mandato en burócratas”.
Por su parte, el dirigente comunitario Salomón Ramírez Santacruz, presidente del Club Deportivo Paraguayo, explicó a La Nación que “en estos tiempos de crisis económica como la que se vive en la Argentina, las y los compatriotas más vulnerables, con enormes carencias, que en general son los que llegaron a la Argentina en los últimos tiempos, tienen que pagar aranceles que oscilan entre los 15 y los 20 dólares (unos 675 a 900 pesos argentinos o 93.820 a 125.094 guaraníes) para obtener, por ejemplo, certificados de matrimonio, de nacimiento o de antecedentes, imprescindibles todos para tramitar la residencia legal aquí y trabajar en blanco, como lo indica la ley”.
COMUNICADO
En un comunicado que produjo la Multisectorial se consigna que “la cónsul general, en reiteradas ocasiones ha manifestado públicamente que su única misión es la de recaudar para las arcas del Ministerio de Relaciones Exteriores, sin ofrecer ni escuchar sugerencias para mejorar y ampliar los servicios, que todo consulado comprometido con sus connacionales debe cumplir”.
En diálogo con funcionarios de esa dependencia paraguaya en esta ciudad que exigieron reserva de sus identidades, este corresponsal confirmó totalmente los motivos por los que protesta la comunidad paraguaya, dado que aseguraron que “el consulado recauda entre 50 mil y 70 mil dólares (entre 326,2 y 437,78 millones de guaraníes) mensuales en aranceles, lo que cada año promedia una suma cercana a los 700 mil dólares (unos 4.502,88 millones de guaraníes)” y precisaron que “cuando le decimos a la señora Cañete Cardozo, cónsul general, que las y los compatriotas no pueden pagar esas sumas, de mala manera nos dice que ella vino para recaudar porque tenemos que arreglar el edificio que se cae a pedazos”.
Tanto esos funcionarios como el comunicado emitido por las organizaciones comunitarias admiten que los aranceles consulares los establece la Ley N° 4.033/2010, pero destacan que “su aplicación se encuentra suspendida desde el 2011” en lo que concierne a la tramitación de los documentos que exigen las autoridades migratorias argentinas en función de “la especial situación social de los paraguayos” en este país “en el peor momento de la profunda crisis económica y social en Argentina”.
La queja agrega también la falta en las dependencias consulares de “un servicio de asistencia tutorial a los connacionales para realizar los trámites migratorios digitales ‘on line’ vigente” aquí.