El senador Fernando Lugo sigue mejorando en su estado de salud, aunque no abandonó aún totalmente el respirador. El líder del Frente Guasu reacciona positivamente al tratamiento de rehabilitación iniciado hace unas semanas en la Argentina, tras haber sufrido un accidente cerebrovascular el pasado 10 de agosto en nuestro país.
“Está mejorando, antes de ayer le trasladaron al área de rehabilitación. No me consta que responda mensajes de WhatsApp, lo que sí me consta es que tiene interacción con los familiares. Ya responde a órdenes simples, pero todavía no se puede evaluar a profundidad, seguramente en las próximas semanas eso se podrá hacer”, comentó el senador Jorge Querey a La Nación/Nación Media.
El médico de cabecera del expresidente de la República afirmó que hasta el momento no se ha retirado totalmente el respirador al paciente. “Sigue con períodos sin respirador, como parte del entrenamiento de rehabilitación de la parte respiratoria”, puntualizó. En esta fase del tratamiento médico, lo más sorprendente para los médicos es la interacción de Lugo con el entorno, un hecho alentador en lo neurológico, puesto que está despierto y trata de comunicarse con las personas que lo rodean.
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El pasado 11 de setiembre, el doctor Querey visitó a su paciente en la clínica privada Fleni de Buenos Aires y a su regreso comentó que el legislador fue sometido a una serie de evaluaciones tales como resonancia magnética, encefalograma y otros estudios laboratoriales. Explicó que en primer lugar se buscará su rehabilitación respiratoria y una vez superada esta etapa comenzará el proceso de recuperación motriz y la estimulación sensorial.
“Se puede hablar de avances, Lugo tiene su periodo de sueños profundos, pero cuando está despierto interactúa limitadamente con sus familiares. Él aún no puede hablar porque está con traqueotomía, hasta que no se le retire el respirador, eso no podrá ocurrir. La interacción son con señas, de pequeños gestos que realiza con sus hijos, comenzó a estar más activo “, había destacado el médico.
Lugo, de 72 años de edad, fue trasladado el pasado 7 de setiembre al vecino país. El congresista fue internado inicialmente en Paraguay de forma inmediata con el diagnóstico de un ACV y luego fue sometido a una intervención quirúrgica compleja tras la detección de un sangrado en el cerebro. Días después, el senador sufrió un sangrado en la zona de la faringe que obligó a realizar una traqueotomía para proteger las vías respiratorias.
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