El gremio que aglutina a trabajadores del Ministerio de Desarrollo Social (MDS) expresó su repudio a los despidos masivos que se producen en la institución estatal, específicamente en el programa Tekoporâ. Según las denuncias, las desvinculaciones serían por no apoyar la candidatura de Hugo Velázquez a la Presidencia de la República.
De este modo, suman y siguen las denuncias de despidos injustificados en la función pública como parte de la persecución política impulsada desde el oficialismo en el marco de las internas coloradas, marcadas para el 18 de diciembre.
En esta oportunidad, los reclamos provienen del Ministerio de Desarrollo Social (MDS), administrado por Mario Varela, donde varios funcionarios del Programa Tekoporâ afirman haber sido descontratados sin causa alguna.
A través de un comunicado, el Sindicato de Trabajadores del Ministerio de Desarrollo Social (SITRASAS) expresó su repudio por esta situación, asegurando que en la citada cartera estatal se producen violaciones de derechos laborales contra los trabajadores.
Todos los despidos que se vienen realizando de manera injustificada y arbitraria serían por “no estar en sintonía” con las actividades político-partidarias del movimiento oficialista Fuerza Republicana, que postula a la dupla presidencial conformada por Hugo Velázquez y Juan Manuel Brunetti.
El sindicato sostiene que el Programa Tekoporâ es utilizado actualmente como una “seccional colorada” mediante el prebendarismo, recurriendo a prácticas incoherentes con los fines misionales e institucionales de un ministerio tan sensible como el de Desarrollo Social.
El director del programa, Antoliano Cohene, es acusado de truncar la posibilidad de que los funcionarios alcancen la anhelada estabilidad laboral, además de “pervertir y violar los derechos laborales y humanos” de sus compañeros por el hecho de no participar de los actos políticos del vicepresidente de la República.
La Nación había publicado el caso de Gloria Arrúa, quien es una de las tantas víctimas de estos despidos injustificados en el Ministerio de Desarrollo Social. En su caso, también la cuestión política partidaria fue el motivo de su descontratación del programa Tekoporâ.