Centro Arambé y Hippy Paraguay iniciaron proyecto Luque Juega
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En la tarde de ayer, el Centro Educativo Arambé junto a Hippy Paraguay celebraron el Día del Niño en la plaza Guyra Campana de la ciudad de Luque. Este día del niño fue especial, ya que la celebración no fue solo para los alumnos o miembros de estas instituciones, sino que para toda la comunidad donde dieron inicio al proyecto Luque Juega, que busca mejorar los lugares de esparcimiento.
Según lo manifestado por Laura Duarte, directora de Hippy Paraguay, este evento fue para reunir a todos los niños y niñas que se encuentran en los alrededores de la plaza para que tengan un encuentro muy especial con la infancia. “Junto con Arambé preparamos una celebración para la infancia que da inicio al proyecto Luque Juega, pero más adelante tenemos la ilusión de pintar las plazas, plantar árboles y muchos otros proyectos que permitan que los espacios comunes se vuelvan más habitables”, dijo en entrevista con La Nación/Nación Media.
Aseguró que este encuentro fue solo el inicio de muchas más acciones que buscan desarrollar en la hermosa comunidad de Luque. “Nos unimos como parte de la Fundación Ramón T. Cartes para celebrar la infancia en una plaza cercana a Arambé. Los invitados fueron nuestros niños de ambos proyectos y también hicimos abierta a la comunidad”, resaltó.
OPORTUNIDAD PARA INTERACTUAR
Cabe destacar que este proyecto busca revalorizar el rol que cumplen los espacios abiertos de la comunidad como un maestro más en el aprendizaje de los niños. “Tiene como protagonista a la calle como escenario de exploración, vinculación y aprendizaje de los niños con sus padres y otros pares. Queremos brindarles oportunidades para interactuar e intervenir de manera segura en el entorno inmediato que le rodea, su comunidad”, dijo Duarte.
Agregó que la idea es ofrecer actividades lúdicas pedagógicas con juegos tradicionales como el descanso, la cuerda, la goma y exploración con experimentos científicos con burbujas, volcanes, mezcla de colores. Así también, buscan incentivar la lectura de cuentos con títeres, manualidades, espacios de cocina, educación física, entre otros.
“Queremos que este proyecto sea el puntapié para que en un futuro cercano las familias puedan salir a jugar a las plazas, las calles y parques, con la tranquilidad de saber que ellas fueron parte y protagonistas de ese cambio. Hippy y Arambé celebran la infancia con esta actividad”, puntualizó la profesional muy esperanzada con este proyecto tan importante.
Durante la jornada se contó con la presencia de unos 1.000 niños y niñas de entre 2 y 9 años, quienes disfrutaron de diferentes actividades, todas pedagógicas donde trabajaron áreas de alfabetización, motricidad fina, gruesa, ciencias y matemáticas. También jugaron con globo loco, pasaron por las caritas pintadas, peluquería, arte, sorteos y varias sorpresas.
Hippy Paraguay: 25 niños se graduaron y formaron vínculos significativos con sus padres
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Este martes, se graduaron niños y niñas del programa Hippy Paraguay que con amor y paciencia de sus padres llegaron satisfactoriamente a la meta que se propusieron hace dos años. Se trata de 25 chicos que accedieron al programa gracias a empresas que apostaron para que los hijos de sus colaboradores formen parte de Hippy.
Según Laura Duarte, directora del programa Hippy Paraguay, hasta la fecha unas 600 familias formaron parte de este proyecto que ayudó a que los padres y madres formen a sus hijos en la primera infancia desde sus casas. De este número de familias más del 90 % aseguran que han dedicado tiempo de calidad a sus hijos en esta etapa tan importante de sus vidas.
“Las familias que forman parte del programa han indicado que mejoraron sus relacionamientos parentales después de dos años del programa. El 80 % nos cuentan que están leyendo libros con sus hijos, saber que tantas familias están priorizando la lectura diaria es un gran logro y la gran bandera que estamos llevando con Hippy Paraguay”, expresó Duarte en entrevista con La Nación/Nación Media.
Confirmó que los 25 egresados se formaron gracias a las empresas Comercial el Cacique, Kemsa y Aero Centro SA, que apostaron a favor de la educación de los hijos de sus colaboradores. “En el contexto de responsabilidad social empresarial las empresas adquirieron el paquete de Hippy para sus colaboradores. De esta forma activaron la motivación en los trabajadores y aseguraron que los hijos de estos trabajadores van a tener más chances de llegar a la educación formal con más preparación”, refirió.
Laura indicó que con este programa buscan que la educación de los niños y niñas no solo recaiga en manos de las instituciones educativas o las tecnologías, sino que haya el acompañamiento de los padres. “Hippy está para dar las herramientas a los padres y de esa manera puedan acompañar realmente a sus hijos y les regalen tiempo de calidad para su desarrollo”, apuntó.
Resaltó que la primera infancia es muy importante y que los padres estén presentes deja un aprendizaje significativo muy importante en ellos. “El mayor regalo para los hijos es el acompañamiento de los padres en la primera infancia. No hay aprendizaje más significativo que el que viene de papá y mamá, porque pasan por el corazón”, puntualizó.
Insto a más sectores de la sociedad a apostar por la primera infancia para formar a aquellas personas que será lideres el día de mañana. Apuntó que una estimulación oportuna en esta ventana de tiempo podrá cambiar el futuro de los chicos y darles mayores oportunidades de desarrollar su mayor potencial. También, enfatizó sobre la importancia de tener suficientes horas de sueño y una buena nutrición como elementos fundamentales para el desarrollo del cerebro de los niños. “Toda acción por y para la primera infancia es una inversión para el futuro del país”, concluyó.
Hippy está presente en Luque, Cambyretâ, Paraguarí y Chaco. Foto: Emilio Bazán
Sobre Hippy Paraguay
Duarte recordó que el programa Hippy está presente en varios países del mundo y que hace tres años se instaló en Paraguay. Este programa educativo internacional consiste en visitas domiciliarias, donde tutores comunitarios trabajan con los padres para que ellos impartan la educación en el hogar; en cinco áreas del desarrollo: el lenguaje, alfabetización, matemáticas, ciencias y motricidad. “Los padres deben tener tiempo de una hora por semana para ser instruidos y 25 minutos por día para impartir las clases”, apuntó.
Confirmó que el mayor número de chicos y padres que forman parte de Hippy está en la ciudad de Luque, pero que también están presentes en Cambyretâ, Paraguarí y Chaco. “En cada ciudad hay alrededor de 30 familias, en Luque tenemos un volumen más grande porque tenemos el primer proyecto de la Fundación Ramón T Cartes es el colegio Arambé. Institución por la cual ya han pasado más de 300 niños y con Hippy estamos cubriendo todos aquellos niños que corresponden a la franja de 2 a 5 años”, manifestó.
El programa internacional que apuesta por la educación en una etapa tan importante como lo es la primera infancia tuvo este miércoles su acto de graduación de la primera promoción. Foto: Jorge Romero.
Primera promoción Hippy Paraguay: 300 niños se graduaron tras formar vínculos con sus padres
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Sin lugar a dudas, con amor, paciencia, empatía y compasión, se puede llegar muy lejos sobre todo cuando se trata de niños y niñas. Es lo que el programa Hippy Paraguay demostró en los últimos años, transformando vidas a lo largo del país y que este miércoles tuvo su acto de graduación de la primera promoción. El sistema educativo abarca desde los 2 hasta los 5 años, y participan 300 familias, con 29 tutoras en 5 localidades: Luque, Lambaré, Paraguarí, Cambyretá y Chaco.
La directora general de Hippy, Laura Duarte, explicó a La Nación/Nación Media que los niños del Chaco y los del jardín del Centro Educativo Arambé formaron parte de un proyecto piloto en el 2020, cuando probaron con 30 familias para ver si el programa iba a tener el impacto que tiene internacionalmente.
“Realmente fue una cosa que nos impresionó, que no nos esperábamos. Sabíamos que las familias en Paraguay quieren lo mejor para sus hijos pero muchos, si no la mayoría, no tienen los recursos. Sabíamos y partimos con esa premisa pero el compromiso que nosotros vimos ya con esas 30 familias es algo que nunca nos vamos a olvidar”, expresó Duarte.
Manifestó que a partir de esa experiencia hacen una gran apuesta al pasar de 30 a 300 niños, mencionando además la cantidad de gente que ya está en lista de espera a lo largo del país. “Estamos en las 5 localidades y queremos crecer en estas 5 para luego ganar más expertise y poder abarcar muchas más ciudades”, resaltó.
Laura Duarte, directora general de Hippy Paraguay con uno de los pequeños graduados de esta primera promoción. Foto: Jorge Romero.
“No olvidemos darle infancia a la niñez”
Duarte enfatizó en lo que la experiencia significó para padres y madres, resaltando que mejora el vínculo con el hijo, con la familia, compartiendo más tiempo juntos. “Ese siempre fue el objetivo: devolverle a las familias paraguayas su rol. Que la educación empieza en casa y luego viene la escuela. Es un día para celebrar la infancia, la familia y un día para celebrar a la educación”, afirmó.
“Niñez es un tiempo en la vida del niño e infancia son aquellos momentos, experiencias que marcan el transitar de ese tiempo. No olvidemos darle infancia a la niñez. No olvidemos ser aquel adulto que hubiéramos querido tener cuando éramos niños y sobre todo que una mirada de amor, puede transformar una vida”, destacó la directora general del programa.
Agradecieron a la familia Cartes por seguir apostando por la educación y por dar oportunidad en esta etapa tan crucial que es la primera infancia. Foto: Jorge Romero.
Lo que se viene en el 2023
En otro momento señaló que lo que fueron estos 3 años y lo que se proyectan es algo que no tiene límites. “Hippy está en 15 países alrededor del mundo hace más de 52 años y este es uno de los programas en casa a través de los padres, que tiene más evidencia científica y ha cerrado brechas de aprendizaje y desigualdad en países de primer mundo. Imaginarnos que esto que se hace en Australia, Nueva Zelanda, Finlandia que es modelo en educación, se está haciendo en Paraguay, realmente nos llena de orgullo”, subrayó Duarte.
Adelantó que el año que viene van a mantener las localidades en las que están con el mismo número de niños, buscando de alguna manera seguir creciendo y dejar capacidad instalada en esas localidades que ya están.
Los padres destacaron la grata experiencia que significó para ellos ser parte del programa Hippy Paraguay porque les acercó a sus hijos, creando vínculos amorosos. Foto: Jorge Romero.
“Hay muchas sorpresas, estamos trabajando con un material inclusivo, tenemos niños que tienen diferentes tipos de discapacidad. Continuamos formando a padres, niños y continuamos dando oportunidades a tantas mamás porque las tutoras que llevan son mamás de las comunidades donde estamos y son en su mayoría, mujeres que no han tenido la oportunidad ellas mismas de culminar sus propios estudios”, describió.
“De otra manera, no iban a poder tener un trabajo formal como es Hippy, nosotros apostamos a la palabra oportunidad en la Fundación Ramón T. Cartes y esta es una oportunidad enorme para estas mamás. Muchas de ellas terminaron la escuela y tienen planes de tener un estudio universitario. Hippy cumple su objetivo de trabajar para la comunidad y con ella, un modelo infalible que nos va a llevar muy lejos como sociedad y como país”, aseguró la educadora.
Así también, durante el acto de graduación agradecieron al expresidente de la República Horacio Cartes por seguir apostando por la educación y por dar oportunidad en esta etapa tan crucial que es la primera infancia.
Martín Silva Franco, en representación de los padres, aprovechó la ocasión para agradecer por este programa de estimulación temprana para los chicos de primera infancia. “Yo creé con mi hijo un vínculo amoroso, fraternal y de gran amor con él haciendo las tareas, los juegos y me emocionó eso, le voy a extrañar ya después de esto. Es un vínculo que jamás se va a romper y quedará en el corazón de los chiquititos”, expresó el padre.
Natalia Romero, coordinadora de Cambyretá contó que ellos trabajaron con 34 familias en su localidad. Foto: Jorge Romero.
Experiencia en Cambyretá
Por su parte, Natalia Romero, coordinadora de Cambyretá, en el departamento de Itapúa, comentó a La Nación/Nación Media que en su localidad trabajaron con 34 familias. “Los padres super contentos porque crearon vínculos impresionantes entre ellos y que no sabían que podían tener. Algunos niños ya fueron al jardín este año, saben los colores primarios, las figuras geométricas, incluso ya saben escribir sus nombres”, refirió.
Romero manifestó que tiene a su cargo 3 tutoras que son también madres de familias y explicó que son 5 días a la semana que se implementa el programa. “De lunes a viernes estamos o si algunas familias pueden fin de semana nos adecuados a sus tiempos. Cada entrenamiento dura alrededor de 25 minutos, tiempo compartido entre padres e hijos y en el 2023 empezamos con nuevas familias”, puntualizó.
Cambyretá es una de las 5 localidades donde se desarrolló el programa Hippy Paraguay y donde trabajaron con 34 familias. Foto: Gentileza.
Cabe destacar que este proyecto busca revalorizar el rol que cumplen los espacios abiertos de la comunidad como un maestro más en el aprendizaje de los niños. Foto: Roberto Zarza.
Arambé y Hippy Paraguay dieron inicio al proyecto “Luque juega”
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El Centro Educativo Arambé junto a Hippy Paraguay celebraron el Día del Niño en la plaza Guyrá Campana de la ciudad del Luque, este sábado pasado. Este día del niño fue especial ya que la celebración no fue solo para los alumnos o miembros de estas instituciones si no que para toda la comunidad donde dieron inicio al proyecto “Luque juega” que busca mejorar los lugares de esparcimiento.
Según lo manifestado por Laura Duarte, directora de Hippy Paraguay, este evento fue para reunir a todos los niños y niñas que se encuentra en los alrededores de la plaza, para que tengan un encuentro muy especial con la infancia. “Junto con Arambé preparamos una celebración para la infancia que da inicio al proyecto Luque Juega, pero más adelante tenemos la ilusión de pintar las plazas, plantar árboles y muchos otros proyectos que permitan que los espacios comunes se vuelvan más habitables”, dijo en entrevista con La Nación-Nación Media.
Aseguró que este encuentro fue solo el inicio de muchas más acciones que buscan desarrollar en la hermosa comunidad de Luque. “Nos unimos como parte de la Fundación Ramón T. Cartes para celebrar la infancia en una plaza cercana a Arambé. Los invitados fueron nuestros niños de ambos proyectos y también hicimos abierta a la comunidad”, resaltó.
El multitudinario festejo se realizó en plaza de Luque, donde se encuentra el Centro Educativo Arambé. Foto: Roberto Zarza.
Oportunidad para interactuar
Cabe destacar que este proyecto busca revalorizar el rol que cumplen los espacios abiertos de la comunidad como un maestro más en el aprendizaje de los niños. “Tiene como protagonista a la calle como escenario de exploración, vinculación y aprendizaje de los niños con sus padres y otros pares. Queremos brindarles oportunidades para interactuar e intervenir, de manera segura en el entorno inmediato que le rodea, su comunidad”, dijo Duarte.
Agregó que la idea es ofrecer actividades lúdicas pedagógicas con juegos tradicionales como el descanso, la cuerda, la goma y exploración con experimentos científicos con burbujas, volcanes, mezcla de colores. Así también, buscan incentivar la lectura de cuentos con títeres, manualidades, espacios de cocina, educación física, entre otros.
Pequeños de diversas edades disfrutaron de las atracciones en una jornada de juevos y aprendizaje. Foto: Roberto Zarza.
“Queremos que este proyecto sea el puntapié para que en un futuro cercano las familias puedan salir a jugar a las plazas, las calles y parques, con la tranquilidad de saber que ellas fueron parte y protagonistas de ese cambio. Hippy y Arambé celebran la infancia con esta actividad”, puntualizó la profesional muy esperanzada con este proyecto tan importante.
Durante la jornada se contó con la presencia de unos 1.000 niños y niñas de entre 2 y 9 años, quienes disfrutaron de diferentes actividades, todas pedagógicas, donde trabajaron áreas de alfabetización, motricidad fina, gruesa, ciencias y matemáticas. También, jugaron con globo loco, pasaron por las caritas pintadas, peluquería, arte, sorteos y varias sorpresas.
El origami y la pintura fueron algunos de los atractivos que disfrutaron los niños, este sábado último. Foto: Roberto Zarza.