En las imágenes de circuito cerrado se puede observar cómo los malvivientes se ingenian para ingresar por la parte trasera de la institución. Foto: Gentileza
Por cuarta vez, presuntos adictos roban la misma escuela de Capiatá
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El colegio y escuela Jorge Rojas Ramírez, ubicado en la localidad de posta Ybykua de la ciudad de Capiatá, fue blanco de malvivientes por cuarta vez. Los malhechores se llevan todo lo que encuentran a su paso y los padres y maestros deben de reponer constantemente lo robado.
Los directores de la institución lamentan la situación por la que atraviesa la comunidad educativa, ya que los asaltantes se han alzado con ventiladores, tomacorrientes, focos, acondicionadores de aire, incluso las llaves de encendido de los equipos.
En las imágenes de circuito cerrado se puede observar cómo los malvivientes se ingenian para ingresar por la parte trasera de la institución y recorren la misma, buscando qué objetos de valor se pueden llevar para posteriormente venderlos o cambiarlos por droga.
“Es una pena que tengamos que pasar por esto, aquí acuden 950 alumnos de diferentes asentamientos de la zona, y debido a la cantidad de alumnos que albergamos siempre tratamos de que cuenten con todas las comodidades y vienen estas personas que son adictas y se llevan todo el esfuerzo de la comunidad en cuestión de minutos y no es la primera vez”, indicó el director Alcides González en conversación con el canal de noticias NPY.
Por su parte, la directora Griselda Jara destacó que la situación se ha vuelto insostenible, en especial a la hora de reponer los objetos robados, ya que los alumnos no pueden quedar a oscuras por la falta de focos o pasar calor por no contar con ventiladores. Hasta el momento no se ha logrado reconocer a los autores del robo, puesto que en las imágenes no se los logra distinguir.
El asesino de la videollamada: a 4 años del horror en Capiatá
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Eran las 2:00 de la madrugada de aquel 3 de julio del año 2020, cuando nuestro país amaneció con la terrible noticia de una verdadera masacre registrada en el barrio San Miguel de la ciudad de Capiatá por el agente policial Isidro Casco, quien asesinó, sin piedad, a cinco miembros de su familia y luego se suicidó.
El tremendo suceso fue tan impactante que no solo conmocionó al país. Medios internacionales se hicieron eco debido a que el homicida realizó una videollamada mostrando a su esposa cómo mataba a sus hijos. Ella estaba viviendo en Málaga, España, y había migrado al viejo continente para ofrecer una mejor vida a su familia.
Aquella trágica madrugada, Casco llegó a la vivienda realizando primeramente una videollamada a su madre, quien estaba residiendo en España junto a su pareja Beatriz Romero. Durante la comunicación relató a ambas mujeres el crimen que iba a cometer, e incluso, llegó a transmitir en vivo parte del asesinato, mientras les pedía que vuelvan al país, ya que las dos estaban trabajando en ese momento en España y no podían volver por la pandemia del covid-19.
El tremendo suceso fue tan impactante que no solo conmocionó al país, sino a nivel internacional. Foto: Archivo
Fueron víctimas de aquel trágico hecho Alberto de la Cruz Riveros Benítez y Amalia Beatriz Portillo Caballero, padres de Beatriz. También falleció Liliana Mariel Gómez Caballero, cuñada de Beatriz, y dos niños, de tan solo 1 y 2 años de edad. Otras dos personas quedaron heridas.
Poco antes de cometer el crimen, Isidro Casco se comunicó al 911 a fin de solicitar asistencia policial, pues supuestamente una persona quería ingresar a su casa para robar, refiriéndose a otra vivienda. Algunos cuerpos tenían hasta 6 disparos de arma de fuego.
VIOLENCIA FAMILIAR
La comisaria María Elena Andrada, entonces jefa de Relaciones Públicas de la Policía Nacional, había manifestado que el agente policial tenía una denuncia por violencia familiar, realizada por su anterior pareja en el 2017. El hombre además contaba con serios problemas de adicción al alcohol y las drogas, según sus familiares.
La Fiscalía investigó el hecho y el juez a cargo del caso dispuso apenas una multa contra el uniformado, que realizó donación para luego seguir ejerciendo sus funciones como policía hasta la madrugada del 3 de julio de 2020, fecha que mató a 5 personas y se quitó la vida.
“ENTRÓ DIRECTAMENTE A MATAR”
Isabel Caballero, sobreviviente del trágico suceso, narró de qué forma el agente policial ingresó a la casa, donde estaban sus hijos y exsuegros para acabar con sus vidas. Ella es la prima de la expareja del uniformado, y comentó en su momento a los medios que estaba dentro de la casa cuando Casco pateó la puerta e ingresó a matar a quemarropa a sus hijos y exsuegros. “Entró primero a la habitación de sus suegros y después a la de sus hijos. Uno de sus hijos, un bebé, estaba con nosotros en la pieza. Él quería asesinar solo a sus hijos. Cuando mi hija salió corriendo con el bebé en brazos, vino y le disparó a la criatura en la cabeza. Gracias a Dios no le disparó también a mi hija”, fue el escalofriante relato de Isabel.
Sostuvo que el suboficial no dijo palabra alguna durante el crimen. “Por la forma en que lo vimos, estaba drogado. Estaba muy nervioso, se alteraba y consumía drogas. Siempre decía que nosotros nos sentábamos a hablar de él”, agregó.
EXCELENTE PERSONAL
El entonces subjefe de la Comisaría 21.ª, Mboi’y, Itauguá, Jorge Villalba, señaló que el uniformado Isidro Casco era un buen profesional y no tuvo problemas con nadie durante los cinco meses de servicio que estuvo en esa dependencia. “En su tiempo de trabajo, con nosotros, al menos, fue un excelente personal”, había dicho. Sostuvo el jefe policial que él, como subjefe de la comisaría, y los demás superiores del uniformado, nunca tuvieron conocimiento del problema de Casco con las drogas y el alcohol, como manifestaron algunos allegados.
Piratas del asfalto asaltaron a camioneros que iban a comprar ganado en Pirapó
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Este martes se reportó un asalto en la localidad de Pirapó, en el departamento de Itapúa, donde se vieron involucrados piratas del asfalto que interceptaron a un camión cuyos ocupantes iban a comprar ganado. Los delincuentes tenían la cara descubierta y se desplazaban en un automóvil.
Según el reporte policial, el hecho se registró esta mañana sobre un camino vecinal a la altura del kilómetro 13, jurisdicción de la comisaría 76 de Pirapó. Mientras el camión de la marca Hyundai de color blanco, en el que iban dos personas fue interceptado por los malvivientes.
Las víctimas fueron identificadas como Jorge Alberto Acosta Gutman, de 38 años y Rubén Alcides Avinagalde García, de 31 años, quienes manifestaron que los delincuentes circulaban a bordo de un automóvil de la marca Chevrolet, con la cara descubierta y portaban armas de fuego.
“Se tuvo conocimiento del hecho a través de una llamada telefónica recepcionada en la comisaría, de inmediato personal policial acudieron al lugar donde dialogaron con el señor Jorge Acosta, que resultó ser víctima del robo agravado”, explicó el comisario César Bareiro, que intervino en el lugar.
Resaltó que el camión iba con destino a una agroganadera para compra de animales y unos cinco kilómetros antes de llegar al sitio fueron alcanzados por los asaltantes. “Los sujetos con arma de fuego en mano los intimidaron y los despojaron del dinero en efectivo”, aseguró.
Confirmó que tras cometer el atraco los hombres subieron al rodado y se dieron a la fuga. Hasta el momento no lograron dar con estas personas, pese a que realizaron rastrillaje por la zona. El caso fue comunicado al Ministerio Público y al personal del departamento de Investigaciones.
Adictos mantienen en zozobra a estudiantes y docentes de una escuela en el Bañado Sur
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Tanto alumnos como docentes de la escuela Clara Irma Piacentini ubicada en el Bañado Sur de la ciudad de Asunción son blanco constante de asaltos por parte de adictos que acechan la institución y que últimamente incluso ingresan a la misma para robar todo lo que encuentran a su paso.
Las autoridades de la institución aseguraron que en las últimas semanas la situación se ha vuelto insostenible y que hasta los conductores de plataformas o quienes se encargan de entregar los deliverys ya no quieren llegar hasta la institución por temor a ser asaltados por los adictos que se reúnen alrededor de la escuela.
“Antes era solo a la salida, ahora los adictos asaltan a todas horas, a la entrada, a la salida y al mediodía más porque no está nadie, ayer le asaltaron a una docente cuando salía de su turno a las 15:00, es insostenible, antes al menos esperaban para entrar a la institución de noche, ahora de día entran en grupos cuando el portón queda abierto y recorren y miran qué pueden levar”, indicó la titular de la institución Aida Aranda, en conversación con Telefuturo.
La misma destacó que ya solicitó a la comisaria jurisdiccional a través de una nota el refuerzo de la seguridad en el área de la institución educativa, pero que hasta el momento no se ha visto una mejoría en la situación a pesar de que en algunos horarios se puede ver a los policías en las inmediaciones del lugar.
La docente remarcó que para resguardar la seguridad tanto de los docentes como de los alumnos lo ideal sería que cuenten con agentes que estén en los portones de la institución de manera permanente para evitar también que los adictos ingresen a la institución y así evitar que quienes lleguen hasta la casa de estudios se expongan a cualquier hecho delictivo.
Los adictos inclusive ingresan hasta la institución educativa. Foto: Gentileza
Concepcioneros trabajan en proyecto popular para iluminar la ciudad
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Un grupo de pobladores de Concepción elaboraron un proyecto popular con el cual buscan lograr mayor iluminación de la ciudad, en especial en ciertos puntos que actualmente son considerados como críticos por el aumento de la inseguridad. El objetivo de esta iniciativa es dotar de al menos 100 nuevas luminarias a la localidad y así alumbrar ciertos lugares.
“Hay muchas buenas iniciativas ciudadanas, pero necesitamos también el apoyo de la gente, ahora estamos juntando firmas, requerimos de al menos 1.000 para que ingrese el proyecto como pedido popular. Lo que buscamos es que la ciudad se vuelva más segura y que las familias no teman al salir de sus casas”, comentó Carlos Magno Ferreira, uno de los proyectistas en conversación con el corresponsal de Nación Media, Ángel Flecha.
Destacó que como parte del proyecto ya realizaron un mapeo de algunas zonas que son prioridad a la hora de colocar estas luminarias, como por ejemplo el barrio San Antonio, San Carlos y la zona del paseo universitario de Concepción.
En cuanto a los hechos delictivos, remarcó que con la mejor iluminación estos podrían disminuir e inclusive podría ayudar a los efectivos policiales a la rápida detención de los malvivientes, ya que no contarían con zonas oscuras en donde resguardarse tras la fuga y se podría inclusive recuperar los objetos robados que en su mayoría son las motocicletas de otros ciudadanos.