Ciudad del Este. Agencia Regional.
En un juicio oral y público que concluyó hoy martes, un ciudadano brasileño fue condenado a la pena de 30 años de prisión por feminicidio. El sentenciado es el brasileño Osvaldo Querino Dalpra, quien mató a su esposa con cinco puñaladas. Es lo que consideró demostrado en juicio el tribunal presidido por Milciades Ovelar e integrado por Flavia Lorena Recalde y Emilia Santos.
La representación fiscal estuvo a cargo de María del Carmen Meza, de Iruña. De acuerdo a lo deliberado en el juicio, el hombre alteró la escena del crimen con la intención de hacer creer a los investigadores que se trató de un crimen con fines de robo. El juicio oral concluyó este martes 31 de octubre en el Poder Judicial de Ciudad del Este.
El caso se inició en la madrugada del 27 de octubre de 2021, en el interior de una vivienda ubicada en el barrio Santa Catalina del distrito de Naranjal. Resultó víctima fatal Cristina Deckmann de Dalpra. En aquella oportunidad, Osvaldo Dalpra llegó a la casa, alzó en sus brazos al hijo menor de 9 años, quien se encontraba durmiendo con su madre en la habitación matrimonial, y lo trasladó a su pieza, cerrando la puerta con llave.
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Volvió a la habitación y mantuvo una discusión con su esposa que derivó en agresión hasta que el hombre tapó el rostro de la mujer con un almohadón y le aplicó 5 puñaladas, que acabaron con su vida casi en el acto.
Alteración de la escena
Tras consumar el asesinato, el hombre generó un desorden en la casa, arrojando ropas y otros objetos en el suelo. También violentó por dentro la puerta de acceso de blindex, que permite el ingreso a la despensa y a la vivienda, para luego apoderarse de dos teléfonos celulares que usaban su esposa y su hijo menor.
De esa manera, el acusado alteró la escena del crimen con el propósito de darle apariencia de un hecho de robo. Tras consumar el brutal asesinato, Dalpra abordó su camioneta Toyota Regius, color plateado, con matrícula HCE 661, y se dirigió hasta la colonia Jerusalén II, donde pasó la noche en un hotel con una adolescente de 16 años.
Osvaldo Querino Delpra, primero prestó declaración en calidad de testigo en la causa, ya que nadie dudaba de su versión inicial. Sin embargo, en el avance de la investigación, los agentes policiales pudieron encontrar evidencias sobre su autoría en el asesinato, por lo que fue imputado en su momento por la fiscal María del Carmen Meza y ahora, condenado a 30 años de pena privativa de libertad.