El Dr. Carlos Morínigo, director del Policlínico de la Municipalidad de Asunción, denunció los nuevos perjuicios que sufrirán los asegurados del Instituto de Previsión Social (IPS) con una resolución elaborada por la Gerencia de Salud de la previsional. La mencionada disposición establece que existan hasta 4 niveles protocolares para que los aportantes de la institución cuenten con sus medicaciones.
“Antes se contaba con un solo médico designado por cada institución para que cargue los protocolos a establecerse para los pacientes crónicos del IPS que consumen por ejemplo alprazolan, atorvastatina, entre otros. Sin embargo, ahora cada especialista debe emitir el protocolo para su paciente; es decir, ahora el clínico de control no podrá facilitar al paciente crónico sus medicamentos porque cada uno debe pasar por la aprobación correspondiente de cada médico”, explicó el Dr. Morínigo para La Nación/Nación Media.
Así, antes de contar con la provisión mensual de sus respectivos fármacos, cada asegurado debe consultar primeramente con un cardiólogo, un diabetólogo o médicos de diversas especialidades, dependiendo del medicamento que necesite; esto cuando anteriormente podía acceder sin ningún protocolo innecesario a sus dosis habituales. De acuerdo al director del policlínico, el problema recae a la hora de acceder a los turnos con cada especialista, teniendo en cuenta que esos agendamientos resultan tortuosos en la previsional por el pésimo nivel de atención.
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“Esto pone palos en la rueda para los asegurados y la atención se vuelve más compleja. No sé si esto están realizando como una táctica, teniendo en cuenta las denuncias de faltantes de medicamentos que se viene registrando o porque quieren racionalizar los fármacos, pero la idea es totalmente descabellada y decidida de manera unilateral”, destacó el Dr. Morínigo, manifestando que ni siquiera se realizaron las consultas pertinentes con los médicos clínicos para elaborar una determinación así.
Así también, sentenció que los principales perjudicados con la nueva medida adoptada por la previsional son los pacientes de tercera edad, quienes ahora deben verse en la obligación de recorrer hospitales para conseguir los medicamentos necesarios para continuar con el tratamiento de sus enfermedades crónicas.
“No puede ser que los asegurados deban llorar por sus medicamentos. Quienes se encuentran a cargo del IPS se manejan bajo la absoluta inoperancia y no tienen la más pálida idea de lo que necesita el asegurado, la constante carencia con la cual se manejan o incluso el día a día que debe sortear un médico clínico durante este tipo de situaciones”, puntualizó el especialista.
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