Los familiares de Peter Reimer iniciaron este lunes la entrega de víveres a los pobladores del barrio Ricardo Brugada de Asunción, más conocido como la Chacarita, en el marco de las exigencias del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) para la liberación del secuestrado.
El padre de Peter Reimer, David Reimer, explicó que este lunes culmina la entrega de los alimentos y espera que posteriormente se dé la liberación del joven privado de libertad en la zona norte del país, nuevamente por los grupos criminales.
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“Una vez que termine la entrega, vamos a convocar a una conferencia. Falta mucho todavía, pero hoy vamos a completar todo. Falta completar a una comunidad indígena de San Pedro”, explicó el padre de la víctima en comunicación con la radio 1020 AM.
Dos camiones llegaron a tempranas horas de este lunes hasta el barrio Ricardo Brugada de Asunción repletos de kits de alimentos para los pobladores. En principio, una cantidad importante de pobladores rechazó los víveres, pero con la llegada de los colonos menonitas numerosas personas se acercaron a recibir.
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“La idea es completar todo hoy la entrega de los víveres. Falta ayudar más, falta que pongan más locales abiertos para que podamos cumplir con el pago. Los que quieren, pueden ayudarnos para cumplir con las exigencias y esperamos que la gente nos siga ayudando”, agregó el padre de la víctima.
El joven Peter Reimer fue secuestrado en la estancia Guyra Campana, ubicada entre las ciudades de Santa Rosa del Aguaray y Tacuatí, en el departamento de San Pedro. Los secuestradores exigen la entrega de víveres por US$ 500 mil a 20 comunidades para su liberación, especialmente de los departamentos de Amambay, San Pedro, Canindeyú y el barrio Ricardo Brugada de Asunción.
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Edelio Morínigo, una década sin respuestas
Por Sara Valenzuela, sara.valenzuela@nacionmedia.com
El 5 de julio del 2014, el joven suboficial de la Policía Nacional Edelio Morínigo salió de su hogar, para lo que él pensó que sería una tarde tranquila de cacería con sus amigos, dentro de la estancia Macchi Cue, en la localidad de Arroyito, departamento de Concepción. Nadie imaginó que, quizás, haya sido la última vez que lo hayan visto de cerca sus familiares y amigos, pues desde ese momento su familia no lo pudo volver a abrazar.
Esa tarde tanto él como sus amigos fueron emboscados por el grupo armado autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), y si bien horas más tarde sus amigos fueron liberados, Edelio fue la moneda de cambio ideal en aquel momento para que los criminales intentaran presionar al Estado para la liberación de algunos de sus miembros que estaban presos.
“La última vez que yo le vi a mi hijo fue el 4 de julio del 2014, cuando él estaba construyendo su casa. Trabajó todo el día ahí. Me acuerdo de que me dijo, ‘mamá, yo voy a venir mañana a comer contigo’, y yo le dije: ‘bueno mi hijo, te voy a esperar’. Al día siguiente, él no regresó y surgió lo de la cacería. Luego ya no supe nada de él”, recordó doña Obdulia Florenciano, madre de Edelio Morínigo, en conversación exclusiva con La Nación/Nación Media.
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Este hecho marcó no solo al distrito de Arroyito, ubicado a 80 km de la ciudad de Concepción, sino a todo el país. Si bien son escasos los datos que se tienen con relación al paradero de Edelio, en su familia sigue reservado un lugar en la mesa y cada año se conmemora su cumpleaños. La esperanza de encontrarlo sigue tan viva como el primer día del hecho, pese a que han pasado ya 10 años.
Tras diez años de espera, la voz de esta madre está marcada por el dolor de no saber nada de su hijo, y de no poder obtener respuestas por parte de sus cobardes secuestradores. Recordando el día en le dieron la trágica noticia del secuestro, aseguró que desde ese momento supo que sus captores no lo liberarían por el hecho de ser un policía, pues representaba todo lo que estos criminales odiaban.
“En el momento en que me dijeron que mi hijo fue agarrado por ese grupo, yo me puse muy mal. Supuestamente, los del EPP le dijeron a los que estaban con mi hijo que le iban a soltar otra vez, pero yo sabía que era mentira, que eso nunca jamás iba a pasar, porque los policías y militares son contrarios de ellos. Yo nunca les creí”, indicó tajantemente doña Obdulia.
El 22 de octubre, los miembros del EPP entregaron un video como prueba de vida, donde se observaba a Edelio y a Arlan Fick, quien en ese momento también estaba secuestrado. En el material, el oficial de policía se dirigía a su familia y aseguraba estar a salvo y negó que estuviera siendo torturado. Luego de la entrega de este mensaje, Arlan fue liberado el 25 de diciembre de 2014, pero Edelio siguió en cautiverio, siendo la última imagen registrada de él.
Búsqueda sin descanso
Paralelamente a las investigaciones oficiales, la familia de Edelio, principalmente su madre, la señora Obdulia, emprendió una investigación propia, a través de la cual recibió todo tipo de informaciones respecto al posible paradero del joven.
Algunas, inclusive, llevaron a la búsqueda de los restos del joven oficial del policía, dentro de un establecimiento ganadero ubicado a unos 15 kilómetros de donde se había producido el secuestro, pero a pesar de las excavaciones y los días de rastrillaje, no se encontraron rastros de él.
Al cumplirse 10 años del secuestro de su hijo doña Obdulia, ella solo puede analizar las innumerables pérdidas que ha sufrido en este lapso de tiempo, ya que no solo ha llorado por la desaparición forzosa de un hijo, sino que con el paso de los años ha visto desgastarse la salud física y emocional de su esposo y la de los demás integrantes de su familia, que debieron de lidiar cada uno como pudo con la desaparición de un ser tan querido como lo es Edelio.
“Yo llevo 10 años de lucha,10 años sin descansar, yo sigo presionado a las autoridades para que me puedan dar noticias de mi hijo. Las mamás somos así, no sabemos en qué situaciones vamos a estar, pero sabemos que vamos a luchar por nuestros hijos hasta el final. Es cierto que nunca una está preparada para este tipo de situación”, finalizó doña Obdulia.
Búsqueda sin cesar
Como el gobierno nunca cedió ante los chantajes del grupo criminal, con el tiempo las comunicaciones fueron desapareciendo, pero el trabajo de las autoridades en busca de quienes se encuentran en cautiverio en manos del EPP continúa. No solo con objetivo liberarlos, sino que, de dar hasta con el último de los integrantes del grupo que tanto dolor han causado ya en nuestro país.
El comisario Nimio Cardozo, jefe del Departamento Policial de Antisecuestro, en conversión con La Nación/Nación Media, destacó que el trabajo investigativo en torno a los secuestros vigentes y sostuvo que continúan sin parar, a pesar de que, por la tesitura de los mismos no se pueden dar a conocer muchos detalles. Sin embargo, aseguró que se mantienen activas las líneas de investigación constantemente, dando a su vez la seguridad a la ciudadanía de que las autoridades no se olvidan de las víctimas ni de sus familiares.
“Para nosotros es una de las prioridades la búsqueda y localización de Edelio, esté o no con vida. Además, todos los días estamos trabajando en el marco de los tres secuestros activos que tenemos actualmente, porque los demás ya fueron esclarecidos”, indicó el comisario Nimio Cardozo a La Nación.
Datos clave
- Edelio Morínigo fue secuestrado un 5 de julio del 2014.
- Salió a cazar con un grupo de amigos dentro de la estancia Macchi Cue, en la localidad de Arroyito, donde fue emboscado por el grupo EPP.
- La última vez que su madre lo vio fisicamente fue un 4 de julio del 2014 mientras edificaba su casa.
- Dos meses después de la desaparición de Edelio su madre recibió la confirmación del grupo criminal de que el joven policía se encontraba bajo el cautiverio del EPP.
- El 22 de octubre los miembros del EPP entregaron un video como prueba de vida donde se observaba a Edelio y a Arlan Fick.
- En el vídeo fue la última vez que se lo ve a Edelio con vida.
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Secuestro de Edelio Morínigo, toda una década sin respuestas
- Por Sara Valenzuela
- sara.valenzuela@nacionmedia.com
Un 5 de julio, pero de 2014, el joven suboficial de la Policía Nacional Edelio Morínigo salió de su hogar para lo que él pensó que sería una tarde tranquila de cacería con sus amigos, dentro de la estancia Macchi Cué, en la localidad de Arroyito, departamento de Concepción. Nadie imaginó que, quizás, haya sido la última vez que lo hayan visto de cerca sus familiares y amigos, pues desde ese momento su familia no lo pudo volver a abrazar.
Esa tarde, tanto él como sus amigos fueron emboscados por el grupo armado autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), y si bien horas más tarde sus amigos fueron liberados, Edelio fue la moneda de cambio ideal en aquel momento para que los criminales intentaran presionar al Estado para la liberación de algunos de sus miembros que estaban presos.
“La última vez que yo le vi a mi hijo fue el 4 de julio de 2014, cuando él estaba construyendo su casa. Trabajó todo el día ahí. Me acuerdo que me dijo, ‘mamá, yo voy a venir mañana a comer contigo’, y yo le dije: ‘Bueno mi hijo, te voy a esperar’. Al día siguiente él no regresó y surgió lo de la cacería. Luego ya no supe nada de él”, recordó doña Obdulia Florenciano, madre de Edelio Morínigo, en conversación exclusiva con La Nación/Nación Media.
Este hecho marcó no solo al distrito de Arroyito, ubicado a 80 km de la ciudad de Concepción, sino a todo el país. Si bien son escasos los datos que se tienen con relación al paradero de Edelio, en su familia sigue reservado un lugar en la mesa y cada año se conmemora su cumpleaños. La esperanza de encontrarlo sigue tan viva como el primer día del hecho, pese a que han pasado ya 10 años.
DOLOR DE NO SABER NADA
Tras diez años de espera, la voz de esta madre está marcada por el dolor de no saber nada de su hijo, y de no poder obtener respuestas por parte de sus cobardes secuestradores. Recordando el día en que le dieron la trágica noticia del secuestro, aseguró que desde ese momento supo que sus captores no lo liberarían por el hecho de ser un policía, pues representaba todo lo que estos criminales odiaban.
“En el momento en que me dijeron que mi hijo fue agarrado por ese grupo, yo me puse muy mal. Supuestamente, los del EPP le dijeron a los que estaban con mi hijo que le iban a soltar otra vez, pero yo sabía que era mentira, que eso nunca jamás iba a pasar, porque los policías y militares son contrarios de ellos. Yo nunca les creí”, indicó tajantemente doña Obdulia.
PRUEBA DE VIDA
El 22 de octubre los miembros del EPP entregaron un video como prueba de vida, donde se observaba a Edelio y a Arlan Fick, quien en ese momento también estaba secuestrado. En el material, el oficial de policía se dirigía a su familia y aseguraba estar a salvo y negó que estuviera siendo torturado. Luego de la entrega de este mensaje, Arlan fue liberado el 25 de diciembre de 2014, pero Edelio siguió en cautiverio, siendo la última imagen registrada de él.
BÚSQUEDA SIN DESCANSO
Paralelamente a las investigaciones oficiales, la familia de Edelio, principalmente su madre, la señora Obdulia, emprendió una investigación propia, a través de la cual recibió todo tipo de informaciones respecto al posible paradero del joven.
Algunas inclusive llevaron a la búsqueda de los restos del joven oficial de policía dentro de un establecimiento ganadero ubicado a unos 15 kilómetros de donde se había producido el secuestro, pero a pesar de las excavaciones y los días de rastrillaje no se encontraron rastros de él.
Al cumplirse 10 años del secuestro de su hijo, doña Obdulia solo puede analizar las innumerables pérdidas que ha sufrido en este lapso de tiempo, ya que no solo ha llorado por la desaparición forzosa de un hijo, sino que con el paso de los años ha visto desgastarse la salud física y emocional de su esposo y la de los demás integrantes de su familia, quienes debieron de lidiar cada uno como pudo con la desaparición de un ser tan querido como lo es Edelio.
“Yo llevo 10 años de lucha, 10 años sin descansar, yo sigo presionando a las autoridades para que me puedan dar noticias de mi hijo. Las mamás somos así, no sabemos en qué situaciones vamos a estar, pero sabemos que vamos a luchar por nuestros hijos hasta el final. Es cierto que nunca una está preparada para este tipo de situación”, finalizó doña Obdulia.
TRABAJOS CONTINÚAN
Como el Gobierno nunca cedió ante los chantajes del grupo criminal, con el tiempo las comunicaciones fueron desapareciendo, pero el trabajo de las autoridades en busca de quienes se encuentran en cautiverio en manos del EPP continúa. No solo con objetivo de liberarlos, sino que de dar hasta con el último de los integrantes del grupo que tanto dolor han causado ya en nuestro país.
El comisario Nimio Cardozo, jefe del Departamento Policial de Antisecuestro, en conversación con La Nación/Nación Media, destacó que el trabajo investigativo en torno a los secuestros vigentes y sostuvo que continúan sin parar, a pesar de que por la tesitura de los mismos no se pueden dar a conocer muchos detalles. Sin embargo, aseguró que se mantienen activas las líneas de investigación constantemente, dando a su vez la seguridad a la ciudadanía de que las autoridades no se olvidan de las víctimas ni de sus familiares.
“Para nosotros es una de las prioridades la búsqueda y localización de Edelio, esté o no con vida. Además, todos los días estamos trabajando en el marco de los tres secuestros activos que tenemos actualmente, porque los demás ya fueron esclarecidos”, indicó el comisario Nimio Cardozo a La Nación.
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Desembolsan más de G. 3.000 millones para familias de Tekoporã Mbarete
El Ministerio de Desarrollo Social (MDS) y el proyecto de Pobreza, Reforestación, Energía y Cambio Climático (Proeza) entregaron recursos para financiar emprendimientos productivos en Capiibary, departamento de San Pedro. En total se entregaron unos G. 3.000 millones este miércoles 3 de julio.
En total fueron desembolsados G. 2.424 millones, para financiar 606 emprendimientos, de los cuales, en Capiibary se entregaron G. 300 millones, destinados a 75 iniciativas productivas en el marco del programa Tenonderã. De igual manera, se concretó el pago de las transferencias monetarias condicionadas ambientales, en el marco del proyecto Proeza.
A través de “Plantando para el Futuro”, el proyecto llegó a 270 familias de Capiibary, lo cual implica una inyección económica de unos G. 300 millones en el distrito. Además del mencionado distrito, otras familias como Tacuati, Gral. Resquín, Santa Rosa del Aguaray y San Vicente Pancholo también recibirán el pago totalizando más G. 600 millones de inyección económica en el segundo departamento.
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Entre los requisitos para ser beneficiario del capital semilla de Tenonderã y de Proeza, se encuentra la condición de ser participante del programa Tekoporã Mbarete, el cual es administrado por el MDS. Familias campesinas y de comunidades indígenas de la zona, recibieron el pago este miércoles.
Proeza cuenta con financiamiento del Fondo Verde y la cooperación técnica de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), además del MDS y otras ocho instituciones del Estado integran la gobernanza del proyecto que contribuye a la adaptación y mitigación del cambio climático en comunidades campesinas e indígenas.
El ministro de Desarrollo Social Tadeo Rojas, agradeció en nombre del gobierno a la FAO “por estar acompañándonos y porque hoy tenemos una relación interinstitucional más fuerte y sólida. Hoy nos hemos sentado y hemos dicho la necesidad de que trabajemos en equipo, no dispersos, y hoy nos estamos vinculando con más fuerza a lo que es Proeza con los participantes de Tekoporã”, resaltó.
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En San Pedro, recuperan vehículo robado en mayo de la ciudad de Limpio
Este domingo, la Policía Nacional logró recuperar un vehículo que estaba denunciado como robado en el departamento de San Pedro. El rodado habría sido robado en mayo de este año en la ciudad de Limpio y tenía una chapa que no le correspondía, por lo que se presume que era utilizado para cometer otros delitos.
Según el reporte policial, la recuperación se logró durante un control de rutina que era realizado por agentes especializados del departamento de Investigaciones de Hechos Punibles, sobre la ruta PY 08 Blas Garay de la compañía de Loma Puku, donde se incautó el vehículo.
Se trata de un automóvil de la marca Kia de color plata, cuyo conductor antes de pasar por la barrera decidió cambiar de rumbo. Una vez que evadieron el control se produjo una persecución, pero el conductor junto a sus acompañantes lograron zafarse de los efectivos policiales.
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Sin embargo, continuaron con las patrullas y rastrillaje por la zona, y a unos 5 kilómetros los ocupantes abandonaron el móvil. Al realizar la inspección del auto pudieron constatar que no contaba con la chapa en la parte trasera y en la parte delantera portaba la chapa N° BNZ 930, que corresponde a otro vehículo.
Durante el procedimiento también fueron incautados, una mochila con prendas de vestir, herramientas de uso de carnicería, bolsas arpilleras y un aparato celular. Los intervinientes presumen que este era usado con fines de robo como abigeato, teniendo en cuenta las evidencias encontradas.
Una vez que encontraron el rodado se convocó a personal de la Comisaría 18ª Santa Rosa del Aguaray y del departamento de Criminalística y el Ministerio Público, que pudieron corroborar que fue denunciado como hurtado en fecha 28 de mayo en la jurisdicción de la Comisaría 9ª Limpio.
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