El sábado en horas de la tarde, un grupo de personas se autoconvocaron en el Centro de Asunción, más precisamente frente al Panteón de los Héroes, para supuestamente manifestarse contra la muerte de las dos menores de edad, ocurrido el miércoles de la semana pasada durante el enfrentamiento entre la FTC con los criminales del EPP.
El hecho finalmente desencadenó en una serie de terribles actos vandálicos por parte de los manifestantes, quienes realizaron todo tipo de inconcebibles actos de salvajismo. Pintaron las paredes del Panteón, un patrimonio histórico y cultural de nuestro país y como broche de oro quemaron la bandera paraguaya, el símbolo patrio.
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Los actos fueron grabados y viralizados casi al mismo tiempo, lo que además de producir graves daños a la infraestructura y a la decoración del lugar, causó gran indignación por parte de la ciudadanía. Por lo que los internautas también se pronunciaron en ese sentido, y solicitaron que las autoridades tomen cartas en el asunto.
Porque la opinión de nuestros lectores siempre es importante, hoy les consultamos lo siguiente: El acto vandálico contra el Panteón de los Héroes ¿Cómo debería ser castigado?
Una gran mayoría de los votantes, el 89% considera que “Los responsables deben ir a la cárcel, los símbolos patrios se respetan”, mientras que el 8% señaló que “Mínimo con una alta multa” y solo el 3% cree que “El repudio ciudadano es más que suficiente”.
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Sobre el caso, cabe mencionar que a pedido del Ministerio Público, en la tarde del domingo fueron imputadas tres mujeres Mariángela Abdala Carísimo, Giselle Ferrer Pasotti y Paloma Chaparro Panimboza, que a su vez cuentan con orden de detención, por la comisión del hecho punible de daños a bienes de patrimonio cultural.
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Un furioso jefe policial golpeó a un perro en manifestación indígena
Un alto jefe policial, molesto por el cierre de la ruta y en un intento de ordenar el despeje de la calzada, procedió a golpear con una silla a un perro que se mezcló con los manifestantes indígenas.
El hecho ocurrió hoy viernes en la zona de Caaguazú, en donde nativos se estaban manifestando cerrando en forma intermitente la ruta PY13, a la altura del Kilómetro 187, cuando la autoridad de la Policía agredió con un palo a niños, mujeres y hasta al animal, según se observa en un video viralizado en redes.
Se trata del comisario Saturnino Bonussi Giménez, quien estaría acusado por un hecho de homicidio de un joven de 17 años, que atropelló una barrera policial, ocurrido en el año 2023.
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Los indígenas se manifestaron esta mañana, para pedir la asistencia económica y social a las autoridades del Instituto Paraguayo del Indígena (Indi).
En el video se observa cómo el uniformado arremete con furia contra el indefenso animal, golpeándolo con una silla de plástico que tenía en su poder.
La Dirección de Protección Animal emitió un comunicado sobre el hecho de agresión al can y ya está analizando las eventuales sanciones para el uniformado. “Repudiamos todo acto de violencia contra los animalitos”, señala dirección.
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A 20 años del secuestro y muerte de Cecilia Cubas: “Hasta ahora nos preguntamos ¿por qué ella?”
Por Karina Ríos (karina.rios@nacionmedia.com)
Hoy se conmemora dos décadas del secuestro de Cecilia Mariana Cubas Gusinky, hija mayor del expresidente Raúl Cubas y la exsenadora Mirta Gusinky. Cecilia era una persona alegre y con muchas ganas de vivir, cuya vida fue truncada por el grupo criminal autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Con solo 31 años, Cecilia fue tomada de rehén por el grupo criminal que tres meses después decidió acabar con su vida. Su familia aún se pregunta por qué la mataron y acompaña en el dolor a cada uno de los secuestrados en Paraguay.
El 21 de setiembre del 2004 Cecilia estaba por llegar a su casa cuando fue interceptada por el EPP, que en medio de disparos y mucha violencia la secuestró. “Hasta ahora nos preguntamos ¿por qué ella? ¿por qué le hicieron esto? ¿por qué le mataron? Son preguntas que nunca van a tener respuesta porque no hay forma de justificar lo que le hicieron”, expresó su hermana, Silvia Cubas, en entrevista con La Nación/Nación media.
Resaltó que recuerda todo como si fuese ayer y que los cuatro meses que Cecilia estuvo secuestrada fueron de esperanza, de que pudiera volver con vida de aquella terrible pesadilla.
“Nadie está preparado para atravesar una situación como la que nos tocó vivir a nosotros y les toca vivir a otras familias acá, en Paraguay, pero llega un momento en el que te das cuenta de que lo que te mantiene en pie durante un secuestro es la esperanza de que tu familiar, en este caso mi hermana, sea liberado y pueda volver sano y salvo”, subrayó Silvia.
Terminó la esperanza
La familia Cubas Gusinky quedó destrozada tras la terrible noticia de que su querida hija Cecilia fue hallada muerta en una casa de la ciudad de Ñemby, pero entregarse al dolor no era una opción por lo que se propusieron a buscar justicia. Durante estos 20 años hubo logros importantes, fueron condenadas varias personas, pero aún hay prófugos.
“Cuando esa esperanza se termina, lo único que uno piensa es ¿qué vamos a hacer ahora? En nuestro caso, como familia, decidimos que no íbamos a entregarnos al dolor que nos produjo lo que le hicieron a Ceci. Sobre todo mi mamá, Mirta Gusinky, que dedicó su vida a pelear por una justicia verdadera para mi hermana”, relató.
Silvia profundizó que aprendió a convivir con lo que vivieron como familia, “uno no se olvida, no es que pasa, es una marca, una herida que uno lleva de por vida” y para la que nadie está preparado, “que le pongan precio a la vida de un familiar y que decidan matarlo porque no cumpliste con las expectativas o simplemente porque era el plan que tenían diseñado”, lamentó.
Primera víctima fatal del EPP
Cecilia Cubas es la primera víctima fatal de secuestro del EPP, su trágico desenlace conmocionó a la sociedad y marcó la historia del país.
“Fue la primera víctima mortal del EPP y es impresionante cómo el país sufrió con lo que le pasó. Creo que, a través de nuestras palabras, es como que toda la gente la pudo conocer y hasta quererle. Entonces, es como que esto fue un golpe realmente para todos los paraguayos, no solo para la familia y los amigos de Cecilia”, indicó Silvia a LN.
“Era una luz”
Recordó a su hermana mayor como una persona alegre, auténtica, cariñosa, generosa y muy inocente, que nunca veía malicia en las demás personas. Explicó que Cecilia pensaba que todas las personas eran como ella, buenas, jamás hubiera imaginado que unos criminales iban a acabar con su vida.
“Era una luz, brillaba siempre y no necesitaba decir ni hacer nada, transmitía muchísima alegría donde quiera que vaya. Era una persona súper sensible y las situaciones dolorosas le afectaban muchísimo. Era mi hermana mayor, pero a la vez era como la más chica de la casa, siempre la cuidamos y protegimos más, porque no veía malicia en nadie”, afirmó.
“La Justicia hizo su parte”
Tras el fatal desenlace, el Ministerio Público inició las investigaciones logrando condenar a 11 personas por el secuestro y muerte de Cecilia. Entre ellos Osmar Martínez, Anastasio Mieres Burgos, Francisca Andino, Vaciano Acosta, Pedro Chamorro, José Domingo Hidalgo, Manuel Portillo, Roberto Otazú, Rosalba Jara Drackeford, Lidia Samudio y Aldo Meza.
“En el caso de Cecilia todos los detenidos ya fueron juzgados y están cumpliendo su pena o siguen siendo juzgados. Podemos decir que la Justicia hizo su parte, pero nos queda mucho por delante y aún quedan muchos prófugos. Nuestra batalla está lejos de terminar, pero claramente tengo que decir que nos gustaría que el EPP desapareciese”, acotó Silvia.
En la familia no pierden la esperanza y creen que hay instituciones que se están formando correctamente y que están trabajando bien. “En algún momento va a dar resultado visible todo el trabajo que se está haciendo. Hay que tener en cuenta también que muchas veces para que se llegue a algo con un grupo como el EPP hay mucho trabajo por detrás y no es un simple golpe de suerte para que sucedan las cosas”, manifestó.
Justicia por los secuestrados
Silvia pidió justicia para las familias de los que están secuestrados, con quienes mantienen un contacto muy estrecho, porque es una situación que no se puede dejar pasar. “No tenemos que olvidar que hay todavía personas desaparecidas, cuyas familias aún siguen esperando noticias de ellos, esto no toca mucho. Tenemos que unirnos para luchar de manera correcta no solo por un futuro, sino por un presente mejor para cada uno de los compatriotas”, apuntó.
Instó a la población a luchar contra este grupo criminal, a no apañar estos crímenes. “Acá la lucha debería ser siempre de los buenos contra los malos. Todo lo que ellos predican de que han luchado por los más necesitados son mentiras, porque han secuestrado y asesinado a miembros de la sociedad paraguaya sin distinción de ningún tipo”, concluyó.
Datos clave
- El cuerpo sin vida de la joven fue hallado 5 meses después, en febrero de 2005, en una fosa cavada en una vivienda ubicada en Ñemby.
- Su familia pagó 300.000 dólares por su liberación, a mediados de noviembre de 2004.
- Osmar Martínez y Anastasio Mieres Burgos fueron condenados a 25 años de prisión y 10 años de seguridad por el secuestro y homicidio de Cecilia Cubas; luego de afirmarse que cometieron los delitos de homicidio doloso, privación de libertad, secuestro, extorsión, extorsión agravada y asociación criminal.
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Silvia Cubas: “Hasta ahora nos preguntamos, ¿por qué ella?”
- Por Karina Ríos
- karina.rios@nacionmedia.com
Hoy se conmemora dos décadas del secuestro de Cecilia Mariana Cubas Gusinky, hija mayor del expresidente Raúl Cubas y la exsenadora Mirta Gusinky. Cecilia era una persona alegre y con muchas ganas de vivir, cuya vida fue truncada por el grupo criminal autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Con solo 31 años, Cecilia fue tomada de rehén por el grupo criminal que tres meses después decidió acabar con su vida. Su familia aún se pregunta por qué la mataron y acompaña en el dolor a cada uno de los secuestrados en Paraguay. El 21 de setiembre del 2004 Cecilia estaba por llegar a su casa cuando fue interceptada por el EPP, que en medio de disparos y mucha violencia la secuestró. “Hasta ahora nos preguntamos, ¿por qué ella?, ¿por qué le hicieron esto?, ¿por qué le mataron? Son preguntas que nunca van a tener respuesta porque no hay forma de justificar lo que le hicieron”, expresó su hermana Silvia Cubas, en entrevista con La Nación/Nación media.
Resaltó que recuerda todo como si fuese ayer y que los tres meses que Cecilia estuvo secuestrada fueron de esperanza, de que pudiera volver con vida de aquella terrible pesadilla. “Nadie está preparado para atravesar una situación como la que nos tocó vivir a nosotros y les toca vivir a otras familias acá, en Paraguay, pero llega un momento en el que te das cuenta de que lo que te mantiene en pie durante un secuestro es la esperanza de que tu familiar, en este caso mi hermana, sea liberado y pueda volver sano y salvo”, subrayó Silvia.
La familia Cubas Gusinky quedó destrozada tras la terrible noticia de que su querida hija Cecilia fue hallada muerta en una casa de la ciudad de Ñemby, pero entregarse al dolor no era una opción por lo que se propusieron a buscar justicia. Durante estos 20 años hubo logros importantes, fueron condenadas varias personas, pero aún hay prófugos.
“Cuando esa esperanza se termina, lo único que uno piensa es ¿qué vamos a hacer ahora? En nuestro caso, como familia, decidimos que no íbamos a entregarnos al dolor que nos produjo lo que le hicieron a Ceci. Sobre todo mi mamá, Mirta Gusinky, que dedicó su vida a pelear por una justicia verdadera para mi hermana”, relató. Silvia profundizó que aprendió a convivir con lo que vivieron como familia, “uno no se olvida, no es que pasa, es una marca, una herida que uno lleva de por vida” y para la que nadie está preparado, “que le pongan precio a la vida de un familiar y que decidan matarlo porque no cumpliste con las expectativas o simplemente porque era el plan que tenían diseñado”, lamentó.
PRIMERA VÍCTIMA
Cecilia Cubas fue la primera víctima fatal de secuestro del EPP, su trágico desenlace conmocionó a la sociedad y marcó la historia del país. “Fue la primera víctima mortal del EPP y es impresionante cómo el país sufrió con lo que le pasó. Creo que, a través de nuestras palabras, es como que toda la gente la pudo conocer y hasta quererle. Entonces, es como que esto fue un golpe realmente para todos los paraguayos, no solo para la familia y los amigos de Cecilia”, indicó Silvia a LN. Recordó a su hermana mayor como una persona alegre, auténtica, cariñosa, generosa y que nunca veía malicia en las demás personas. “Era una luz, brillaba siempre y no necesitaba decir ni hacer nada, transmitía muchísima alegría donde quiera que vaya. Era una persona supersensible y las situaciones dolorosas le afectaban muchísimo. Era mi hermana mayor, pero a la vez era como la más chica de la casa, siempre la cuidamos y protegimos más, porque no veía malicia en nadie”, afirmó.
“LA JUSTICIA HIZO SU PARTE”
Tras el fatal desenlace, el Ministerio Público inició las investigaciones logrando condenar a 11 personas por el secuestro y muerte de Cecilia. Entre ellos Osmar Martínez, Anastasio Mieres Burgos, Francisca Andino, Vaciano Acosta, Pedro Chamorro, José Domingo Hidalgo, Manuel Portillo, Roberto Otazú, Rosalba Jara Drackeford, Lidia Samudio y Aldo Meza.
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El Salvador: exigen liberar a detenidos “inocentes” en la guerra antipandillas de Bukele
Más de un millar de personas marcharon este domingo en El Salvador para exigir la liberación de miles de detenidos a los que consideran “víctimas inocentes” en la “guerra” contra las pandillas emprendida desde 2022 por el presidente Nayib Bukele.
Los manifestantes caminaron en el centro de la capital en contraposición al desfile oficial por el 203 aniversario de la Independencia de Centroamérica, antigua colonia española. “Mi hijo es inocente. Mi hijo no es delincuente y yo a él lo defiendo donde sea, porque mi hijo no debe nada”, dijo a la AFP en la caminata Noemi Velásquez, ama de casa de 41 años.
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Velásquez señaló que su hijo, Edenilson Velásquez, de 25 años, fue arrestado “injustamente” en su puesto de trabajo el 10 de mayo de 2022 en la ciudad de Zacatecoluca (sureste). En respuesta a una escalada de 87 homicidios en un fin de semana, Bukele instauró en marzo de 2022 un régimen de excepción que permite detenciones sin orden judicial y que acumula 82.000 salvadoreños capturados.
Detenidos inocentes
Según organismos humanitarios, un 30 % de los detenidos son inocentes. “Yo lo único que le pido al presidente [es] que me lo devuelva, porque es mi único hijo y lo amo”, señaló Velásquez al romper en llanto.
“Yo no sé si él estaba vivo, está muerto, yo no sé”, declaró, por su parte, Ana García, de 62 años, al implorar a las autoridades información del paradero de su hijo Ricardo Martínez (30), capturado hace 11 meses en la localidad de San Sebastián Salitrillo (oeste).
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Durante la marcha, varios de los manifestantes, muchos protegiéndose del sol con paraguas, portaron fotografías de los detenidos a los que denominaron “víctimas” del régimen de excepción. También levantaron pancartas en las que pidieron a Bukele el fin de “tanto atropello” por las detenciones “arbitrarias”.
Con la cruzada antipandillas, el gobierno redujo las extorsiones y los homicidios descendieron en forma drástica. Al cierre de 2023, se reportaron 2,4 homicidios por cada 100.000 habitantes. Sin embargo, Amnistía Internacional y Human Rights Watch han denunciado “malos tratos”, “detenciones indiscriminadas” y casos de tortura en el país, por lo que claman por el fin del régimen de excepción.
Fuente: AFP