Con el lema “Creá conexión para la educación”, Sonidos de la Tierra lleva adelante su campaña denominada “Angirũtech” (Amigo tecnológico), que tiene como objetivo colectar computadoras y celulares en desuso, pero que aún funcionen para entregar a niños, niñas y jóvenes de las escuelas comunitarias de música de la red Sonidos de la Tierra.

El emprendimiento tiene como finalidad atenuar la exclusión educativa en tiempos de COVID-19, facilitando el acceso virtual a las clases de música, a los talleres de habilidades para la vida y a las tareas escolares en esta nueva forma de vivir. Según la Dirección Nacional de Estadística, Encuestas y Censos, 8 de cada 10 niños no tienen una computadora.

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El programa busca el apoyo de la ciudadanía para llegar a 1.000 niños de 70 escuelas comunitarias de música en todo el país. Las donaciones serán entregadas por acta a las Comisiones de Apoyo de la Red Sonidos de la Tierra y ellas, a su vez, distribuirán los equipos a las familias más necesitadas que forman parte del programa.

Los interesados en donar los equipos en buen estado pueden contactar con Tierranuestra al teléfono (0981) 937-200 (WhatsApp), al correo sfranco@tierranuestra.org.py o a la cuenta @SonidosPy en Twitter, Facebook e Instagram.

La pandemia del COVID-19 ha alejado a los estudiantes de las aulas y las lecciones presenciales fueron reemplazadas por pantallas de distintos dispositivos, que buscan seguir siendo un puente entre los educadores y sus alumnos. Sin embargo, el impacto económico ha reducido la capacidad de las familias de comprar equipamiento tecnológico o, incluso, de cargar saldo en los celulares.

“Esa computadora que ya no usás o ese celular que querés cambiar serían un tesoro invaluable y una significativa inversión para las familias y los niños que los necesitan para seguir estudiando y acceder a más y mejores oportunidades. Les alentamos a donar esos dispositivos y crear conexión para la educación”, expresó Lucha Abbate, directora ejecutiva de Tierranuestra.

La Red Sonidos de la Tierra está conformada por escuelas comunitarias de música en varias localidades del país. Niños y jóvenes encuentran allí espacios seguros para desarrollar su autoestima e incorporar valores, hábitos y actitudes a través de la música. Sonidos de la Tierra es un programa de emprendedurismo social de la organización Tierranuestra.

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Como una manera de afrontar la nueva realidad y adaptando la educación a un modo COVID-19, durante estos meses las escuelas comunitarias de música brindaron oportunidades a 1.053 niños y jóvenes de 50 ciudades, con 44 instructores encargados de brindar una formación integral.

“Los niños están dando clases de música a distancia con sus profesores de Sonidos de la Tierra, eso les ayuda a seguir aprendiendo, a estar activos y motivados durante el encierro. Ante todos los desafíos, llegamos en el primer semestre a un 53% de participantes en el programa y ahora nos ocupa el 47% restante: esos 1.000 niños y niñas que no tienen celulares o computadoras, para que sigan aprendiendo música y reciban su educación escolar”, destacó el maestro Luis Szarán, director de Sonidos de la Tierra.

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