Lorena Monges, de 18 años, se encontraba merendando con una amiga española en el restaurante El Racó, frente a las ramblas de Barcelona. Fue entonces cuando inició el atentado en el que al menos 13 personas murieron y más de 50 resultaron heridas, cuando una furgoneta arrolló a una multitud en el turístico paseo.

"Yo no estaba en la calle, sino en un restaurante que está en la Rambla", explica Lorena. "Los policías nos dijeron que permanezcamos dentro del restaurante, pero menos mal, no me pasó nada a mí, una hora y media después, pudimos salir."

"Había policías por doquier, sirenas, todos los bares y centros comerciales estaban cerrados", relata, todavía impactada.

La paraguaya describió el ambiente como "muy pesado", y con mucho alboroto, ya que es una calle muy transitada por los turistas."Y más ahora que es el mes en donde más extranjeros vienen", dice refiriéndose al tiempo de verano en el continente Europeo.

Lorena vive con su familia paraguaya en Barcelona. Su madre, Basilicia Monges, se mudó hace 10 años al país. Sin embargo, la joven solo lleva 9 meses allí.

Lorena junto a su madre en Barcelona, España.

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